Aunque Stiles intentó comunicarse con su padre durante las siguientes dos semanas al incidente, este no le contestaba al teléfono, había intentado hablar con él a través de sus hermanos y madre, recibiendo solamente silencio de su parte. Eso realmente lo irritó, pero en su granja tenía cosas más preocupantes de las que ocuparse, como el haberse encontrado a Liam acechando a uno de los lobos para alimentarse de él. Cuando lo había detenido había podido ver el terror en la mirada de Liam. Pero el rubio únicamente se podía disculpar, recalcando el hambre que tenía. Por eso había tomado la decisión de ir a casa de Carter, si quería sangre fresca debían acudir al sitio donde la habría.
Este los había recibido con gusto, disfrutando tener a la pareja pidiendo su ayuda, cosa que no les negó. Este le ofreció uno de sus chicos al joven vampiro y se deleitó viendo como este se alimentaba casi con desesperación. Su mirada también fue a Misha, este tenía una mueca tan preocupada que le hizo sentirse incómodo. La devoción que parecía profesar el vampiro mayor a su convertido era tan grande que le hacía plantearse si realmente se había enamorado de este.
- Que consuma tanta es preocupante para uno de su especie.- Dijo Walter, no tenía intención de alterar al Romanov, pero hasta él se estaba dando cuenta que Liam tenía un ansia desmesurada.
- ¿Crees que no lo sé?- Murmuró entre dientes mientras apretaba su puño para relajarse.- Pero mi hermana me dijo que tendría unos días dónde el hambre aumentaría, debe ser eso.- Walter lo miró antes de desviar la mirada al chico que estaba dejando el cadáver en el suelo con delicadeza, Carter se levantó de forma elegante deteniéndose delante de Stiles mirándolo serio.
- Te puedo asegurar que esto no es uno de esos días.- Dijo mirando por encima de su hombro al chico que estaba relamiendo hasta la última gota de su boca.- Yo hablaría con Narkissa, si no tendrás que matarle por cargarse un pueblo entero.- Dijo antes de apartarse e irse dejándolos solos, Stiles miró preocupado a Liam que sonreía satisfecho acercándose a él.
- Me hacía falta esto, me siento mucho mejor.- Dijo mientras dejaba que Stiles limpiara su boca, el castaño acarició su labio recibiendo un mordisco suave de este en su dedo, Liam se rio acercándose a besarlo. Stiles le siguió el beso sin dejar de darle vueltas a lo que había dicho Walter.
Intentaría contactar con su hermana, que esta le aclarará a qué se podía deber ese extraño comportamiento de Liam. Cuando el rubio se separó, Stiles tiró de él para salir de la casa de Walter. Ambos caminaron tranquilamente hasta su granja, no temían por lo que pudiera pasar en la granja en su ausencia. Darcan había demostrado con creces que él era el perfecto líder para cuidarla.
Stiles no le quitó ojo al más joven, intentando descubrir eso que le confirmara que algo había cambiado en su chico. Pero no lo encontró, Liam parecía ser el mismo de siempre, únicamente con más hambre de lo normal. Al llegar a la granja, Stiles se quedó viendo como el rubio se iba con Darcan mientras él sacaba su teléfono subiendo al tejado de la casa. Marcó el número de Narkissa mientras mordía su labio nervioso, no quería matar a Liam, no sería capaz de ello.
- Si llamas por padre no quiere ponerse.- Dijo la mujer nada más descolgar, el castaño resopló mientras miraba dónde Liam reía con el lobo.
- Aunque tengo ganas de cantarle las cuarenta al viejo, no llamo por él.- Dijo Stiles mientras mordía su labio nervioso.- Sino por Liam, se acaba de beber a un hombre vivo.- Desde el otro lado se escuchó un silencio sepulcral antes de que el ruido de una puerta pesada cerrándose lo interrumpiera.
- ¿Ya lo has dejado en cinta?- Preguntó sorprendida la mujer, el vampiro abrió los ojos de igual manera, volviendo a mirar a su pareja.- Joder Stiles, ni dos meses, y eso que tú eras el primero en no quería hijos.- Dijo divertida antes de reírse.
- Pero no puede ser ¿verdad?- Dijo Stiles antes de taparse la cara.- Quiero decir, sí que hemos follado para que ocurra ¿Pero, tan pronto?- Desde el otro lado de la línea únicamente se escuchaba la risa de Kissa.- ¿No tiene gracias, sabe lo que me espera con nuestra familia si realmente Liam está encinta?- Dijo histérico y dando vueltas por el tejado.- Sería el primogénito, es decir, que padre querrá meter su manaza en la educación.- Dijo negando con suavidad mientras resoplaba agotado.- No les digas nada, déjanos hacernos la idea.- Pidió sentándose de nuevo, la risa de Kissa se apagó antes de que carraspeó.
