Yokubō 欲望

Capítulo 15: Llamada

Las cosas entre Izuku y Katsuki habían avanzado bastante. Luego de que este ultimo le confirmara al peliverde que si quería formar una familia con él, su relación solo fue mejorando; cada día se demostraban su amor, compartían las tareas de la casa, pasaban largas horas charlando y riendo, y al caer la noche se dormirán acurrucados. La rutina hogareña entre ello era simplemente perfecta.

Y así fueron pasando los días, las semanas, e inclusive los meses, entre los controles prenatales del rubio y la vida hogareña que ambos compartían.

De la misma forma, el frío característico de finales de año, y con ello el día del examen de grado de Katsuki también se acercaban, este se encontraba algo nervioso e inquieto, pero de igual forma confiaba en si mismo, ¡El era Katsuki Bakugo por todos los cielos! Claro que podía con un "simple" examen teórico, aunque ese simple examen determinara su futuro como medico.

Cuando aquel día finalmente llegó, Izuku acompaño al rubio hacia el lugar del examen. Lo dejo en la U.A. despidiéndose de él con un tierno beso para luego pasear por los alrededores, pues sabia que Kacchan estaría ocupado la mayor parte del día, y él no podría estar a su lado durante el examen.
De todas formas Izuku no se alejaría mucho del lugar, pues debía cuidar de su Omega.

Si, las cosas con Kacchan estaban bastante bien, pero Izuku aún quería avanzar un poco más en su relación. Quería enlazarse con él, cada noche que hacían el amor, sus instintos le pedían a gritos que lo hiciera.
Y si la relación iba tan bien ¿Por qué no lo había marcado aún? La respuesta era simple, Izuku tenía miedo, miedo de que Kacchan sintiera que lo presionaba, miedo de lo que le pudiera pasar a los cachorros en su vientre si alguien que no era su progenitor marcaba al Omega, la verdad el pecoso no tenía muy claro qué pasaba en un caso así, y no se atrevía a preguntarle a Kacchan respecto a eso.

Es por eso, que solo hablaba de aquello con la única persona en la que podía confiar.

~¿Y por que no se lo preguntas a algún medico?~ Cuestionaba el bicolor al otro lado de la línea telefónica. ~Yo tampoco se mucho de eso~

-Si, tienes razón. Tal vez debería hacerlo la próxima vez que Kacchan y yo vayamos al control prenatal- Afirmó el pecoso mientras caminaba hacia la U.A. llevando en su mano un vaso de chocolate caliente y una pequeña bolsa con algunas galletas para el rubio, pues de seguro este tendría algo de frío y hambre cuando saliera del examen.

~Hablando de eso, ¿Cómo están los cachorros?~

-Según el medico están muy bien de salud, solo hay que evitar que Kacchan pase por situaciones de mucho estrés, espero que su examen de grado no le afecte demasiado-

~Ojalá así sea ¿Y ya se enteraron del sexo?~

-Mmmm... en parte, el doctor nos confirmó que uno de ellos es un niño, sin embargo el otro aún no ha dejado verse con claridad-

~Pues ya falta muy poco para que nazcan ¿no? ¿Cuanto tiene Bakugo? ¿7 u 8 meses?~

-Ocho, solo falta un mes para que Kacchan y yo tengamos a nuestros cachorros en nuestros brazos- Sonrío alegremente el pecoso.

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Katsuki salió bastante agotado del edificio, su espalda dolía y su estómago rugía, ese par de mocosos en su vientre no habían dejado de moverse durante todo el puto examen. Ahora que finalmente terminó con eso solo quería marcharse, comer algo y dormir el resto de la fría tarde.
Sin embargo, el incesante gruñido de su estomago, era prueba de que primero tendría que ocuparse de eso. Con pesar camino hacia una de las maquinas expendedoras del campus, tal vez un chocolate o unas galletas podrían tranquilizar su estomago por el momento.