Capítulo 8

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El telegrama.

Ya era otoño. Emily estaba dando una de sus caminatas diaria en el bosque. Le gustaba hacer eso, pasar tiempo sola, pensando y hablando con los arboles y animales que estaban ahí.

-Me gustaría ser un árbol, tener un hermoso cabello en verano, flores preciosas en la primavera, vibrantes colores en otoño- exclamó mientras miraba a los árboles.

-En invierno serías clava, pero eres belle Emily, así que te quedaría bien- dijo una voz asustando a Emily.

-Espiar conversaciones privadas es malo Laurie y sabes que no entiendo francés- dijo la chica mirándolo a los ojos.

-Eres bella- dijo y Emily se puso roja.

-¿Qué?

-Eso era lo que dije, que aunque fueras calva serías bonita- le dijo Laurie con una sonrisa.

-Pues ¿Gracias? supongo- contestó y siguió caminando.

-¿Qué haces?- preguntó el chico.

-Camino.

-Ya se que caminas ¿Qué harás por la tarde?

Ambos chicos caminaban por el bosque que estaba pintado de colores cálidos por el otoño.

-Tengo que enseñarles matemáticas a Amy y a Beth- respondió la chica.

-¿Puedo ayudarte?- preguntó, la chica rodó los ojos y rio.

-Por supuesto.

(...)

Después de un rato, Emily volvió a su casa con Laurie pero al entrar era un caos. Sus hermanas daban vueltas por todos lados e incluso el señor Laurence y el señor Brooke estaban ahí.

-¿Qué está pasando aquí?- preguntó Emily cuando entró.

-Marmee recibió un telegrama, padre cayó enfermo- le dijo Meg. Esas palabras fueron mucho más que unas palabras, tuvieron el suficiente peso como para derrumbar el mundo de Emily.

-¿Qué? ¿Cómo? ¿Por qué?- preguntó la pelirroja pero nadie respondió. Así que fue a la cocina y vio como estaban guardando las cosas de Marmee, unas mantas, agarrando dinero. 

-Emily tranquila- dijo una voz y alguien acarició su hombro. Ese simple toque la hice volver a la realidad.

-¿Qué puedo hacer?- preguntó.

-Busca mantas, madre la necesitará- dijo Beth y Emily salió corriendo escaleras arriba.

Laurie la siguió. Nunca había visto a la chica tan preocupada.

-Debo ser fuerte, se lo prometí a padre- dijo en un susurro cuando estaba en el cuarto de sus padres.

-Emily- dijo Laurie y ella, sin dudarlo ni por un segundo, saltó a sus brazos y lo abrazó.

-Oh Laurie, tengo tanto miedo- le confesó.

-Tranquila, mi abuelo dijo que el señor Brooke irá con tu madre, él la cuidará y cuidará a tu padre- dijo mientras acariciaba su cabello.

-Si, madre es fuerte, todas lo somos- suspiró tras decir eso como si de algún modo esas palabras fueran pesadas.

Alguien entró a su casa así que Emily se separó del abrazo, agarró las mantas y bajó.

-¡Madre!- gritó cuando la vio.

-Emi, oh querida, tu padre- dijo cuando la abrazó.

-Ya lo se madre, ya lo se.

My lover || Laurie Laurence y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora