17. Cosas malas

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Edric Blight, el muchacho de cabellos verdosos, corrió todo lo que pudo hacia su casa del árbol, ahí tenía aquella grabación de voz que hizo de aquella vez que escuchó desde su walkie talkie.

aquella horrible grabación donde escuchó como Belos abusaba del menor, Hunter, si mostraba la grabación al comisario Darius, podría acabar con todo esto, sería su mejor oportunidad.

llegó a la casa del árbol, estaba exhausto pero por fin estaba ahí, es así que entró al ya mencionado lugar, para así darse cuenta de algo que le dejó con su sangre completamente helada.

-¿Qué?...¿La grabadora...está rota?- Fue lo único que pudo decirse a si mismo, cuando vió su grabadora en el suelo totalmente destrozada, esto claramente no fue un accidente.

Poco sabía Edric, que cosas malas se vendrían en un abrir y cerrar de ojos, pero claro que sabía que algo muy malo estaría por pasarle si no se iba de ese lugar ya, podía sentirse observado.

Sin pensarlo dos veces, corrió fuera de l casa del árbol, corriendo por todo el bosque, debido al pánico no podía encontrar la salida, ya que no estaba pensando con claridad.

No supo si fue su imaginación, no supo si no lo fue...pero juraba haber visto la silueta de Belos a la lejanía, no quiso comprobar si era verdad lo que vió, sólo decidió correr, correr hasta encontrar una salida.

Él no quería defraudar a Hunter, no quería morir, no quería nada de eso, corrió por todo el bosque...comenzando a oír pisadas atrás suyo, no estaba solo, eso ya estaba completamente claro ahora.

Con miedo, decidió mirar atrás suyo...gran error, muy gran error, puesto que observó a Belos a la lejanía queriendo acercarse a él, es así como supo que no podía dejar de correr, comenzando a gritar desesperado.

-¡¡ALGUIEN, AYUDA, POR FAVOR AYUDA!!- Las lágrimas no tardaron en recorrer sus mejillas, un menor huyendo de un monstruo como Belos, sentía su muerte muy cerca, demasiado.

En poco tiempo, las piernas del menor dejaron de responder, cayendo al suelo debido al cansancio, desesperado trató de levantarse mientras gritaba -¡AH! ¡AYUDA, AYUDA POR FAVOR!-

Miró detrás suyo, pudo ver a Belos caminando lentamente hacia él, como si de alguna forma quisiera hacerle entrar más en pánico, dándole a saber que ambos saben que Edric ya no tenía salvación.

Edric se arrastró, se arrastró porque sus piernas temblaban a tal punto que ni siquiera podía levantarse, pero en ese momento sintió una fuerte patada que lo tiró completamente al suelo.

-¡A..ACK!...Déjame ir, por favor..- Fue interrumpido por una nueva patada a su estómago lo cual lo hizo retorcerse, trataba de ser fuerte y soportar el gran dolor que su cuerpo sentía.

-Maldita larva asquerosa...Tal vez debiste ser otro ignorante más y no meter tus narices donde no te llamaban- Soltó Belos, quién volvió a patear el estómago del menor quien jadeaba adolorido.

Edric se arrastraba lejos del mayor, quería huir, no quería estar con él...pero sintió como su pierna fue pisada lo cual lo hizo gritar -¡DETENTE! MI PIERNA, MI PIERNA- Fue lo que gritó antes de ser golpeado nuevamente.

-Los mocosos como tú necesitan una lección...- Fue lo que dijo el mayor mientras se quitaba el cinturón, nada bueno estaba por suceder y eso era claro, Edric continuaba tratando de alejarse, en vano.

En ese momento, la mente de Edric sólo pudo llenarse de sus momentos con Hunter, con lágrimas en los ojos, ¿Acaso no lo volvería a ver? ¿Ambas almas se olvidarían?...No, no podía aceptarlo.

Sintió como el cinturón del mayor se convirtió en una mordaza para su boca, el menor sólo pudo sollozar mientras recordaba cada momento que pasó junto a Hunter.

More than my body?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora