Casa

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Capítulo 13

Erin

Termino de recoger mi mochila y bajo a esperar que me recoja el chofer de mi madre, le envío un simple mensaje a Damián para que sepa que me voy a pasar tiempo de calidad en familia.

Me coloco mis auriculares para escuchar un poco de música mientras espero, al rato alguien toca mi hombro y me indica el camino para llegar al auto, dejo mis cosas a mi lado y todo el trayecto a la casa me la pase escuchando música, a los lejos veo la imponente mansión en la cual vive mi madre y al rato ya estoy saliendo de auto, veo a mi madre la cual sale a recibirme, me retiro los auriculares para poder saludarla.

- Mi querido bebé - me saludo abrazando mi cuerpo y yo sigo su muestra de afecto.

- Hola mamá - saludo de vuelta para caminar detrás de ella.

- Vamos te mostrare tu habitación, la cocina está en ese pasillo y la habitaciones arriba - sigue sin pequeño recorrido al cual no le hago caso para seguir su camino - está es tu habitación, espero que te guste - me muestra la gran estancia en azul lila y quiero reír por el gesto, odio ese color - espero que te guste - afirma y solo asiento a su gesto.

- Bajare cuando me cambie - digo para que salga de la estancia y me deje sola.

Reviso todo a profundidad y me sorprende ver un closet con buena ropa dentro, veo algunos trajes de baño para decidir lo que haré al rato, dejo mis cosas en su lugar para tomar un simple conjunto negro para colocármelo y tomar una toalla y bajar al área de la piscina, me sorprende encontrar a mi pequeño hermano junto a Damián los cuales ríen muy alegre, me apresuro a llegar a su lado.

- Oye hermana, disculpa a Scarlett, desde pequeña se le ha dado todo así que no puede aceptar que nuestros padres estén juntos - quise reír por dentro mientras lo veía, parece sincero.

- No te preocupes, ya la perdone - suelto una pequeña sonrisa de lado y Damián llega a mi lado para besar mis labios, el presente se asombra por la osadía de su amigo - hola mi amor, ¿qué haces aquí? - agregó preguntando.

- Solo vine a pasar la tarde con mi amigo - explica de manera rápida y quiero borrar lo que ha sucedido.

- No he visto nada, procura que Scarlett no los vea, se pondrá como loca si se entera que ustedes andan - afirma antes de irse del lugar.

Tomo asiento a su lado para ver cómo llama a alguien del servicio que trae bocadillos para nosotros, voy a nadar un rato mientras él sigue pidiendo algunas cosas más, cuando salgo lo veo a mi lado, sentado al borde de la piscina, tomo su mano para que venga a mi lado. Acaricio su rostro para después besarnos, este acaricia mi glúteo para mover un poco el panti; siento sus dedos jugar conmigo y yo solo puedo suspirar por su toque.

- Disculpe joven, su comida - interrumpe la chica del servicio y nos alejamos de manera rápida.

- Gracias, puedes dejarnos solos ya - dice de manera rápida y yo solo beso su hombro para salir de la piscina - me invitaron a la cena, así que me quedaré toda la noche aquí - agregó siguiéndome y yo solo sonrío.

- Vamos a mi habitación - susurró para los dos y el asiente para tomar la bandeja que habían dejado minutos antes.

Camino por el lugar hasta llegar a mi habitación la cual abro de manera rápida para dejarlo pasar, deja la bandeja en la mesita de noche y yo voy hasta el closet para buscarme ropa seca. Enciendo la televisión y dejo que el se acomode; camino por su alrededor mientras me quito el traje de baño, por primera vez observo sus azulados ojos y puedo mirar su deseo, me acerco a su cuerpo y dejo que el acaricie mi cintura.

Comienza a besar poco a poco mis hombros para ir bajando despacio sus caricias hasta mis senos, por la sorpresa caigo en sus piernas y la poca tela que cubría mi desnudé fue retirada.

- Te deseo tanto - murmura y quiero levantarme de sus piernas, quiero que me ames, quiero ser alguien que necesites en tu vida.

- Te quiero Damián - digo sin pensarlo mucho y el para sus caricias para mirar mis ojos, el tiene un peculiar brillo en su rostro.

Me levanto para arrojarme a la cama, porque no me ama, estoy perfectamente depilada, estoy hidratando muy bien mi piel, siempre huelo rico y lo único que puedo conseguir de él son unas simples caricias; casi quiero gritar de la rabia y aunque este desnuda a sus ojos el no se ha movido ni un poco.

- Damián, debes irte - susurró mientras se me quiebra la voz, mis lagrimas brotan por si solas y siento como acaricia mi rostro.

- No llores, solo quería tener más tiempo para decirlo - trata de decir pero yo sigo con mi pequeño teatro.

- No soy suficiente para ti, creí que si era mejor y más linda, tu no dudarías - suelto y veo el arrepentimiento en sus ojos, cubro mi cuerpo para alejarme de su toque.

- Eres suficiente, eres lo mejor que me ha sucedido, quiero que conozcas a mi familia, quiero un futuro contigo, quiero hijos contigo y es raro ya que no tenemos mucho tiempo de conocernos pero quiero eso y más contigo - exclama con alegría en su voz y por su entusiasmo sé que debo fingir que todo está bien, sabiendo que el solo se está hundiendo cada vez más en mi.

- Bésame - murmuró cerca de sus labios y el se apresura a tomar mi cara entre sus manos para cumplir mi deseo.

Siento sus húmedos labios y por este momento creí que podría ser humana por una vez en mi vida y ser vulnerable ante alguien, me aferro a su mojado cuerpo para quitarle su traje de baño, y poder mirar su cuerpo totalmente desnudo, sus besos siguen bajando hasta sentirlo en mi feminidad, suelto un genuino gemido cuando siento su lengua jugar en ese lugar.

- Pídemelo - dice mientras aprieta uno de mis senos y yo solo puedo pensar en su lengua, la cual sigue en lo suyo, me aferro a su cabello para tirar de él.

- Mierda Damián - gimoteo fuerte y claro, el se levanta para restregar su erección en mi entrada, ahogó un grito cuando siento sus dedos entrar en ese lugar.

Lo miro y siento su respiración entre cortada y eso me enciende mucho más, veo sus movimientos y solo quiero que siga su propósito y que me posea como suya; cuando por fin estoy sintiendo su gran pene alguien toca la puerta con mucha insistencia.

- Chicos disculpa que los molesten, pero Scarlett acaba de llegar y está buscándote Damián - gritan detrás de la puerta haciendo que suelte un grito de molestia.

Recordatorio mental, romperle la boca a ese maldito niño, esta me la pagarás Javier.

- Invéntale algo, salgo al rato - le grita de vuelta y quiero morirme de la molestia.

- Quítate, vete con ella - lo alejo de mi para salir corriendo hasta el baño, en el cual me encierro.

Al rato siento como salen de la habitación y exploto, grito de la molestia y arrojo todo lo que está en este lugar, con mi puño rompo el espejo del baño y cuando estoy satisfecha todo una ducha para fingir que esto no me ha fastidiado, esta me la pagarán malditos niños.

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MalignaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora