Semanas después...
Cómo era de esperarse, la noticia y las fotos de que Wanda y yo habíamos tenido una maravillosa cita fueron virales, estuvimos en las portadas de varias revistas. Ambas seguimos con nuestra gran actuación, pero creo y
sólo creo que yo soy la única que no está actuando.Ahora tenemos una nueva situación: Yel y Kate.
Recuerdo perfectamente como el día después de la fiesta ninguna de las dos fueron capaces de verse a la cara y en estas últimas semanas están jugando un nuevo juego llamado “Si tú vienes yo me voy”. Clint es la única persona que no sabe de la situación y no para de preguntar qué sucede con ambas, yo solamente me escabullo.
—Nat... — Kate se sentó a mi lado en las gradas donde yo veía a Wanda jugar fútbol.
Después de nuestro gran partido, aquel deporte se había convertido en el favorito de casi todos los estudiantes.
—Hey hola.— saludé sonriéndole.
—¿Vigilando a tu novia?— preguntó dándome un pequeño empujón.
—Debo vigilar que nadie la mire de más.— bromeé haciendo que ella riera y los hoyuelos de su rostro se marcaran.
—Creo que no solo vienes a eso.—levantó ia ceja juguetona.
—¿A que te refieres?
—Nada, nada.— se encogió de hombros sonriendo pero aquella sonrisa se fue apagando poco a poco.
—¿Qué sucede Katy?— pregunté acercándome a ella.
—No es nada, sólo... — suspiró pesadamente y escondió su rostro entre sus rodillas.
—¿Sólo que?
—Es Yel. Desde que sucedió lo de la fiesta... Ella me gusta ¿de acuerdo?— se levantó de un brinco algo exasperada.
—¿Te... Te gusta? ¿Cuál es el problema?— pregunté recuperándome del susto que me dio.
—¿Cuál es el problema?... Me acosté con ella totalmente ebria y si mi papá se entera la cuelga, me cuelga y te cuelga.— explicó caminando de un lado a otro.
—Sigo sin entender el verdadero problema.
—¡Yelena me evita!— exclamó colocando las manos en su cabeza. —Me evita y cuando al fin tengo el valor para preguntarle que clase de relación tenemos, la encuentro conqueteándole a otra estirada.
—Estás celosa...— afirmé y ella me penetró el alma con sus ojos avellana.
—Lo estoy, pero esto no se va a quedar así. Voy a demostrarle que puedo jugar mejor que ella y tú vas a ayudarme, Romanoff.
—¿Cómo dices que dijiste?— pregunté impresionada.
—Te aseguro que nada le va a dar más fuerte en el orgullo que saber que me gusta su hermana.— afirmó con una sonrisa maliciosa, Kate se parecía a Cint cuando quería hacerle una broma a Mister Calvin.
Daba miedo.
—Ay joder...— susurré levantándome de un salto cuando ella me jaló.
Yel me había confesado que le gustaba Kate, si hacía lo que creo que Kate está pensando, Yel me ahorcaría.
No me equivoqué...
Dia 1:
—¡Nat!— exclamó Kate corriendo hasta los brazos de la ojiverde.
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Pizza con...¿peperoni? | Wandanat
FanfictionNatasha Romanoff ama su trabajo. Pero...¿Qué clase de chica con 20 años dice eso? La respuesta es sencilla. Natasha Romanoff es repartidora de pizza, y lo mejor de ese empleo, aparte de sus grandiosas prestaciones, es que muchas veces hay mujeres jo...