27 de julio, 2018
Canberra, Australia.La luna estaba en su punto más alto, esa noche era especial. Pues sería espectadora de la famosa luna de sangre. Había estado esperando esa fecha más que las vacaciones de fin de curso.
Había requerido a los tapones de oídos, la música de la casa que estaba en la esquina de su cuadra estaba perturbándola. No había querido llamar a la policía por tres razones:
1. La policía haría un mayor escándalo que la misma fiesta reportada.
2. Su hermano estaba ahí.
3. Él también estaba ahí.Vio por última vez el reloj que tenía en la muñeca faltaban dos minutos para que el espectáculo comenzará, estaba muriéndose de calor sin duda julio y abril cada año competían por ver quién era el mes más caliente.
Se recostó sobre el tejado de su casa para poder observar lo hermosa que estaba la luna en esa noche, por primera vez se sentía bien por vivir en Australia ya que según lo que ella había leído sería visto en Asia, Australia y América del norte, le resultaba un poco irónico que los lugares en donde se podría observar únicamente comenzarán con la letra A.
—¿Por qué todo me recuerda a ti? —suspiró.
Blake nunca fue una gran fanática de ver este tipo de cosas, pero esta vez sintió demasiada curiosidad así que decidió abandonar su habitación para ver el espectáculo. Se supone que este era un suceso que no sucedía con frecuencia, así que quería pasar su primera experiencia.
En un punto de la noche, Blake cambió los tapones para los odios por los audífonos de su reproductor de cassettes portátil, escuchaba un mixtape que su hermano le había regalado por su cumpleaños, realmente era uno bueno, habían canciones que no había escuchado antes, pero que le gustaron y varias de sus canciones favoritas.
Esa mañana Blake había escuchado a su madre hablar con su hermano acerca de que tenían nuevos vecinos. La casa de enfrente que estaba vacía desde hace varios años al fin había sido ocupada, pero desde que escuchó a su hermano y madre hablar de ello no vio a la familia que acababa de mudarse, sabía que era una familia grande.
Días previos la chica se había puesto cómo tarea investigar todo acerca de la luna de sangre que esperaba presenciar esa noche. Así que estaba lo suficientemente informada acerca del tema, Blake solía ser así, solía estudiar, investigar y comprender cualquier cosa que tuviera que ver con la naturaleza y en especial con la astronomía.
Cole, el hermano mayor de Blake solía burlarse de ella por eso, decía que era cómo una enciclopedia humana, mientras que Cole se burlaba de ella por eso, Ashton. El mejor amigo de su hermano le decía que eso era fabuloso y siempre se mostraba interesado por las cosas que ella decía.
Quizás esa fue una de las cosas que la enamoraron de él. Ashton era tres años mayor que ella, él y su hermano se habían mudado a un departamento en la ciudad de Brisbane, ya que ahí era dónde estaban estudiando. Pero debido a las vacaciones ambos habían venido de visita a Canberra, su ciudad natal.
—¿Cuánto tiempo demorará más esto? —bufó.
La paciencia no era algo que formara parte de la vida de Blake, aún tenía la vista en el cielo, no habían muchas estrellas por lo que no había mucho para apreciar en excepción de la luna. Las lámparas que habían en las calles de su vecindario eran muy tenues por lo que apenas podían alumbrar algo, eso estaba facilitándole muchas cosas.
El mixtape no duraba mucho, por lo que antes de que este llegara a su fin ella regresó a su habitación en busca de varios cassettes, a sus amigos les parecía bastante anticuado que en pleno siglo XXI ella siguiera haciendo uso de los cassettes. Pero para Blake no había forma más hermosa que escuchar musica desde cassettes.
Su abuela le había pegado esa costumbre, ella fue la persona que más influyó en su vida, ella fue la razón de que en su colección de musica hubieran muchos clásicos. Cuándo ella murió le dejó toda su colección de cassettes a Blake. Ella era su única nieta mujer y también la única que apreciaba esa forma de escuchar música. Al igual que la música en discos de vinilo.
Además de que escuchar música en cassettes tenían más un significado sentimental, porque sin duda no era muy cómodo llevar un reproductor portátil y un par de cassettes siempre contigo, cuándo solía salir de su casa los dejaba y prefería escuchar música desde su celular.
Estaban por dar las once de la noche y la luna parecía empezar a tener un cambio notable. Eso fue cómo un alivio para la chica, pero entonces pasó algo que la hizo levantarse del tejado rápidamente, una luz le había llegado a los ojos, su rostro era muy expresivo así que el supuso que su mensaje había sido bastante claro ya que la persona al otro lado de la calle dejó de apuntar hacía ella con la luz de la lámpara.
Parecía que había un chico en la habitación que quedaba justamente frente a la suya, él llevaba una lámpara en la mano cómo si estuviera buscando entre toda esa oscuridad.
—¿Por qué demonios no sólo enciendes la luz? —preguntó ella con un tono más fuerte de lo habitual, lo hizo para que el chico al otro lado de la calle pudiese escucharla. Funcionó.
—Un cableado se ha averiado y una parte de la casa se ha quedado sin luz —explicó el chico con la misma fuerza que la chica—. Lamento haberte interrumpido con lo que sea que estaba haciendo.
—De acuerdo, pero, ¿podrías no apuntarme con esa intensa luz? —dijo de manera más amable.
—¡Por supuesto!
Debido a la oscuridad Blake apenas podía verlo, sólo veía su silueta su rostro apenas era visible para ella.
—¡Soy Luke y creo que ahora somos vecinos!
—Sí, eso me parece. Yo soy Blake.
—De acuerdo Blake, ahora tendré que dejarte para que sigas con lo tuyo, supongo que nos veremos en otra ocasión que no sea igual a esta.
—Esperemos que sea una más agradable.
—Estoy seguro de que será más agradable, buenas noches Blake.
—Buenas noches Luke.
Ella volvió a recostar en el tejado y observó a la luna y se llevó una sorpresa al ver que en esos cortos momentos que apartó la vista lo rojizo comenzó a ser más visible. Y por el resto de la noche se olvido de todo y se concentró únicamente en la luna de sangre.
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Only | lrh
FanfictionBlake ha estado profundamente enamorada del mejor amigo de su hermano desde hace bastantes años, pero él es un amor imposible. Luke, un chico recién llegado de la ciudad de Sídney, pasa por unas dificultades mientras trata de adaptarse a su nueva ci...