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Capítulo 41

Sentí molestias en el cuerpo y ganas urgentes de ir al baño, pero, aunque quería no podía despertar, intenté abrir los ojos, mover mi cuerpo, hablar, pero sentía que una nube volvía a tragarme, y volví a perder la conciencia.

No se por que me siento así tan perdido, pero abrí los ojos un poco antes que luz me hiciera cerrarlos de nuevo, estoy sentado en la parte de atrás del auto, y escucho voces lejanas, sin entender que dicen. Me sentó con tanto sueño, pero quiero volver abrir los ojos y levantarme, pero mi cuerpo reacciona lento, apenas si puedo mover mis manos y apretar los puños. Volví a dormir de nuevo.

¿Qué me pasa?

Esta vez, abrí los ojos y mire a mi alrededor sorprendido, estaba en el asiendo de un avión, mire a mi lado y Mew estaba tranquilo mirando su teléfono con los ojos arrugados. ¿Qué hago aquí? Una azafata daba indicaciones sobre el vuelo, y las personas hablaban a mi alrededor, lo que me provocaba algo de dolor en la cabeza, unas pulsaciones que le hicieron cerrar los ojos de nuevo, llame a Mew para que mirara cuando volví a abrir los.

-Mew...

Tengo seca la garganta, trate de tragar para volver a hablar, pero Mew me vio de inmediato y me acerco una botella de agua, había tanta preocupación en sus ojos cuando me miraron. Intente tomar el agua con las manos pero se sentían flojas, y temblorosas.

-Despertaste, ¿te sientes bien?, ¿quieres agua? -asentí sin poder hablar, la abrió rápidamente y la puso en mis labios, cuando incline la cabeza y deje de beber volvió a preguntar - ¿quieres comer algo?, ¿estas mareado?, deberías descansar un poco Gulf.

-No, no, y no, no quiero dormir de nuevo, me siento tan cansado de dormir, ¿Qué me paso? ¿Por qué estamos aquí? -aunque estaba hablando bajito y tranquilo, no me siento de esta forma, hay una tormenta formándose en mi interior a punto de estallar, - ¿Qué me hiciste? -empecé a recordar, estaba discutiendo con Mew, porque él quería llevarme a casa, ¿casa? - ¿A dónde me llevas?

Las manos de Mew sujetaron las mías cuando dejó el agua a un lado, intente soltarlas pero las sostuvo más fuerte.

-no te alteres Gulf, por favor. Respira profundo. -siguio acariciando mis manos, pero las solté rápidamente.

- ¿Qué no me altere?, -grite. Sorprendiendo a Mew y a todos en el avión, la azafata corrió a nuestro lado de inmediato haciéndome sentir avergonzado por llamar la atención de esa forma. No me sentía enojado, bueno si me sentía enojado, pero me sentía más desilusionado, decepcionado, más triste por lo que me había hecho Mew.

Mire hacia la ventana mientras él intercambiaba palabras con la señora, no quería que viera el dolor en mis ojos, mi cabeza dolía aun más que antes al haber gritado de esa forma. De todos los lugares donde podríamos ir juntos, ¿tiene que ser esa casa? Aunque esto podría significar que mis padres me quieren de vuelta.

Yo ya no soy el mismo de antes, el tiempo lejos de casa, me hizo más fuertes, ya no tengo pesadillas, tengo un amigo, y Mew me quiere, no de las misma forma que yo, pero lo hace, eso significa que esta vez no podrán hacerme tanto daño.

-Gulf, sino fuera una emergencia por la que volvemos, no te obligaría a ir.

Volvió a tomar mis manos y las apretó en las suyas, lo deje consolarme aunque estuviera con tanto sentimientos negativos, el amor que sentía por Mew sobrevolaba todo.

-Pero pudiste haberlo explicado, y no me sentiría de esta forma, -hice una pausa antes de volver a mirar sus ojos y hacerle una pregunta -¿me dejaras ahí?

-No claro que no, yo te prometi que estaría contigo y no te dejaría, y voy a cumplir mi palabra Gulf, solo necesito que confíes en mi.

Dejó mis manos y tomó mis mejillas en su lugar, me acercó a su rostro y me dio un beso pequeño, solo un roce, pero sentí un impulso y me incline para besarlo un poco más. La suavidad de sus labios calmaron los temblores de los míos.

