Sangre Pura.
Yan_skyblue.Capítulo 15.
Ese vacío, lo llenaré con sexo, y si no puedo, lo llenaré con sangre.
–Vasil Molón, líder vampírico.La habitación permanecía en la absoluta penumbra, solamente él, su botella de sangre y la espada que acababa de usar para asesinar a sus "aliados" Húngaros.
Con las tropas ya en su poder, no necesitaba de ningún humano y mucho menos de sujetos tan insignificantes, así que limpió el camino como siempre lo ha hecho, lo único que necesitó de ellos siempre fue su ejército.
Se acomodó mejor en el sillón de caoba tapizado en su color favorito, el negro; llevó la cabeza hacia atrás dejando caer la copa que impactó contra la alfombra derramando la sangre, vio las vigas del techo buscando una respuesta que jamás sería contestada, algo que jamás podría encontrar y anhelando algo que ni siquiera sabía lo que era, simplemente estaban las vigas de madera, el techo y las telarañas. Una de sus concubinas entró para relajar a su señor, él se dejó ser y mientras la mujer le abre el pantalón para llevarse el miembro a la boca, Vasil no sentía más que un placer vago y monótono el cual no le llenaba en lo absoluto, de hecho, cada vez le irritaba más no poder conseguir eso que tanto promueven los humanos, su autorealizacion, su propósito en la existencia. ¿Por qué esas insignificantes criaturas podían alcanzar su estado de euforia y él no?
—Propósito — susurra, Esa mujer siempre decía eso cuando sus ojos se encontraban, pero aún no podía encontrar el suyo, ¿cuál era su propósito?
—¿Los asesinaste a todos?— pregunta Kinga observando el desorden de miembros desmembrado y sangre sobre la alfombra.
—Sí— exhala cansado. Toma a la concubina por los cabellos y le lanza contra el piso, ya se estaba cansando. —... Ven— ordena a su esposa apuntando esa parte de su anatomía que era lo único no muerto en él.
—No tengo humor— contesta arrugando el gesto, lo detestaba, últimamente lo odiaba más y más.
El hombre se ajustó los pantalones y se puso de pie, caminó hasta ella y la golpeó en el rostro tan fuerte que Kinga cayó al suelo, se tocó la mejilla iracunda contra ese maldito monstruo. Él era su extasis y su verdugo al mismo tiempo, Vasil representaba seguridad de poder mientras que pensar en la posibilidad de irse era un inserto que le causaba miedo, tanto miedo como ver a su esposo cambiar el azul de sus ojos gatunos por el rojo de la ira, finalmente terminó por tenerle miedo aunque no se lo demostraría jamás, ella era fuerte, debía mostrarse fuerte.
—¿No quieres complacer a tu esposo, querida? — le tomó del brazo con ira haciéndola arrugar el gesto por el dolor. — , ¿preferirías tener el de tu amado en la boca?, maldita golfa. — le jaloneo para que se parara y le llevó por los incontables pasillos de NightShadow mientras decapitaba a cualquiera que osase a verlos.
—¿A dónde me llevas?— preguntó entrando en un estado de terror absoluto, ¿la mataría?
—Con tu amante.
Los ojos de la mujer casi se salen de sus órbitas por el impacto de tales palabras, su corazón palpito y estalló como la pólvora en un instante eterno solo para esparcirse en miles de fragmentos al notar de lo que hablaba su esposo, en la entrada a los calabozos los cuales eran prohibidos incluso para ella estaba colgada la cabeza de Razvan, ¡de su querido Razvan!
—¡Maldito bastado! — gritó frenética —, maldito, maldito.
Vasil rio de forma tan tétrica que hasta el eco en las paredes sonaba al mismísimo señor del inframundo. Tomó la cabeza abriendo la puerta hasta los calabozos, bajaron los escalones mientras la mujer trataba de salir del shock. Su esposo la lanzó al suelo, le agarró de los cabellos y se bajó los pantalones para que Kinga entre medio de lágrimas, asco y extasis terminara lo que la concubina había comenzado. Vasil se concentró en los ojos pardos que le ven con odio y desprecio desde aquella celda del fondo, amaba que Jenica lo viera así, era la única humana que amaba lo despreciara, le odiara; entre más grande su odió, más vibraba su alma corrupta. Amaba que ella sintiera aunque fuera desprecio por él, eso significaba que le importaba y si le importaba sus sentimientos estaban ligados aunque fueran destructivos.
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Sangre Pura (historia Original Corta)
VampireEl cazador Artur Moldovan está tras la bestia más temida, los vampiros. Sabe que no será fácil matar a esas criaturas, pero es la última esperanza de un aterrado poblado en la vieja Transilvania. Ruxandra, la mujer de la Sangre Pura, la que destruir...