More than my body?

7. Él me ama

La casa estaba silenciosa, Belos tuvo que salir a trabajar nuevamente mientras que Hunter seguía dormido, parecía que sería otra noche como cualquier otra.

Al menos eso pensaba, pero aquél walkie talkie que Edric le había regalado comenzó a sonar, lo que despertó al pequeño quien estaba durmiendo.

Tomó aquél walkie talkie y escuchó la voz del peliverde salir de este –¿Hunter? ¡Hunter responde por favor, soy Edric!– Exclamó Edric.

–¿Edric? Hmm...Disculpa, estaba durmiendo, pero ¿Qué necesitas?– Preguntó el rubio quien estaba apenas tratando de despertarse con dificultad.

Edric suspiró aliviado –Hunter tenemos que hablar, esto es serio. Esas heridas, no fue un accidente, por favor sé sincero conmigo – Aquel joven sonaba al borde del llanto.

Hunter entró en pánico, iba a descubrir sucio que estaba, debía de pensar rápido antes de ser descubierto, puso su mejor voz tranquila para comenzar una mentira.

–Oh ¿Las heridas? No fueron un accidente, verás había alguien que me molestaba mucho y llegó muy lejos entonces me golpeó de esta forma, yo me defendí, al final sus padres hablaron con Belos y acabaron por irse de aquí– Mintió el pequeño rubio.

Edric no sabía si creerle, por un lado Hunter sonaba que decía la verdad, pero algo seguía sin cuadrar –Entonces, ¿Por qué Belos da malas vibras? ¿Por qué cuando lo miro es como ver a un monstruo?–

El muchacho no estaba pensando, aquellas palabras salieron de golpe, Hunter no supo que decir ¿Belos un monstruo? Para la mente del joven eso no parecía ser verdad.

–No sé de qué hablas Edric, Belos ha cuidado muy bien de mi, en serio, no te preocupes– Hunter sabia que no podía decirle que estaba siendo aviolentado y abusado por un adulto de 25.

Sabía que si eso salía de su boca, Edric se alejaría de él porque estaba sucio, y siempre lo estaría, pero al mismo tiempo se estaba comenzando a preguntar.

¿Está bien juntarse con Edric sin que él sepa que está sucio? No le parecía correcto, podría ensuciar a Edric también.

–Edric, escucha yo...estoy sucio, siempre estaré sucio, no importa cuánto me lave o cuántas lociones me ponga, siempre estaré manchado de suciedad, es mejor que te alejes de mi– Confesó el menor con una voz rota.

El joven de cabello verde se quedó en silencio total ¿Él sucio? Eso no era cierto, y aunque lo fuera seguiría estando a su lado, después de todo él sólo veía a un joven amable que necesitaba comprensión.

Es así como decidió responder –¡No digas eso Hunter! No estás sucio, y si lo estuvieras me daría igual, eres increíble y mereces todo lo bueno del mundo, ¡El que haya dicho eso está mintiendo!– Exclamó el joven.

Hunter comenzó a llorar levemente, esas palabras lo habían hecho sentir bien, lo hicieron sentirse querido –¿En verdad piensas eso?– Preguntó el pequeño.

Recibió una respuesta afirmativa de Edric, se sintió tan feliz, el brillo de aquellos ojos vacíos volvieron a aparecer, era como si un rayo de esperanza hubiera sido restregado al cuerpo de Hunter.

Era como haber sido bañado en una luz cálida, ¿Es que acaso Edric será la luz que llene de esperanza al pequeño que estaba pasando por un cruel infierno?

¿Podrá Edric salvar al pequeño ser indefenso de las garras de ese monstruo horrible? ¿Podrá hacerle ver la verdad?

Edric volvió a preguntar –¿Estás seguro que aquella pelea ocasionaron las heridas, Hunter?– El joven rubio se quedó en silencio, no sabía si confesar sobre su relación.