Veneno

Capítulo 19.

Daphne.

Cap 19 nueva versión

—¿Quieres ser mi novia?

—¿Me lo pides por qué te lo pregunté? Si es así no quiero. —Pregunto indignada mientras que él sigue dando besos húmedos en mi cuello.

—Yo pensé que ya éramos novios.

—Pues no –Suspiro —Pero si es porque te lo dije no me lo pidas.

Para de dar besos en mi cuello y me mira.

—Malyshka, lo pido porque quiero que lo seas. Aunque para mí ya lo éramos pero bueno.

—Bueno.

Empieza a jugar con sus manos con mis pechos por encima del bikini.

—¿Entonces? –pregunta sacando uno de mis pechos y jugando con mi pezón

Miro a otro a otro lado y se me sale un jadeo cuando empieza a pasar la lengua por el pezón.

—Preguntamelo otra vez.

Rueda los ojos y empieza a succionar con fuerza.

—Alexei...

—Daphne.

Se que no se lo está tomando enserio así que lo aparto.

—Oye, estaba alimentandome.

—Te quedas sin alimento –Digo y empiezo a caminar a la orilla.

—No te pido ser mi novia porque solo me interesa tener sexo contigo, no seas tonta. —Dice y las lágrimas empiezan a salir.

No se inmuta y en vez de mirarme se queda mirando hacia el mar, me siento tan tonta por pensar que esto fue especial.

Y la verdad es lo fue, pero solo para mi.

Sigo caminando hasta llegar a la casa y me siento en las pequeñas escaleras a llorar, no soy de llorar pero yo le entregue mi cuerpo y él simplemente quiere sexo conmigo.

Después de unos minutos siento su presencia delante de mi así que levanto la cabeza de mis muslos y lo veo.

—Recoge tus cosas, que te vas a Alemania –Dice en tono agrió

—Bien.

Abro la puerta y entro a la casa, luego subo las escaleras con él detrás de mi.

Giro la perilla y ver lo que está en la cama me hace llorar.

La habitación esta llena de rosas rojas, hay un ramo gigante en cada mesita de noche y las orillas de la cama están llenas de rosas, las sábanas blancas perfectamente tendidas sin ni una arruga llenas de pétalos que forman "Preciosa, ¿Vas a ser mi novia?"

Miro a Alexei que esta sonriente esperando una respuesta de mi parte y lo golpeó en el hombro.

—Tonto –Digo sollozando.

—Quería ponerle drama al asunto –Me toma por la cintura llevándome hasta él.

—¿Hacerme llorar si fue un buen drama?