-Todo va a estar bien. Lo prometo.

-Tienes que saber algo antes de que pueda enfrentar a mis padres de nuevo Mew, -debería contarlo, para que pueda alejarme de todo lo malo que es mi padre, debería decirle todo lo que me hizo. Pero no se si podrán salir esas palabras de mi boca.

-Te escucharé todo lo que tengas que decir, siempre puedes contarme todo Gulf.

Se veía preocupado, y ansioso, su expresión no había cambiado, desde que abri los ojos y lo mire eso era lo único que podía ver a través de sus ojos. No quiero causarle más estrés, y más preocupación, quiero protegerlo de mis demonios.

-No me dejes solo en una habitación con mis padres Mew. Por favor, ¿puedes prometer lo?

Puso su frente junto a la a mía y me miro a los ojos, no seré quien le cause tantos problemas a Mew.

-Lo prometo Gulf, no te dejaré estar solo, ni cuando vayas al baño. Lo prometo.

Me separe de él al escuchar su promesa, y me acomode en mi silla, mientras despegaba el avión, una vez que estaba en el aire, me quité el cinturón de Seguridad, y me levante de mi silla.

-¿A donde vas Gulf? -la mano de Mes me detuvo a medio camino, lo mire y seguir caminando.

-Debo ir al baño, ahora regreso.

Camine por el pasillo despacio, la cabeza aun dolía, y mi cuerpo estaba débil, aun se sentía cansado, y con ganas de dormir, pero no quería hacerlo, ingrese a la pequeña cabina, y abri el agua para echarme en el rostro, evitando mirar el pequeño espejo, sabía que me veía mal, así que no quería verme y confirmar lo.

Escuche que tocan la puerta cuando acababa de descargar y limpie mis manos con antibacterial antes de abrir la puerta, y encontrar a Mew de pie esperando.

-¿Que haces aquí?

Mew me empujó dentro y cerro en su espalda, -Siempre quise hacer esto.

Se inclino sobre mi y me beso muy duro sobre los labios, levantando mis caderas con sus manos, así que las abrace con mis piernas y me acomode sobre él.

Nos besamos muy duro y nos separamos para tomar un poco de aire y volver a atacarnos. Sus manos no tocaban más allá de sostener mis caderas, y mis manos de su cabello no bajaron, solo nos besamos y acariciamos con los labios.

Tocaron la puerta y se escucho la voz de la azafata, -¿se encuentra bien señor?

-Si, en un momento salgo.

Mew contestó de inmediato y me sonrió antes de darme un roce en mis labios y bajarme al suelo, abrió el grifo del agua y lavo sus manos haciendo tiempo para que la muchacha se fuera y pudiéramos salir.

Esperamos unos minutos y salimos para caminar a nuestros asientos, mi ánimo mejoró considerablemente, después de esa iniciativa por parte de Mew, pero eso no significa que no este avergonzado por la mirada de las personas en el avión, estoy seguro que piensan que hicimos de todo ahí dentro, pero es inevitable, no se puede detener a Mew cuando quiere algo.

El vuelo lo sentí tan largo que hasta pensé que llegamos al otro lado del mundo, el momento de ir hasta la casa de mis padres, se acercaba, y yo me sentía más ansioso y enfermo.

Cuando bajamos del avión y tomamos la maleta que Mew había traído, me sentí aliviado, era pequeño y solo uno para ambos, lo que significa que no ha planeado quedarse tanto tiempo.

Un auto nos esperaba para llevarnos, así que subimos juntos y Mew me abrazo por los hombros y me tuvo todo el tiempo casi encima de él.

Las calles pasaban por la ventana y yo no podía concentrarme en lo que veía, el miedo y la ansiedad acumulándose en mi pecho. Mis manos empezaron a sudar, y temblar.

-Realmente no quiero ir allí Mew.

-Lo se, yo tampoco quiero traerte aquí. Pero aún así, debes ser fuerte, y no puedes tener miedo. Ya no. Tu ya estas superando todo, y no puedes retroceder, nada de lo que paso aquí es tu culpa, y no puedes asumir la responsabilidad de esto Gulf, escuchame, lo que vamos a descubrir no puede afectar te tanto como antes. Debes mantenerte fuerte.