<< Creo que ya es tiempo de ponernos al día. >>
— ¿Por dónde quieres que comience?
Recordando su antiguo acuerdo de palabra, se trasladaron a la pequeña cafetería situada en planta baja. Speedy's no era el tipo de lugar que escogerían en circunstancias normales, pero su inmediata proximidad con el 221B prevaleció por sobre toda comodidad.
Ocuparon una mesa apartada al fondo del local. En cuanto recibieron sus pedidos, reanudaron su conversación.
— Por el principio sería ideal.
Mycroft le dirigió una mirada cansina, a lo que ella se encogió de hombros a modo de disculpa.
— Solo dime lo que crees que necesite saber. —agregó, esperando disuadir parte de la tensión en su semblante.
El hombre bajó la mirada, contemplando la humeante taza de té. Como de costumbre, Anabeth —a diferencia de él—, se había decantado por la cafeína. Observó como llevaba la amarga bebida a sus labios y le daba un lento sorbo, esperando pacientemente una respuesta de su parte.
"Por el principio... Eso es demasiado ambiguo. ¿El principio de qué exactamente? ¿De la adicción de Sherlock? ¿De nuestra decadente relación fraternal?"
Los recuerdos de su infancia vinieron a él, pasando a gran velocidad como imágenes en un caleidoscopio. Eran simples destellos. Momentos nada más, que no sabía a ciencia cierta de qué manera organizar. Existía demasiada historia entre su hermano y él. Demasiadas peleas. Demasiados rencores.
¿Había sido la adicción de Sherlock la que terminó por quebrantar el erosionado vínculo fraternal? ¿O fue mucho antes, en alguna de sus muchas confrontaciones durante sus años de universidad? Se preguntó cuando ocurrió el punto de inflexión. El momento exacto en que las drogas pasaron a ser las siniestras protagonistas de su juventud compartida.
Al igual que Anabeth, por mucho tiempo él también se había hecho la misma pregunta.
"¿Cuando todo se salió de control?"
— Mycroft, ¿de verdad quieres hacer esto?
Su voz lo arrastró repentinamente a la realidad. Alzó la vista, topándose con sus ojos, expectantes. De repente tomó consciencia, de que no había dicho nada aún. El silencio se prolongaba, volviéndose más pesado a cada segundo.
<< No tienes que fingir que esto no te afecta. >>
Las palabras se abrieron paso en su cabeza, logrando apaciguar el agitado mar de pensamientos. Respiró hondo, finalmente tomando una decisión. La que, a su criterio, era la más difícil y tediosa de todas.
Ser honesto.
— Deberás disculparme. No es mi intención mantenerte en suspenso. Solo necesito... ordenar.
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Elemental, querido Holmes - (Mycroft y Tú)
Fanfiction《 SEGUNDA TEMPORADA DE "LA CLASE DEL '89" 》 Han pasado 25 años desde que Anabeth se vio obligada a volver a su país natal, Estados Unidos. Mycroft Holmes se ha convertido en el hombre más influyente del gobierno británico. Su poder e intelecto no co...