Un océano de distancia

Capítulo 9

—Él se llama Adam, nos conocimos hace un año, y empezamos a salir entonces. —comenzó Tyler después de que una mesera dejara café y pastel que encargó para ambos. Tomó la cuchara y comenzó a picar el trozo de pastel mientras hablaba. — Al inicio era fácil porque íbamos en la misma escuela, es apenas un poco mayor que yo. Todo iba bien, era una relación normal, aunque a veces discutíamos por tonterías, siempre se arreglaba bien y todo seguía como de costumbre.

—Suenas a que algo malo sucedió. ¿Te hizo daño?

Tyler negó en silencio y dejó la cuchara para tomar la taza de café bebiendo apenas un sorbo para tratar de disminuir la tensión que comenzaba a invadirle.

— ¿Qué te hizo? —cuestionó Zilark con mayor seriedad al notar que Tyler no parecía querer continuar.

—Es complicado. Todo lo fue desde que él salió del colegio y entró a la universidad. —suspiró bajando la mirada y se mordió el cachete por dentro pensando cómo explicarlo todo sin que pareciera demasiado grave, no quería que Zilark le viera como una víctima, ni nada parecido. —Adam cambió mucho, y a la larga también trataba de hacerme cambiar. Llegó un punto en que no estuvimos de acuerdo en algo y él decidió botarme solo por eso.

— ¿Y qué era eso en lo que diferían? Si su relación fue lo que dijiste, ¿por qué motivo acabarían separándose? Eso no tiene sentido, ¿acaso los humanos no valoran a sus parejas?

—Por supuesto que lo hacemos. —refutó Tyler sintiendo que lo decía por él, tal vez pensaba que era tan indiferente que ni siquiera intentó arreglar las cosas con su ex. —Yo realmente quería a ese idiota, pero eso no le da derecho a tratar de obligarme a hacer algo para lo que aún no estoy preparado.

—Espera, no estaba hablando de que esté mal, solo trato de entender cómo funcionan ustedes.

—No importa. Supongo que de cierta forma tienes razón. —murmuró encogiéndose en la silla mientras sostenía la taza sobre la mesa. —Él me lo dijo, tal vez quien estaba mal era yo, no puedo creer que me limité tanto para terminar teniendo sexo contigo, cuando ni siquiera eres mi pareja y además tienes un compromiso real con alguien más.

Zilark no sabía cómo reaccionar ante ese comentario, primero que nada, ahora sabía que Tyler había estado fingiendo no recordarlo, por otro lado, al pensar en lo que le estaba contando y relacionarlo, entendió que lo que el tal Adam intentaba conseguir de Tyler era justo eso, ¿Acaso aquel tipo le había obligado a tener sexo con él solo por ser su pareja? Eso definitivamente no tenía justificación, y ganaba en relevancia, por lo que ignoró lo demás y se inclinó sobre la mesa posando una mano sobre las de Tyler, llamando de inmediato su atención.

—Oye, tú no eres quien se equivocó. Es verdad que para que una relación funcione, ambas partes deben intentarlo, pero eso no significa que deban dar algo tan importante solo por obligación. Si no sentías que era el momento, independientemente de lo que hicieras antes o después de él, no tenía ningún derecho a pedirte que te entregaras, mucho menos a forzarte.

—No..., no logró hacerlo. —murmuró Tyler mirándole conmovido, no esperaba que comprendiera después de lo que le dio a entender, mucho menos cuando le hizo algo injustificable al no querer continuar la noche anterior dejándole a medias. —No permití que siguiera, y se puso violento, cuando me dio un golpe pensé que sería peor quedarme y me fui de su casa, él me gritó que si salía no querría volver a verme, pero era eso, o dejar que volviera a pegarme y terminara incluso en algo peor. Esa fue la segunda vez que creí que sucedería incluso si yo no quería hacerlo, fue tan agresivo conmigo y decía que si estaba con él debía aceptar porque podría conocer a alguien más accesible en cualquier momento. Fue un idiota, todo lo que sentía por él fue desapareciendo conforme comenzó a comportarse así, aunque eso no evitó que me doliera terminar.