2. Game over

5K 195 706
                                    

El menor estaba desayunando, eran las 8 A.M. y Belos había salido por unas horas debido a que lo necesitaban en el trabajo por alguna urgencia así que no lo vería durante unas cuantas horas, el mayor le dijo claramente que no debía salir fuera de casa mientras se encontraba trabajando.

Pero estar en casa era aburrido, más cuando estaba solo y en la televisión no pasaban nada interesante, pensaba volver a dormir pero en eso, su celular sonó y decidió revisar, era Willow, un cosquilleo agradable apareció.

Willow lo había invitado a pasar un rato con ella y sus amigos en la Arcade que estaba en la plaza a la que fue ayer con Belos, estaba dudoso debido a que el mayor le había dicho específicamente que no saliera de casa.

En ese momento Hunter se puso a pensar, ¿Debería salir u obedecer la instrucción de Belos? Esa pregunta no dejaba de pasar por su mente, quería ir con sus amigos pero temía que Belos se enfadara y le diera una lección nuevamente.

–Tal vez no note que me fuí si llego antes de que vuelva del trabajo– Exclamó el menor quien empezaba a alistarse para salir con sus amigos al Arcade, estaba emocionado ya que tenía tiempo que no pasaba un día con ellos.

(...)

A lo lejos vió a sus amigos en la entrada del Arcade, estaba algo nervioso debido a dos cosas, que Belos llegara a casa antes de tiempo y que sus amigos no lo trataran igual pues había pasado tiempo desde la última vez que se vieron.

Pero uno de sus miedos desapareció en cuanto Luz se abalanzó a Hunter, formando un abrazo, el menor se quedó en silencio, sentía una extraña calidez que no había sentido en un largo tiempo, estaba confundido.

¿Por qué con Belos esa misma calidez era pasajera mientras que con sus amigos aquella calidez parecía no extinguirse? No lo entendía, pero de todas formas era agradable.

Los demás se unieron al abrazo, formando un abrazo grupal, Hunter inconscientemente comenzó a derramar lágrimas que iban recorriendo sus mejillas mientras correspondía el abrazo.

¿Por qué estaba llorando? Era lo que se preguntaba él, no se sentía triste, entonces ¿Por qué lloraba? No lo entendía pero de todas formas seguía llorando a pesar de no querer hacerlo.

–¿Estás llorando? ¿Qué sucede Hunter?– Exclamó Noceda quién se veía sumamente preocupada por el rubio, y claro que los demás también estaban preocupados por él, era su amigos después de todo.

–No, no sucede nada chicos, sólo fue un sentimiento nostálgico– mintió el menor, al final decidieron creerle mientras se limpiaba las lágrimas, entrando junto con sus amigos al Arcade ya que todos estaban emocionados por jugar.

(...)

Las risas se oían, el sonido de los juegos eran claros, un ligero y delicioso olor estaba presente, los menores pidieron algo de pizza para pasar el tiempo jugando videojuegos, había de todos, carreras, bailes, canto, etcétera.

El pequeño rubio no podía expresar lo feliz que se sentía, ese sentimiento de libertad, no sabía porque se sentía así, pero de todas maneras era tan gratificante poder sentirse así, jugar y comer con sus amigos sin lugar a dudas era lo mejor, era divertido.

Amity competía con Hunter para ver quién ganaba en aquél juego de disparos, al final ninguno ganó ya que quedaron en un empate, aunque Hunter ganó en el juego de carreras, celebrando esto con unos dulces, sus favoritos, aquellos chocolates con un refrescante trozo de menta.

Aquellas golosinas le recordaban al dulce olor de Willow, aquél olor refrescante y dulce que emitía, lo hacía sentirse tranquilo y en paz, nunca se cansaría de oler aquel hermoso aroma tan magnífico, era simplemente perfecto.

More than my body?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora