𝐄𝐋 𝐂𝐇𝐈𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐋𝐀𝐒 𝐄𝐒𝐓𝐑𝐄𝐋𝐋𝐀𝐒 [JuanSGuarnizo X Tú]✓

𝟻𝟷

A la mañana siguiente de aquella propuesta me encontraba acostada en mi habitación mientras miraba el anillo que mantenía en mi dedo ¿no era muy pronto?, yo no tenía dudas de mis sentimientos pero ¿y si al pasar el tiempo encontraba a alguien mejor que yo?

Me levanté y salí de ahí, bajé a la cocina para prepararle un rico desayuno, sabía que aún faltaban algunas horas antes de que Juan despertara y quizás era mi turno de llevarle la comida a su cama

Terminé antes de lo esperado, solo habían pasado 25 minutos y yo ya estaba sirviendo las cosas en unos pequeños platos. El timbre de la casa retumbó por mis oídos y no entendía quien llegaría, no estábamos esperando a nadie, le quité importancia y fuí directamente a abrir

—Tú debes ser _____.— exclamó una señora bastante linda y me abrazó, yo me quedé paralizada —Soy Nubia, la mamá de Juan.—

Se separó de aquel abrazo y tomó mis mejillas observandome con detalle, sonreí nerviosa

—Es un placer tenerla aquí.— sonreí dejandola pasar y ayudándola con su maleta, cerré la puerta viendo como ella soltaba un suspiro

—Huele muy bien, veo que llegué a la hora del desayuno.— dijo y asentí dejando su maleta en la sala

—Juan aún no se levanta, puedo ir rápido a despertarlo, así desayunamos juntos.— propuse aún nerviosa y ella rió mientras negaba

—Antes que todo necesito hablar un poco más contigo sin la interrupción de Juan.— exclamó y la miré confundida —Sentemonos.—

Le hice caso y ambas nos sentamos en el sofá, ella me miraba conservando aquella sonrisa

—Ya ví el anillo en tu dedo.— habló —Eres muy bonita y Juan me ha contado bastante de tí, le gustas mucho.—

—A mi también me gusta mucho su hijo.— sonreí

—Eso también lo sé por todo lo que he visto en sus directos, estoy muy pendiente de él a pesar de la distancia.— dijo entre risas —Mi visita es para ver cómo estan y conocerte un poco más, yo sabía de la propuesta de Juan así que quiero conocerte antes de que te cases con mi hijo.—

Iba a decir algo más pero se escucharon pasos en el piso de arriba, Juan se había despertado y venía directo al piso de abajo

—Huele delicioso.— exclamó y de repente nos vió, caminó hasta donde estábamos para abrazar a su mamá —Pensé que vendrías más tarde.—

—Tomé el primer vuelo del día y vine directo para acá, no podía esperar para verlos.— sonrió viendo a Juan y se alejó

—Ahora que estamos todos podemos desayunar.— interrumpí y ambos asintieron con una sonrisa

Fuimos al comedor y empecé a servirles el desayuno que había hecho, ellos seguían platicando sobre como habían pasado los últimos meses que no se habían visto, yo solamente miraba como charlaban

—Ví que estarás en la velada de Ibai.— dijo la señora Nubia y yo asentí, tenía el bocado en la boca así que no podía hablar —¿Y no estás nerviosa?.—

—Un poco pero ya estuve entrenando mucho, pasé los últimos meses llendo casi todo el día al gimnasio para prepararme bien y me siento muy capaz de ganar.— dije y ambos mantenían una gran sonrisa

—Me parece bien verte con tanta motivación.— sonrió ella

—Ella es así, siempre está muy motivada y pocas veces tiene miedo de enfrentar las cosas.— halagó Juan y sentí mis mejillas arder, tomé su mano

—Me gusta verlos así, llenos de amor.— exclamó la madre de Juan —¿Cuando anunciarán su compromiso?.—

—Quiero anunciarlo en algún directo, así todos se enterarán y será una gran sorpresa.— contó Juan —Podemos anunciarlo hoy mismo.—

—¿Hoy?.— pregunté y él asintío —Hoy no puedo, tengo primero que contarle a Beto, no quiero que se entere mediante otras personas.—

—Entonces podemos llamarlo y llamar a nuestros demás amigos para grabar sus reacciones y subirlo en un vídeo anunciandolo todo ¿Qué te parece?.— propuso Juan ahora

No parecía mala opción así que asentí

—Bueno, ahora que aclararon eso y quedaron en que no lo anunciarán hoy quiero acompañar a mi nuera al gimnasio, podemos compartir rutinas.— dijo la señora Nubia —Así podremos convivir más.—

Hoy no tenía planeado ir al gimnasio pero al ver que a ella le interesaba iba a ir, debía ganarme su cariño

—Me parece bien.— exclamé y seguí comiendo

—Mientras ustedes se van al gimnasio yo me quedaré prendiendo directo, cuando termine iré a recogerlas para llevarlas a comer.— sonrió Juan y ambas asentimos

Hace mucho no me sentía lo que era desayunar en familia, amaba esto. Hoy tendría todo el día para estar con mi suegra y sonaba divertido, ella se veía como alguien muy divertido con la que las cosas no serían incómodas en ningún momento.

Hoy era mi primer día de preparación para convertirme en la esposa de Juan Guarnizo.