*13* "LA PROPUESTA"

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"¿Será qué me enamoré?" - hizo eco sobre la cabeza de ella.

Esa frase no dejó de repetirse una y otra vez en su cabeza. Se quedó paralizada, sin saber que hacer o decir, y como si no tuviera el control sobre ella misma, el corazón se le aceleró, y una expresión de espanto se formó en su cara.

- Mentiras mentiras, solo era una bromita, princesa. Charly Flow no nació para enamorarse, solo pa' pasarle rico, ¿cierto? - fingió una sonrisa.

Para Charly era obvio que ella no estaba en la misma sintonía que él, algo que hirió su ego. Sentía algo muy especial por ella, y tenía muy claro que a Tammy le gustaba, pero era consciente que solo era eso, simple atracción. Y en cuanto vió su semblante, se arrepintió de haber dicho eso.

- Claro, ambos nacimos para lo mismo, ¿no? - respondió aún aturdida.

- Por supuesto, princesa. Por eso es que juntos no corremos ningún riesgo a enamorarnos. - susurró viendo cómo Yeimy se mordía suavemente su labio inferior.

- Claro que no, además podemos seguir pasándola rico sin necesidad de involucrar sentimientos. - se aproximó a su boca.

Estaban tan cerca, que podían sentir el aliento del otro sobre ellos. El corazón de ambos se aceleró, y Charly tragó saliva tratando de contener todo lo que esa mujer le estaba haciendo sintiendo.

- Princesa... - susurró casi en un jadeo. - Te propongo algo, tengamos una relación, pero sin compromisos ni promesas, solo vos y yo pa' pasarla rico, ¿Qué te parece? - miró sus labios esperando una respuesta.

- Charly, pues eso es lo que estamos haciendo, ¿no? Pasarla rico, sin ser pareja ni nada de eso.

- No, no es lo mismo, te propongo tener una relación, sin tener una relación formal, ¿me entendés?

Definitivamente este man es bien bruto, ¿qué carajos significa tener una relación sin tener una relación? - se preguntó Yeimy.

- Ninguno de los dos puede estar con otras personas, digamos que nos debemos exclusividad, pero sin involucrar sentimientos.

- ¿Exclusividad?... Charly seamos sinceros, ni vos te crees que vayas a cumplir eso. - soltó risas burlonas.

- Pruébame, ya vas a ver qué sí. Y si en algún momento queremos estar con otra persona, le decimos al otro y listo. - dijo intentando mostrar frialdad.

- Bueno... acepto, igual yo no soy celosa. - sonrió.

- Entonces perfecto, yo tampoco soy celoso, princesa. - intentó sonar convincente.

Ni el se creía eso que había dicho, pero su ego y orgullo, no lo dejaban expresar libremente sus verdaderos sentimientos.

- ¿Qué te parece si lo ponemos en práctica? - agarró su mano y posó un beso sobre ella.

- Charly... estamos en un hospital, no. - intentó apartarse.

Rápidamente la jaló hacia él, dejándola sentada sobre la camilla.

- Solo un besito nomás, ¿si? - hizo un puchero y ojitos.

Maldito desgraciado, como puede tener un interior tan podrido, y ser tan lindo por fuera. - pensó fugazmente, y reaccionó antes de volver a quedarse observándolo, tal y como pasó anteriormente.

- Este... disculpen. - interrumpió la doctora.

Yeimy dió un salto de la cama, y se puso en pie un tanto nerviosa.

- Sr Cruz, ¿cómo sigue?

- Perfectamente doctor.

- Me alegra escuchar eso, precisamente venía a darle el alta, ya se puede ir para su casa.

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