¿Quién dijo que sería fácil? #CarlosSainzJr +18

Capítulo 14.

Nota: no olvides votar❤ te quiero.

Acomodo la chaqueta de mezclilla que compré al terminar el gran premio y observo como pasan los autos frente a mi, al terminar de alistarme decidi bajar hacia la salida del hotel para esperar al madrileño. Los nervios me carcomen por dentro y en momentos he llegado a arrepentirme de haber aceptado salir con él.

¿Ubican ese momento de arrepentimiento después de hacer una locura en un momento de arrebato? Pues estoy en ese punto. La preocupación ya pasó y ha venido la realización, la forma en que reaccioné llega a avergonzarme un poco pero ya todo está hecho y no tengo una máquina del tiempo para regresar al pasado y cambiar las cosas.

Tengo mucho miedo porque en realidad no tengo ni la más mínima idea de lo que estoy haciendo y con qué propósito. Todo fue muy rápido y aún estoy muy confusa con la situación, no sé a dónde nos va a llevar esto que estamos haciendo y eso es lo que más pánico me da.

Observo mis botas mientras muevo mis pies, a pesar de que hace un poco de viento helado el clima es demasiado agradable, ni frío ni calor,un punto medio perfecto.

Un Volkswagen plateado, exactamente un golf y si no me equivoco de este año se estaciona frente a mi y bajan la ventanilla mostrándome a un castaño sonriente esperando por mi. Sonrio mientras subo al coche y comprendo el brillo en sus ojos.

-Dime que no rentaste un coche cuando tienes uno a tu disposición y gratis.-regaño a Carlos quien no deja de tocar el volante del coche y yo observo con atención los interiores. Claramente es hermoso y admiro el gusto que tiene por los autos, no es una sorpresa para mi el que esté tan entusiasmado por manejar este, sus autos favoritos siempre han sido los golf, algo discreto pero sin dejar se ser elegante.

-No quería traer el ferrari y llamar la atención de todos los paparazziz.-arranca transformando su rostro de felicidad a uno más serio.

-¿Te das cuenta que este auto también llama mucho la atención?.-pregunto con una sonrisa burlona. Lo veo intentar no sonreír pero falla porque me dedica una rápida mirada. Solo ese acto provocó que una ráfaga de cosquillas atravesara todo mi eestómago.

-Mi plan no era traer este pero no pude resistirme al verlo ahí. Me hacia ojitos.-dice provocando que yo ría un poco. Está tan loco por estos autos que ya lo hacen alucinar.

-Si como no.-digo irónicamente concentrando mi mirada en la carretera a oscuras. No tengo idea de a donde vamos pero sinceramente no me importa, sé que cualquier lugar que elija va a estar bien para mi.- ¿Cómo llevas lo del accidente?

-Bastante bien.-su mirada no deja el camino y veo como su manzana de Adán se mueve de abajo hacia arriba al pasar saliva.- Pensé que me afectaría más pero estoy bien. Hay que trabajar mucho después de tanta perdida pero todo tiene solución.

-Bien.-digo sorprendida por la manera tan calmada en que ha tomado las cosas, creo que tal vez estaría insultando a todo el mundo y a él mismo, pero ha sido todo lo contrario. Está muy claro que él ha cambiado también y este simple acto de madurez me lo comprueba.- Me alegra que estés tranquilo, perder la calma en esas situaciones es perdida de tiempo.

-Lo sé.-sonrie sin mirarme.- tuvieron que pasar muchas cosas para que yo aprendiera a no arrasar con todo cuando salía algo mal. Confieso que me llevé algunos golpes de mi padre, pero al final del día todo eso sirvió.

Observo su perfil y puede parecer algo difícil pero en realidad el hombre que tengo al lado de mi ha cambiado demasiado. Físicamente puede estar igual pero mentalmente no.

Y me gusta más esta versión de él, no siento que tengo que cuidar a mi hermano pequeño si no que tengo a una persona al lado con la que puedo aprender y avanzar juntos.