Yokubō 欲望

Capítulo 1: Boda

Katsuki observó su reflejo en aquel enorme espejo, aquel atuendo blanco hacia resaltar el color rojo de sus ojos y combinaba con su rubio cabello.

Mil pensamientos pasaban por su mente en aquel momento ¿Cómo es que terminó haciendo aquello que renegó toda su infancia? ¿Cómo era posible que él, el gran Katsuki Bakugo, se convertiría en el flamante esposo de aquel Alfa de verdes cabellos?

Desde que era niño, Katsuki aborreció aquellos estereotipos, "que un Omega debía ser delicado y sumiso", "que tener un Alfa era lo que te hacía sentir completo", "que tener cachorros sería el mayor logro en su vida" ¡Vaya mierda!

Jamás se sintió inferior por ser un Omega, estaba orgulloso de serlo, y estaba seguro que lograría todo lo que se proponía sin importar las mierdas que los otros digan.

Ciertamente no esperaba casarse, y menos aún tan joven y a causa de un matrimonio arreglado.

El arreglo que sus padres dejaron al morir era simple, debía contraer matrimonio con el primogénito de los Midoriya. De esta forma aquella enorme empresa de diseño tendría un líder fuerte que guiará a la compañía en un próspero futuro.
¿Cómo si él, por ser un Omega, no pudiera hacer esas cosas?

Pero a decir verdad, realmente no le interesaba pasar el resto de su vida frente a un escritorio.
Prefería estudiar alguna carrera y valerse por si mismo, aunque la sociedad considerará que un "delicado" Omega no podía hacer aquello.

Por suerte para Katsuki, su futuro esposo, aquel que se transformaría en su Alfa, era nada más y nada menos que aquel idiota amigo de la infancia, Izuku Midoriya.

Deku siempre fue comprensivo y tierno, jamás lo menosprecio por ser un Omega y al igual que él, consideraba que aquellos estereotipos de los Omegas eran mal fundados.

Izuku realmente consideraba que Kacchan era fuerte e inteligente y podría hacer lo que quisiera. Así qué a pesar de contraer matrimonio, le aseguró al Omega que podría continuar con sus estudios y estudiar cualquier carrera que quisiera.
Él también lo haría. Después de todo solo tenían 18 años, aún tenían mucho que vivir.

A pesar de que había sido un matrimonio arreglado desde incluso antes de que ambos nacieran, la verdad es que tanto Izuku como Katsuki se sentían felices por contraer matrimonio. Se habían enamorado, ¿Desde cuando? Quien sabe.
Solo sabían que eran destinados.
Izuku amaba la fiereza, fuerza y determinación de Kacchan y Katsuki amaba aquella personalidad tierna y la brillante sonrisa que le dedicaba el idiota de Deku, aunque no se lo dijera, era evidente que el peliverde lo sabía.

Katsuki dió un último arreglo a su blanco traje mientras se observaba en el espejo, en solo unos minutos aquella ceremonia daría comienzo.

-Te ves muy hermoso, Katsuki- Lo elogió aquella mujer de verdes cabellos y mejillas regordetas cuando ingresó a la habitación.
-Estoy realmente feliz por ambos- Comenzó a sollozar su futura suegra, Inko Midoriya. Esta agitaba su mano tratando de no llorar, si lo hacía arruinaría su maquillaje.

Katsuki no dijo nada, solo esbozó una pequeña sonrisa. Aunque estuviera muerto de nervios, no dejaría que los demás se dieran cuenta.

-Vamos mamá, lo pondrás nervioso- Ingresó tras la mujer un joven Alfa de cabello negro y verdes ojos.
-Lo siento Kac...Katsuki- Se disculpó mientras tomaba a la mujer por los hombros.

-No hay problema, Yamikumo- Respondió el rubio a aquel conocido chico, el hermano menor de Deku.
Realmente Yamikumo e Izuku tenían la misma edad, después de todo eran gemelos. Pero el peliverde había nacido un par de minutos antes que su hermano, por lo que se ganó el título de primogénito y por ende el compromiso con Katsuki.
Los hermanos eran bastantes parecidos físicamente, al ambos ser Alfas tenían el mismo tipo de cuerpo fuerte y musculoso, también sus rostros eran redondos y cubiertos de pecas, inclusive sus cabellos eran igual de alborotados, lo único que podía diferenciar a ambos era el color de su pelo.