Min Yoongi: Reacciones [Pedidos Cerrados]

》One shot: Love Is Not Over

Advertencia: Capítulo muy largo. Continuación de 'What Am I to You?'

◇◇◇

Yoongi durmió a lo mucho una hora. No pudo dejar de pensar en las palabras de Audrey. "Todo lo que quería hoy era que me dijeras 'Gracias'..."

¿Qué había sucedido? ¿Tanto habían cambiado en dos años? Todo parecía igual; los mismos gustos de siempre, las mismas conversaciones, las mismas peleas; y pronto se dio cuenta de que quizá ese era el problema. Su relación se había convertido en una rutina. No se había planteado la gran pregunta en más de un año, pero, ¿seguía enamorado de ella o solo estaba acostumbrado a tener novia?

Además recordó las veces en las que la tentación (con un par de chicas) casi le ganó, pero terminó por resistirse y desecharlas. Sin embargo, ahora se preguntaba, ¿fue por amor o por compromiso?

A pesar de dormir poco, se despertó a las 8 de la mañana con la sorpresa de que Audrey no estaba a su lado. Él pronto se alarmó. Sabía que si ella hubiese ido al baño, vería la luz encendida reflejada bajo la puerta, pero no, la puerta estaba abierta y la luz apagada.

Se levantó casi al brinco y la fue a buscar en todo el departamento, encontrándola finalmente en el balcón, y recordó que eso era usual de Audrey.
Ella lo sintió acercarse y lo vio sentarse frente a ella en la mesa en la que comían cuando querían aire fresco o para tomar fotos, pues el escenario era precioso con las plantas alrededor y la decoración con madera.

Yoongi tenía una mirada de seriedad y los brazos cruzados mientras se acomodaba en la silla y veía hacia al horizonte, intentando evitar mirar a Audrey por miedo y vergüenza. Él no sabía exactamente qué debía decir, pero estaba claro que debían hablar.

– Pensé que dormirías hasta tarde – comentó ella.

– Yo también pensé que harías eso. Casi no dormiste – señaló, ahora con su mirada fija en la mesa mientras sus dedos jugaban sobre esta. No recordaba haber sentido tanta tensión en una conversación con ella desde que la conoció.

– No pude... así que decidí venir a tomar aire fresco y pensar un poco acerca de lo de anoche.

– Ok. Entonces, ya que estoy aquí, empecemos.

– ¿Qué cosa?

– Dijiste que hoy debíamos hablar.

Ella bufó por el cinismo de su novio. No había mucho qué agregar después de traer a colación todas las sospechas y resentimientos de su relación. Había cambiado por completo el ambiente.

– Eso te dije antes de discutir. Los temas de los que hablamos anoche nos hicieron daño. Ya no podemos decir nada sobre nuestros conflictos sin tomarlo personal y recordar lo que pasó ayer.

– ¿Entonces cómo piensas arreglar esto? Yo quiero hacerlo, pero veo que tú no – él se levantó de la silla, predispuesto a entrar de vuelta al departamento.

– Deja el drama y siéntate. ¿Cómo quieres arreglar las cosas con esa actitud?

– Mira quién lo dice – contestó, alzando la voz, pero se dio cuenta y se calmó para volver a sentarse.

– ¿Yo? Al menos no hago drama. ¿Qué es eso de incitar a una discusión y después irte?

– Es lo que hiciste toda la noche... pero no quiero seguir discutiendo eso. El tema es otro. ¿Tú crees que he cambiado desde que vivimos juntos? Dime la verdad – planteó, tal vez un poco precipitado. Convencido de que ese era el problema.

Audrey, principalmente sintió vergüenza. Es verdad que ella lo había incitado haciendo un drama desde que llegaron a la casa, sin ser directa con lo que le molestaba; era obvio ahora que su intención sí era la de cagarle su noche especial. Sin embargo, la pregunta de su novio la dejó desconcertada, ¿a dónde quería llegar?