Capítulo 12

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La gran boda en el jardín.

Un nuevo año comienza y con el una gran sorpresa para la familia March. Todos los integrantes de la familia, a excepción de Meg, se encontraban en la sala escuchando las palabras del señor Brooke.

-Me ofrecieron un trabajo con el que conseguiré un buen sueldo, tengo ahorros para comprar una casa y sobre todas las cosas, señor March, amo a Meg. Mi amor hacía ella es mayor a cualquier cosa que el dinero puede dar. Tal vez no tengo mucho a comparación de otros hombres, pero le aseguro que su hija nunca se sentirá sola si usted me permite pedir su mano- le dijo al señor March. 

-Se que harás feliz a mi hija. Puedes pedir su mano. Yo se que ella te ama tanto como tú la amas a ella- dijo el señor March, John sonrió y agradeció. Luego se fue para pedirle a Meg que fuera su esposa.

-Es lo más romántico que he escuchado en mi vida ¡Parecía una escena sacada de un libro!- exclamó Emily cuando el señor Brooke se fue.

-Se llevará a Meg- dijo Jo seriamente.

-Tienes razón- dijo Emily tristemente. Quería que Meg fuera feliz pero no pudo evitar sentirse mal al pensar en ella yéndose de la casa.

¿La infancia se terminó? pensó.

Un rato después Meg llegó con una gran sonrisa en la cara y un anillo en el dedo.

-¡John me pidió matrimonio y le dije que si!- gritó y sus hermanas fueron a abrazarla.

-¿Cuándo será la boda?- preguntó Amy en la cena.

-Planeamos que sea en la primavera- dijo Meg.

-La primavera es una estación muy romántica. No porque me interese el romance, no me interesa el romance en lo más mínimo- dijo Emily cuando todos voltearon a verla.

-Si claro- dijo Amy pero Emily la pisó. 

(...)

-No puedo creer que Meg se casará, quiero decir, estoy contenta por ella pero no paro de pensar en que nada volverá a ser como antes- Emily estaba con Laurie en la casita del bosque.

-Nada es para siempre Emi, a veces los cambios son buenos- le dijo Laurie.

-Supongo que tienes razón, pero dan miedo. Me dan miedo.

Crecer, el nuevo temor de Emily March. No quiero dejar de ser así ¿Por qué no todo puede quedarse de la manera en la que es?

(...) 

Y como si el tiempo fuera impulsado por el más fuerte de los vientos, la primavera llegó y junto a ella la boda de Meg.  

En la casa de los March todo estaba adornado con flores. Amy tenía un vestido celeste, Beth uno rosado, Jo uno morado y Emily uno verde. Cada una llevaba una corona de flores, incluso Meg.

Jo y Emily estaban en su cuarto ayudando a Meg con su cabello.

La pelirroja miraba por la ventana, observaba a Beth y Amy que adornaban el jardín con flores.

-No puedo creer que hoy sea el día de mi boda- dijo Meg con una sonrisa mientras estaba sentada en una silla.

-Me alegra tanto- dijo Emily con una voz distraída. Jo estaba sentada en la cama e hizo un ruido con su boca.

-¿Qué tienen?- preguntó su hermana. 

-Nada- respondieron las dos.

-Jo, Emily.

-Podemos irnos, podemos irnos ahora, las tres juntas. Ganaré mucho dinero, venderé historias, haré lo que sea, cocinaré, limpiaré o trabajaré en una fábrica, haré una vida para nosotras- dijo Jo a los pies de Meg.

My lover || Laurie Laurence y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora