Capítulo 17

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¿Por qué aún sabiendo...que lo que hacemos está mal, continuamos avanzando?

Esta pregunta nunca dejará de existir. Después de todo, es nuestra naturaleza cagarla una y mil veces.

Y es que, aún siendo totalmente conscientes de los problemas que nuestros actos traen con sigo, no dejamos de hacerlo.

Incluso, nos importa una mierda en su momento, porque es hora de gozar, y es en ese rato, que sentimos que tal vez, y solo...tal vez, vale totalmente la pena el desastre.

Y por desgracia, es normal que todo acabe de mala manera.

—¿Segura está bien que hagamos esto?— Preguntó la azabache.

—De todos los presentes en las sesiones siempre eres la más callada, me gustaría tener un momento a solas contigo para que te sientas más libre al momento de hablar.

Arqueó la ceja.

—¿Y no te molesta?

—¿El qué?

—Mi condición. ¿No te molesta?

Sasha negó, con una risilla.

—Si lo hiciera no me hubiera metido a trabajar para esto.

Asintió. La castaña tenía un buen punto. Si alguien no era capaz de llevar acabo correctamente su profesión, honestamente no sabía que hacía ahí en primer lugar.

Habían salido a comer y charlar. Como una cita casual.

Mikasa se soltó un poco más ese día, y Sasha pensó en que tal vez lo mejor para ella sería llevar terapias en solitario, y personalizar la sesiones, pues, en vez de comentar una que otra cosa en grupo, se centraría en ella, y así no tendrá más opción que hablar y hablar obligatoriamente.

Esto funcionó muy bien. La hacían sentir normal, tranquila y Sasha estaba feliz de eso. Ese era el objetivo después de todo.

Curarla...

Sin querer...las cosas tomaron poco a poco otro rumbo, y las miradas pasaron a significar algo más.

Maldición.

Suspiró, y abrazó sus piernas, quedando en posición fetal sobre la cama. A bebido mucho.

Esto por desgracia ocurrió de nuevo.

No fué su intención todo lo que ocurrió en primera instancia, y reconoce que su forma de hablar aveces sale sin querer, jamás quiso  insinuarle nada a la rubia que la pudiera incomodar, lo que menos quiso fue eso.

Annie negó, y pasó deprisa a su lado para salir. Afuera estaba lloviendo mucho, pero no importó.

—Esto no llegará lejos...dejemos todo aquí de una vez.

La azabache negó.

—Annie.

—Fue poco profesional de mi parte seder ante ti, y estúpido creer que quizás...

Se detuvo.

—Qué quizá me querías.

Suspiró. La azabache abrió los ojos con sorpresa, y antes de que pudiera decir algo, Annie volvió a hablar.

—Hitch o posiblemente Reiner sean los que te asesoren ahora, porque yo honestamente no puedo así.

Mikasa negó.

Ninf*****. [Mikannie] G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora