LA MARCA

4.3K 545 32
                                    

Era un lucha de besos y lenguas.

Ella necesitaba tanto de ese contacto que por un momento olvidó que es lo que estaba haciendo anteriormente.

Fenrir la levantó y depositó en la mesa del comedor.

Sus manos acariciaban su cintura y sus largas piernas sin dejar de besarla.

Tanto era el deseo de tenerla que sus colmillos emergieron por si solos.

Su instinto estaba tomando el mando.

_ Fen...rir, tus... colmillos.

Fenrir olfateó su cuello raspando un poco su suave piel.

En un movimiento la giró boca abajo y le retiró la falda de un tirón.

Hermione no podía pensar en otra cosa que no fuera estar unida a él completamente.

_ Mea bella reginae_ Fenrir dijo con un tono ronco.

Hermione levantó su cabello, dejando su cuello despejado_ hazlo.

Fenrir gruñó, acarició su centro con dedos maestros encontrándola demasiado húmeda.

Hermione jadeó por la invasión.

_ Mía_ Fenrir gruñó y bajó su pantalón apurado.

Su miembro erecto saltó de alegría al verse libre de la prisión de la tela del pantalón.

Fenrir lo guió con una mano hacia la gloria.

Se burló en su entrada solo introduciendo la punta.

_ Fenrir...

Él se inclinó_ shh, tranquila, esto debe ser así. No deseo lastimarte para nada.

Hermione sintió nuevamente la presión.

Él se hundió hasta la raíz.

Hermione gimió por el placer.

Luego Fenrir salió un poco y volvió a entrar.

Hermione se aferró a las orillas de la mesa solo por sostenerse a algo.

_ Voy a marcarte.

Hermione solo asintió, no tenía voz para responder coheréntemente.

Fenrir embistió varias veces controlándose para no venirse de placer.

Sus colmillos salieron mas y él ae preparó para morderle el cuello y marcarla como suya.

Le dolían los testículos por contenerse, pero esto debía ser al calor de la pasión y seguir embistíendola hasta que sus fluidos quedaran en sintonía. Si bien no le pasaría su licantropía, si se unirían.

Dos amantes en pleno acto sexual y placentero estaban a punto de unirse completamente en cuerpo y alma.

Hermione gimió con un orgasmo arrasador y fue cuando Fenrir la mordió.

Su miembro se hinchó completamente en su interior bloqueando cualquier salida de semen.

Hermione tuvo tres orgasmos, uno tras otro.

Luego Fenrir despegó su boca y dientes de su frágil cuello.

Mientras que su miembro caía en las reminicencias de aquél orgasmo que lo llevó a la luna y de regreso.

Lamió la herida saboreando la sangre de su pareja lunar.

Sus ojos cambiaron a un tono normal después del amarillo ambarino.

Hermione se dejó caer laxa en la mesa, sin ningún control de su cuerpo.

Fenrir salió de su interior y ella se quejó por la pérdida.

Él deseaba hacerle el amor de nuevo, pero ella cayó en la inconsciencia.

La cubrió con el mantel de la mesa y la cargó_ Ahora somos uno, Mea bella reginae, nada, ninguna ley podrá separarnos ahora. Mi semilla crecerá en tu cuerpo corréctamente.

_ Mmm_ fue todo lo que Hermione respondió.

PARA SALVARLODonde viven las historias. Descúbrelo ahora