Después de dos días en la casa familiar de los Romanov, Liam se dio cuenta de que resistir a la tentación era difícil. Si bien se había convertido en la sombra de Stiles, tener un hombre o mujer casi en cada esquina ofreciendo su muñeca para que se alimentara le estaba superando. Pero lo que le había asqueado era comprobar que la granja de humanos que Stiles había comentado, aún existía y funcionaba.
En un descuido de Stiles, los gemelos Fiodor y Arseni, que en ese momento Liam aprendió a diferenciarlos, ya que Arseni tenía los ojos verdes y Fiodor rojos. Lo habían llevado a una visita por las catacumbas de la casa, dónde Narkissa y ellos hacían sus torturas, para acabar la visita unos kilómetros más lejos de la casa, dónde un establo se levantaba, desde fuera parecía simplemente eso, pero cuando el rubio entró y vio a las mujeres encadenadas y muchas de ellas embarazadas o en labor de parto, salió y vómito la sangre que había ingerido. Los gemelos se rieron de él y le sacaron un bebé para que se alimentara, Liam agradeció que en ese momento Stiles apareciera y se lo llevara de ahí. Porque realmente se veía capaz de matar a los dos hermanos de su pareja.
Evitar a Narkissa fue lo más difícil, por suerte Sacsha o Stiles siempre llegaban a tiempo para evitar que esta se acercara al más joven. Con la única que había hecho buenas migas era con Gala, esta se había mostrado muy amable con él.
Liam en ese momento estaba mirando unos cuadros que parecían explicar una historia, los había visto el primer día, pero con lo que había pasado no se había permitido observarlos con detalles. En estos estaba seguro de que explicaba la historia de los Romanov vampiros.
- ¿Te gusta?- Preguntó una voz grave a su lado, Liam giró su cabeza viendo a Drystan observando también el cuadro.- Nos lo pintó Leonardo.- Liam lo miró sorprendido antes de volver a mirar los cuadros.
- ¿Da Vinci?- Drystan sonrió asintiendo con suavidad.- Increíble.- Susurró volviendo a contemplar los cuadros.
- ¿Eres un varón, cierto?- Preguntó de la nada Drystan, el chico lo miró y asintió sin recibir la mirada del patriarca de vuelta.- Una lástima, esperaba que, ya que mi hijo se ha enamorado de ti y serás su primer y último convertido, pudierais traer descendencia, pero no creo que eso ocurra.- Dijo como si nada consiguiendo que Liam se sintiera mal clavando su mirada en el suelo.- ¿Cómo llegaste a él?- Preguntó Drystan mirando al chico.
- Estaba enfermo de Leucemia, me quedaba poco, los lobos no quisieron transformarme porque moriría, Stiles se negó al principio, pero después aceptó.- Dijo Liam clavando la mirada en los cuadros para escapar de la fría del patriarca.
- Increíble, no solo hereda mi don, sino que ha convertido a una persona con una enfermedad en la sangre sin problemas.- Dijo con rabia mordiéndose el labio.- Qué desperdicio.- Dijo antes de acomodarse los puños de su camisa.- Te ofrezco un trato.- Dijo este ganándose la atención del rubio.- Consigue que Misha convierta a una mujer y tenga hijos, yo a cambio os prometo que Misha no sabrá nada de nosotros y podréis vivir tranquilos dónde escojáis, sin tener que mudaros más, ni preocuparos por el dinero nunca más.- El chico lo miró sorprendido antes de que la puerta de esa habitación se abriera mostrando a un Stiles enfadado. Drystan le sonrió mientras se ponía sus guantes de cuero negro antes de apoyar la mano en el hombro de Liam.- Piénsatelo.- Dijo antes de irse de allí y dejar a la pareja sola.
El vampiro se acercó a Liam y acarició la mejilla de este, ganándose una sonrisa tensa del chico. Stiles miró hacia dónde se había ido su padre sabiendo que este le había dicho algo a su pareja. Gruñó enfadado, volviéndose a centrar en el chico que volvía a tener la mirada perdida en los cuadros.
- ¿Qué te ha dicho?- Liam se rio apartándose y apretando sus labios.
- Nada.- Susurró antes de irse de esa habitación, al salir casi se choca con Narkissa, pero Liam simplemente se apartó de ella y siguió su camino hasta el jardín trasero.
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Bring back (Stiam)
FanfictionCuando Liam recibió la noticias que su cáncer había vuelto para quedarse, solo pensó en una cosa: Quiero vivir. Lo que no se espera es todo aquello que su nueva vida y su nueva condición le traerá. Basado en mi O.S 54 y 55 del segundo libro de One-S...