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Jimin estaba comiendo las últimas tres papitas que tenía mientras de fondo en su habitación se podía oír Cigarettes After Sex su grupo favorito y el de su lindo novio, no estaba con muchos ánimos puesto que estos días comenzó a sentirse ciertamente nervioso e inseguridad con su persona.
Justamente hoy lo estaba muchísimo más porque había tomado la dolorosa decisión.

Jimin a sus quince años sufrió un accidente automovilístico y luego de eso lamentablemente quedó en sillas de ruedas sin poder corresponder a sus piernas, y eso lo detestaba.

Mucho, todo ese tiempo se sintió horriblemente mal con él mismo hasta que llegó la gran luz a su vida.

Su queridísimo Jeon Jungkook.

El chico maravilloso que conoció en Twitter durante un debate exactamente del grupo Cigarettes After Sex, ¿Genial, no?

Empezaron a hablar gran tiempo, se hicieron muuy amigos hasta el punto de charlar literalmente todo el rato, cada minuto, cada día y cada segundo de sus vidas. Se sentían cómodos con ellos.

Muy cómodos.

Tanto que ambos se enamoraron mediante sus charlas y de ahí decidieron ser novios pero no iba a ser tan fácil puesto que Jungkook vivía en Tailandia y Jimin en Corea.

Jungkook quería verlo pero su chico se negaba porque le avergonzaba estar así y que su enamorado no le guste luego.

Durante un año de novios Jimin le estuvo mintiendo sobre su vida diciendo que era un joven bailarín pero todo era un sueño que le había arruinado aquel accidente y que anhelaba por una vez su vida según él "miserable."

Cada día que fingía anécdotas para contarle a su novio por videollamada al terminarla siempre acababa en llanto porque se sentía tan mal, tan triste y tan mentiroso. Estaba cansado y odiaba sentir todo eso junto.

Era horrible.

—¿Mi amor? — el chico al otro lado de la pantalla lo sacó de sus pensamientos.— ¿En qué pensabas?

Jimin suspiró y regaló su mejor sonrisa, negando levemente.

— Solo pensaba..

Jungkook sonrió y tomó su celular para acercarlo a su ventana.

— Mira, aquí llueve. —habló del otro lado.— creo que viene un huracán..—soltó una risa volviendo a su cama.

—Aquí está lindo. —sonrió igualmente admirando cada facción de su novio.— Debes de estar cansado por la universidad.

El castaño asintió cerrando sus ojos.

—Aún así quiero hablarte, mi amor.

Jimin se sonrojó por aquel apodo, se sentía tan querido y cómodo que sentía que moriría de amor.

—Me puedo quedar hasta que te duermas..

— Te quiero, Mimi. — habló aún con los ojos cerrados.— quiero verte, ¿cuándo se podrá? quiero abrazarte y besarte mucho, mucho. —sonrió por lo último.

Jimin nuevamente cayó en la realidad soltando un suspiro casi imposible de escuchar.

— Pronto, Koo..

Era un martes por la tarde y el castaño veía las notificaciones de su celular los mensajes de su novio preguntando cómo estaba todo mientras sus ojos empezaban a llenarse de lágrimas nuevamente.

Estaba cansado de todo y cansado de fingir, se sentía cada día más mal y le dolía demasiado. Le dolía demasiado mentirle a su chico pero qué más, era la única manera de aún gustarle.

Aún gustarle..

Jimin rogaba por el amor mínimo de alguien y eso no le gustaba.

Y por eso mismo decidió actuar con la verdad y acabar con todo, por más que doliese, las lágrimas que gastaría y el arrepentimiento debía hacerlo así que con valor fue al contacto de su novio y sin vueltas le hizo una videollamada.

Una que rápidamente su chico contestó con una hermosa sonrisa de un joven enamorado.

—Mimi. —saludó mientras tomaba asiento en su escritorio.—Hola, mi amoor. —saludó nuevamente con emoción.

cosa que a Jimin le dolió y mucho.

— Koo..— saludó nuevamente pero sin sonrisa y eso llamó la atención del pelinegro.—Necesito hablar contigo de algo importante.

Jungkook cambió su expresión a una media asustada pero curiosa también con sus ojitos de Bambi que tanto enamoraba.

—Claro, adelante.

Jimin suspiró.

— Te mentí.-—Confesó sin poder mirarlo.—Te mentí con todo.

Su chico lo mirada sin entender y eso fue indicio de que siguiera hablando.

-—Yo.. — tomó una bocanada de aire.—Yo no soy bailarín, no estudio en la universidad prestigiosa de Seul y..y tampoco tengo una vida maravillosa como te conté..

— No entiendo...— fue lo único que logró decir por tanta información.

El castaño limpiaba sus lágrimas con sus manitas y con valor miró a su novio.

—A los quince años sufrí un accidente automovilístico y yo..— intentó ahogar aquel nudo en su garganta.— Yo quedé paralítico después de eso...

Jungkook quedó sin decir nada, buscando palabras adecuadas pero antes de intentarlo Jimin había alejado la cámara para así mostrar su verdad.

Estaba postrado durante años en una silla de ruedas.

—Te mentí. — volvió a decir, acercándose a la cámara nuevamente.—Lo siento, de verdad yo...

—No importa. —lo interrumpió rápidamente.—No importa, eres y siempre serás el chico más hermoso que he visto en mi vida.

Jimin lo miró perplejo.

—Me gustas y nadie, ni nada cambiará eso. — sinceró con una sonrisa leve. — Me gustas realmente y créeme que estoy siendo realmente sincero con mis sentimientos porque no solo me gustas. Estoy enamorado de ti, Jimin, me enamoré verdaderamente de ti, mi chico.

El castaño al otro lado no pudo evitar sonreír mientras sacaba sus lágrimas pero ahora eran de emoción porque la persona lo cual tanto amaba lo aceptaba completamente desde un principio.

— Te quiero, Jimin.

— Yo te quiero más, Koo, mucho más.
















Hola, cracks.

Apocalypse ;Kookmin minific.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora