Tríada.

Capítulo 8: Desastre.

For Someone-Flora Cash

POV Omnisciente

Era increíble lo rápido que el tiempo pasaba y dejaba todo atrás; a personas, situaciones, conflictos, recuerdos preciados de hacia solo pocos días.

Resultaba difícil visualizar en su futuro a un grupo de pandilleros y ahora, no podía mirar hacia adelante si uno de ellos corría riesgo de no llegar con ella.

La castaña no podía asociar un claro futuro si Draken tenía un un hilo entre la vida y la muerte.

Mientras Magee más miraba hacia la luz roja de la sala de operaciones, más sentía un hueco instalarse con fuerza en su estomago y ni siquiera llevaban media hora de haber ingresado de emergencia a Draken con las ultimas palabras de su corazón sin reaccionar.

La chica sacudió sus propios cabellos tratando de no dejar que la ansiedad ahogara sus pensamientos en un pozo de tragedia, después de todo, si la luz roja indicaba que estaban en operación, eso solo dejaba la posibilidad abierta que el chico aún podía vivir.

Su vista fue alzándose vez con vez mientras veía a cada amigo del rubio llegar, al tiempo que observaba a Hinata tratando de controlar a una inconsolable Emma, con Mitsuya al fondo golpeando la pared y soportando la impotencia junto a Peh y Pah, con Takemichi bañado en lágrimas temiendo la peor.

Todos los que iban llegando, todos ellos claramente sufrían más por Draken gracias al tiempo que tenían de conocerlo y sin embargo ahí estaba ella, que quizá no podía comprender la magnitud de los sentimientos que cada persona tenía y que seguramente sobrepasaba aún más cualquier emoción de alguien que solo llevaba menos de 3 semanas tratando con él.

—Takemichi... —Pero aun con ello, en susurros a penas audibles para ella misma, no podía evitar tratar de jalar consuelo a pesar de que ninguna lágrima corría por su rostro.

Estaba bloqueada sin saber como debía reaccionar o que debía pensar. Si sería correcto o si solo sería una burla al pesar de los demás.

—Con que aquí estabas... —Un acelerado pelinegro avanzo de todos los demás después de haber escuchado la explicación que Takemichi decía a cada personaje que llegaba al lugar. —El viaje debió haber sido difícil, me sorprendí al saber que tú también-... —Su silencio fue inmediato en cuanto se percato de las facciones en su rostro y probablemente para Baji, fue más fácil entender y creer lo importante que ya era su amigo para la castaña.

Después de todo, Mikey y Draken te salvaron. Aunque tu rostro no posea desesperadas lágrimas corriendo como los demás, grita más sentimientos que muchos.

Baji lo sabía, el agresivo chico la había observado mejor que nadie y había guardado para si el significado de cada línea de su inexpresivo rostro por mayoría.

Para él, 3 semanas era suficiente para aprender de una persona, 3 semanas eran suficientes para querer a una persona.

—Oe... —Se puso en cuclillas frente a ella. La castaña no se había movido de las sillas más cercanas al quirófano desde que Takemichi la dejo ahí. —Él saldrá adelante, sé que podrías saberlo mejor que todos, peleaste con él. Lucha hasta ganar. —Apretó sus manos entre las suyas, tratando de hacerla volver a la realidad y dentro de él, evitando pensar de más el motivo por el que la chica tenía una expresión tan desgarradora en el rostro.

Magee solo atinó a alzar su mirada a Baji y su cuerpo tensó finalmente logró irse relajando poco a poco solo con su presencia y caricias. El sedante que el chico poseía en ella era algo a lo que aún no sabía ponerle un nombre, la sacaba de su zona de confort pero no de una manera desagradable. Cualquiera que fuera el motivo, agradecía la sensación de comodidad que le brindaba y el respiro a sus pulmones debido al soporte que le ofrecía.