- Puedo dejarte ese tiempo, pero debes decírselo.- Stiles no dijo nada, simplemente se quedó mirando sus zapatos.- Intentaré acercarme a tu casa, así podré confirmarlo.- Dijo antes de colgar.
Consiguiendo que Stiles se quedará con un sabor agridulce en la boca, estaba feliz de ser padre junto a Liam, no había nada que le pudiera quitar esa ilusión. Pero como ya le había comentado a Kissa, esperaba que su hijo fuera el segundo o el tercero en llegar, así su padre estaría centrado en sus otros nietos.
Stiles bajó del tejado recibiendo a Liam, este se aferró a él cuál koala mientras se reía. El castaño lo sujetó para que no cayera mientras miraba a Darcan con una sonrisa tensa. El lobo supo enseguida cuáles serían las palabras que salieran de la boca del vampiro, y las acepta sin chistar, ya se enteraría por Liam lo que pasara esa tarde.
- Darcan iros ya a casa, se acabó vuestra jornada por hoy.- Este asintió antes de irse dando una sonrisa amable a Liam.
El rubio, en cambio, miraba a Stiles sin entender nada. Menos aún cuando el castaño entró en casa y se sentó con él encima, apoyando su cabeza en el pecho del rubio. Liam acarició el pelo de este con suavidad, teniendo un poco de miedo de lo que quería decirle Stiles.
- He hablado con Kissa.- Susurró sin apartarse del pecho de este, Liam se tensó deteniendo cualquier movimiento de su mano.- Le he comentado tú incremento de apetito.- Dijo levantando la cabeza y sonriéndole de forma temblorosa.- Me ha dicho que es posible que estés encinta.- Dijo mientras veía como el rubio procesaba las palabras, y su mueca sería se convertía en una radiante de felicidad.- Vendrá a confirmárnoslo.- Liam se rio antes de acunar las mejillas de este y besar los labios con necesidad, Stiles abrazó con fuerza el cuerpo de este.
- ¿Por qué pareces tan triste por la noticia?- Preguntó separándose y acariciando la mejilla de este, Stiles suspiró con pesar antes de cerrar los ojos disfrutando del tacto del chico en su cara.- ¿No lo quieres?- Preguntó con temor, Stiles lo miró serio antes de tumbarlo en el sofá, agarró sus manos y las puso encima de su cabeza inmovilizándolo, mientras lo miraba con seriedad.
- Ni se te ocurra decir eso nunca más.- Dijo de forma amenazante, Liam tragó nervioso, esa actitud de Stiles le daba un poco de miedo, pero le ponía caliente a partes iguales.- Claro que lo quiero, pero tenía un plan para nosotros.- Susurró Stiles aflojando el agarre de las muñecas y acomodándose entre las piernas del chico.- Quería que nuestro hijo fuera el segundo o tercero en llegar a la familia, así mi padre no nos molestaría.- Susurró soltando por fin al rubio y mirándolo con una sonrisa sincera.- Pero estoy completamente seguro de tenerlo.- Dijo antes de que Liam se sentara reduciendo la distancia entre ellos a centímetros, sus labios se rozaron antes de que él más joven sonriera.
- Estoy feliz de saber eso.- Susurró mientras tomaba la mano de Stiles con una de las suyas, dejándola encima de su erección.- Ahora debes hacerte cargo de esto.- Dijo con tono pícaro mientras lamía sus labios, tocando también los de Stiles.
El vampiro mayor gruñó mirándolo con una sonrisa ladeada antes de bajar al cuello de este y morderlo con suavidad, Liam gimió pegando más la cabeza de este a su cuello. Stiles sacó sus colmillos clavándolos ahí y bebiendo un poco de la sangre del chico, notando un toque picante que antes esta no tenía. Se apartó y esperó a que la herida se cerrará para volver a besarle. Ahora que sabía a qué se debía ese incremento de apetito, por fin podía relajarse. ¿Y qué mejor manera que entre los brazos de su pareja?
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Bring back (Stiam)
FanfictionCuando Liam recibió la noticias que su cáncer había vuelto para quedarse, solo pensó en una cosa: Quiero vivir. Lo que no se espera es todo aquello que su nueva vida y su nueva condición le traerá. Basado en mi O.S 54 y 55 del segundo libro de One-S...