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El raptor tenía a los dos chicos en sus brazos, Candelaria a penas empezaba abrir los ojos.
-Me abriste el brazo.-Dijo el Raptor mientras los tiraba a un colchón que había en el piso.
Candelaria abría los ojos con dificultad y escuchaba todo bajito.
-Debería romperles el cuello por lo que me hicieron.-Dijo con una cierta furia en su voz.
Candelaria sentía su vista borrosa mientras intentaba sentarse en el colchón, al igual que Finney. Los dos intentaban sentarse.
El raptor se agachó a su altura mientras que los chicos intentaban abrir los ojos, efectivamente estaban drogados.
-¿Ven esto?.-Pregunto mostrando su herida.-Estoy lleno de sangre. Como si hubiera matado a alguien, ¿si lo ven?, Mm...-El raptor movió las dos manos en el rostro de los chicos.
-No, todavía no ven nada.-Volvio a hablar el raptor.-Se que están asustados pero ya no voy a lastimarlos. Cuando dije que les rompería el cuello...solamente estaba enojado.
Candelaria intentaba escanearlo, verdaderamente daba miedo esa máscara y el hecho de que estaba drogado no ayudaba mucho.
-Y bueno, me abriste el brazo.-Hablo mirando ahora a Finney. -Pero no te tendré rencor por eso, creo que estamos a mano.
El hombre le tocaba el pelo a Finney y ponía algunos mechones atrás de las orejas a Candelaria ya que la chica se llevaba un rodete en su pelo.
-No deben estar asustados. Por qué nada malo va a suceder aquí.-Hablaba con una voz serena que a Candelaria no le gustaba para nada.
Ella sabía que eso era mentira, lo sabía muy bien.
-Te doy mi palabra juantios.-El raptor les mostró dos dedos.-¿Les gusta la soda?.-Pregunto mientras les tocaba el hombro levemente.-Les diré algo, voy a conseguirles una y luego...-Y cuando iba a volver a hablar giro su cabeza hacia la puerta.-Sono el teléfono. ¿También lo escuchan?, Iré a ver quién llama y les traigo la soda y luego vuelo y les explico todo.-El raptor les tocó levemente la cara haciendo que Candelaria se sienta incómoda.
El hombre simplemente se paró del colchón y se fue, dejándolos solos.
Candelaria miraba el lugar, parecía ser un sótano y con muy poco luz ya que tenía que forzar mucho la vista.
Miro a Finney quien se levantó e intento abrir la puerta pero fue en vano. Siguió si camino hacia el otro lado y solamente encontró un baño.
Y en ese momento cuando volvió hacía donde estaba el colchón vio un teléfono y no dudo en ver si funcionaba.
-¿Funciona?.-Pregunto en un hilo de voz mientras intentaba levantarse con dificultad.
El chico solo nego mientras le mostraba el cable roto. Candelaria se mordió el labio con desesperación.
