〔:🍓:〕「 16 」 ༄˚⁎⁺˳✧༚

1.2K 138 64
                                    

El peliblanco llegó a su habitación del hostal después de haber desayunado en casa de Heizou. Se había quedado un rato hablando con él, un rato en el que Heizou insistía en si quería hablarle de algo que lo preocupara. Kazuha comprendía las buenas intenciones de su amigo, pero en realidad ya no había nada que lo atormentara, aparte por supuesto del reciente dolor de la pérdida de Tomo que ya había compartido con él.

Le había dicho que todo estaba bien, que su pasado estaba en el pasado y que no tenía que preocuparse por él. Le había confesado que el abrazo y la conversación que habían mantenido la noche anterior lo habían ayudado mucho más de lo que podía imaginar. La mera compañía de Heizou lo había ayudado más de lo que podía imaginar.

Ahora, en su habitación del hostal del que iba a irse, estaba con Aether. Kazuha volvió a agradecerle que lo ayudara con el traslado de un hostal a otro. Aether era un chico rubio, muy simpático y altruista, hermano gemelo de Lumine. Los dos habían venido desde Liyue, donde habían tenido que pasar nueve meses antes de poder mudarse a Inazuma debido a los problemas que estuvo dando el gobierno de la nación para aceptar la entrada de extranjeros.

Aether era muy agradable. Sus gestos eran cordiales y a Kazuha le gustaba pasar tiempo con él. Era un chico muy natural y sencillo con el que se podía hablar de cualquier cosa y eso al peliblanco le gustaba.

—Creo que voy a volver a Liyue —dijo Aether de pronto, cerrando una caja llena de libros.

Kazuha arqueó las cejas, sorprendido. El rubio llevaba ya un tiempo algo cabizbajo, como si estuviera dándole vueltas a algo. Y ahí estaba ese algo que tanto lo inquietaba.

—No me termino de acostumbrar a las clases aquí, ni me siento completamente a gusto. Extraño Liyue un montón... —Aether suspiró—. Un pedacito de mí se quedó allí... Me sentía en casa, sentía que era mi hogar...

—Y tu novio también vive allí, ¿no? —recordó Kazuha, cargando unas cajas hasta la puerta.

Aether le había hablado de su novio en múltiples ocasiones porque le gustaba la música igual que a Kazuha. De primeras era un chico algo gruñón y antipático, pero Aether aseguraba que Xiao tenía un corazón lleno de amor para dar, solo que lo reservaba demasiado.

—Ese es el pedacito de mí que se quedó allí —respondió el rubio con una sonrisa amarga—. Y también mi hogar.

—Si resulta que vuelves, coméntale lo de formar un grupo conmigo y Barbatos —dijo Kazuha.

—Se me hace raro decirle Barbatos. Llamémoslo Venti sin más —rio Aether.

—Bueno, Venti. Cuéntale la idea que tenemos de formar un grupo los tres. Necesitamos a un buen bajista y, según tú, Xiao lo es —sonrió el peliblanco—. Oh, por cierto, mira.

Rebuscó en su mochila, tirada en el suelo, hasta sacar una libreta. La abrió por las páginas de atrás, llenas de garabatos y de borradores de poemas y canciones hasta dar con lo que buscaba. Le mostró a Aether un dibujo bastante curioso, algo así como dos alas de color turquesa, abstractas pero reconocibles.

—Venti me escribió para decirme que se le había ocurrido un nombre para el grupo: Anemo —explicó Kazuha—. Resulta que Anemo significa «viento» en griego o algo así, no lo recuerdo exactamente. La cosa es que pensé que el viento es la libertad, que la libertad se puede representar como unas alas... Ya sabes, volar libre y eso. Y me vino la inspiración de golpe y garabateé esto.

—Oh... Me gusta —sonrió Aether. Seguidamente sacó su móvil—. Déjame que le saque una foto para enseñárselo a Xiao...

—Claro.

Serendipia [Heikazu] (High School AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora