Liam:
Me tuve que ir durante un tiempo porque mi hermana recayó de nuevo, no pude avisar a Michael puesto que todo fue muy arrepentido y no tenía el móvil.
Volví veinte días después y nos reencontramos, parecía cansado y un poco raro, como si estuviera ocultando algo. No le di importancia porque di por hecho que era por el cansancio.
El día después de mi llegada no fui a trabajar, me merecía descansar. Me desperté con gran retraso. Desayuné lo que me dejó Michael y leí su nota con especial atención y calidez, era demasiado mono, esas cosas ya ni se hacían. Rocé la yema de mis dedos en las letras del papel y sonreí al imaginármelo escribiendo eso para mí, seguro que se lo estuvo pensando un buen rato.
Terminé de comer y sonó el timbre, era raro, no pedimos nada y Michael salía por la tarde del trabajo.
Abrí la puerta y, la verdad es que esperaba encontrarme a todos menos a él, era Gilbert.-Hola, ¿está Michael?-No le respondí, me preguntaba qué hacía ahí, se me vino a la mente de todo, de lo más bueno a lo más malo, aunque, la que más me molestaba era:
<<¿Ha pasado algo entre ellos mientras no estaba?>>
-Ah, lo siento, no me he presentado, soy Gilbert, el ex de Michael y su "amigo".-Hizo el gesto de las comillas con las manos. Eso me molestó hasta el punto de hacerme fruncir el ceño.-No he venido a hacer nada, sólo a recoger una cosa que me dejé por la mañana.
-¿Por la mañana? ¿Se puede saber qué hacía el ex novio de una persona que ya tiene pareja en su casa?
-Oh, por lo que veo, aún no te ha contado nada.
-¿Contarme qué?
-No es por nada, pero, ¿qué te esperabas? Desapareciste de la nada sin decir una palabra y no volviste en casi un mes. El pobre se desesperó, digamos que yo sólo lo seduje un poco para que cediera. No se merece a alguien como tú que lo abandona y luego vuelve como si nada.
-¿Me lo dices tú? Qué descaro. Sin embargo, algo me pareció curioso, ¿cómo que lo sedujiste?
-Me acosté con él, en la misma cama en la que dormís vosotros dos. Se emborrachó, lo llevé a su casa y me retuvo, no me dejó irme en toda la noche. De hecho, ¿quieres que te cuente algo? Creo que le gusto de nuevo, lo paso mal y me tuvo a mi a su lado, supongo que por eso sucedio. En fin, espero que dicho esto te aparte de nuestros caminos y nos dejes ser felices.
-Eso no es cierto.-Intenté convencerme, pero era cierto, lo dejé como si nada, era evidente que pasaría algo teniendo a Gilbert a su lado, es su ex novio, igual no lo superó del todo desde un principio y al tenerlo tan cerca de sus sentimientos volvieron a surgir. O, tal vez yo sólo era una distracción para olvidarlo igual que sus otros tres novios.
Le envié innumerables mensajes a Michael, incluso lo llamé muchas veces, al menos quería oír que no era cierto, quería oírlo de él. Sin embargo, no respondió a nada. Pasaron las horas y seguí convenciéndome de que no era cierto, pero no pude, no sabiendo que todo apuntaba a que sí. Me harté de esperar, quería respuestas pero no las obtendría aunque hablara con él.
Decidí apartarme de su camino como dijo Gilbert, si quería ser feliz con él yo no era nada más que un obstáculo. Me fui sabiendo que me arrepentiría, sabiendo que no lo superaría fácilmente, quería que fuera feliz, y si lo pudiera ser sacrificando mi amor por él, lo haría, y así lo hice. Es increíble cómo amar a alguien te puede volver tan vulnerable y débil.Recogí algunas de mis cosas y le puse una carta de despedida en la mesilla de noche al lado de la cama, me fui a la sucursal de Las vegas para despejarme y no tenerlo cerca, además, está más cerca de San Francisco, donde estaba ingresada mi hermana
Después de coger el primer vuelo a Las Vegas recibí llamadas de Michael, al parecer al llegar no me encontré, pero no le contesté, me fui para alejarme y tratar de olvidarlo, no podía contestarle.
Pasó una semana desde que llegué, Michael se la pasó llamando, al final contesté, aunque con intención de decirle que no me llamara más y que lo nuestro se había acabado.
-Liam...por fin contestas, escúchame, eso no es cierto. Te juro que no pasó nada entre nosotros dos.-Su voz estaba incluso más apagada que la otra vez, más afligida. Al oírlo mi corazón se revolcó, parecía estar realmente mal. Pero no podía ceder, no a esas alturas.
-Michael, solo he contestado para decirte que ya no podemos estar juntos, no después de lo que hiciste y sientes por él, lo sé todo, no tienes porqué ocultarlo, pero, ¿sabes? Lo que me duele más es que no me lo hayas contado, el hecho de que me hubiera tenido que enterar por él. Así que, si aceptas mi consejo, déjame decirte que es mejor decir las cosas por ti mismo que dejar que otros hablen por ti.
ESTÁS LEYENDO
Para (Hasta) siempre.
RomanceTodo empezó con una sola noche, quien diría que gracias a esa noche empezaría una gran historia, una historia con un gran pibonazo de por medio, eso miso, con nombre y apellido, Liam Miller. ¿Realmente una decisión puede cambiar tu vida? La verdad e...