Capítulo 17

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La reconciliación de Liam y Stiles había durado tres días, en los cuales los vampiros únicamente salían de su cuarto para alimentarse de las bolsas de sangre. Sacsha, la segunda noche que pasó en vela por los gemidos de Liam, decidió que su visita ya había durado demasiado. Así que cuando confirmó que Walter no pensaba hacer nada malo contra su hermano y cuñado, se largó a su casa de Santa Fe.

Después de tres días, Liam salió a recibir a los lobos a primera hora de la mañana, recibiendo muchas miradas divertidas y sorprendidas de estos. Darcan se quedó a su lado mirándolo fijamente antes de sujetarlo por la barbilla para que lo mirara a los ojos.

- Hay algo diferente en ti, tus ojos ya no parecen tan animales.- Liam lo miró extrañado y se separó del tacto que empezaba a incomodar.

- ¿A qué te refieres?- Preguntó Liam totalmente desubicado, nadie le había comentado que tuviera una mirada animal, él tampoco lo había notado.

- Tus ojos antes eran fríos y destilaban un aura de depredador. Ahora ya no, son más cálidos.- Dijo consiguiendo que Liam hiciera una mueca encogiendo los hombros.

- Supongo que es porque ya no estoy enfadado con Stiles.- Dijo sin más, Darcan sonrió tenso haciéndole creer que se creía la excusa de Liam. Pero él sabía que había algo más detrás.

Los dos pasearon por la granja mientras se ponían al día, Darcan le contó las cosas importantes sobre la manada y Carter, así Liam estaba informado sobre todo lo que pasaba ahí. Liam, en cambio, no entró en detalles del motivo de que su reconciliación durará tres días, cosa que el lobo agradeció.

Unas horas más tarde, Stiles se acercó a ellos para darle una bolsa de sangre a Liam y unirse a su paseo. Dándole así a Darcan la oportunidad de ver a la pareja relacionarse de verdad, ya que él solo había visto las peleas de ambos vampiros. Se sorprendió al ver lo cariñoso que era Stiles con el chico. Darcan los dejó solos en la vuelta hacia la casa, debía controlar algunas cosas de sus chicos.

Stiles y Liam se detuvieron en el porche mientras seguían hablando, sentados allí. Liam se estaba dado cuenta que quizás se iban a morir de aburrimiento si durante ese tiempo no hacía nada, al menos él. Una presencia oscura consiguió que Liam se tensara mirando a dónde Walter estaba caminando hacia ellos con una sonrisa de superioridad, Liam no apartó la mirada de él, únicamente apoyó su mano en la pierna de Stiles, sintiendo como este se sentaba más cerca de él.

- Por fin os veo la cara, los lobos me comentaron que estabais ocupados.- Murmuró la última parte con voz sugerente. Liam sonrió mirándolo fijamente antes de suspirar con cansancio.

- Sí, han sido tres días intensos.- Dijo pasando la lengua por sus colmillos, Walter se puso serio y miró a Stiles que únicamente sonreía orgulloso entrelazando los dedos con su pareja.- ¿Necesita algo, señor Carter?- Este resopló por la falsa cortesía y negó con suavidad cruzando los brazos en su pecho.

- Quería hablar con Misha a solas.- Liam negó sin quitar su sonrisa, consiguiendo que el otro vampiro apretaba su puño.- Son cosas de familias, tú no tienes cabida en esa conversación.- Dijo a punto de hacer un berrinche, Liam se acercó y se detuvo delante de él mirándolo con rabia.

- Stiles es mi novio y creador, eso me convierte en un Romanov, así que lo que hables con él lo hablaras también conmigo.- Dijo totalmente serio, Walter le enseñó los colmillos preparándose para matar a ese estúpido chaval, desvió su mirada a Stiles y este sonrió totalmente de acuerdo a lo que había dicho Liam.

- Mira pequeña sanguijuela, tengo muchas ganas de arrancarte la cabeza desde la otra noche, y ahora no me estás ayudando a evitarlo.- Dijo agarrando la ropa de Liam con agresividad mientras enseñaba los colmillos en toda su largura.- Así que deja de tocar los cojones y déjame hablar con Misha de una vez.- Liam simplemente lo golpeó alejándolo un poco.

El más joven abrió y cerró su mano antes de acercarse a Walter y volver a golpearle. El chico no dejó de pegarle puñetazos ni un segundo, no importó que los lobos se estuvieran acercando a ver qué pasaba o que el vampiro sangrara por varios cortes que le había hecho.

- Liam.- Dijo simplemente Stiles, este se separó del vampiro derrotado y se acercó a su novio que limpió las manchas de sangre de su cara y manos con un pañuelo.- ¿Qué querías hablar sobre las familias?- Preguntó Stiles abrazando al chico que cerró los ojos teniendo hambre otra vez.

- Tu padre me ha llamado.- Dijo Walter levantándose del suelo y colocándose bien la nariz.- Me ha dicho que si os dejaba tranquilos me daría una recompensa.- Stiles frunció el ceño muy inseguro, su padre nunca jugaba limpio, eso lo había demostrado en innumerables ocasiones.

- ¿Qué te ofrece?- Preguntó curioso, se esperaba cualquier cosa, desde terrenos a una de sus hermanas.

- La posibilidad de tener un heredero.- Stiles se rio negando con pesadez, ese hombre estaba tan obsesionado con los herederos que no sabía dónde iba a llegar por ellos.- No iba a aceptar, pero Kissa siempre me ha parecido una mujer atractiva.- Dijo con una sonrisa socarrona, Liam hizo una mueca demostrando lo desagradable que le estaba pareciendo Walter ese día.

- Eres asqueroso.- Dijo sin más, Stiles asintió de acuerdo con lo dicho por su pareja. A él también le parecía despreciable que Walter estuviera sopesando esa idea.

- Yo de ti no hablaría mucho, porque tu querido suegro te tiene como opción de gestador.- Dijo consiguiendo que Stiles se tensara y mirara a Liam que se había quedado congelado en su sitio.- No he aceptado, pero tampoco os voy a molestar por ahora.- Dijo antes de irse, empezaba a estar incómodo al sentir las miradas amenazadoras de los lobos en él.

Stiles se acercó a Liam, pero este simplemente corrió hasta uno de los arbustos y vómito la sangre que le quedaba en su cuerpo. No podía creer que Drystan le ofreciera cuál incubadora a sus posibles negocios, para que gestara un bebe. El castaño acarició su espalda intentando tranquilizarlo, por mucho que su padre lo ofreciera, él no dejaría que tocaran a Liam. El rubio se enderezó antes de limpiarse la boca y mirar a Stiles asustado.

- Tranquilo, hablaré con él.- Liam asintió con suavidad dejándose guiar hasta la casa, allí Stiles le dio una bolsa de sangre mientras se sentaba a su lado sin quitarle el ojo de encima. Cuando se acabó la bolsa, Liam parecía más tranquilo, pero estaba claro que eso había sido chocante.- No dejaré que te toquen ni un pelo ¿Me has entendido?- Liam asintió acercándose a él y dejando que este acariciara su cabeza.

- Quiero más sangre.- Susurró Liam cerrando los ojos, Stiles lo miró extrañado antes de suspirar e ir a por otra bolsa, se volvió a sentar en el sofá y tiró de Liam a su regazo. Dejando que se relajara ahí.

Tenía claro que la próxima conversación con su padre no sería bonita ni agradable, pero era algo que debía tener para evitar que ofreciera a Liam como intercambio de favores. Y en el caso de que Drystan sacará su vena más cabezota, siempre podía mandar a los Bonaparte para que le dieran un aviso al patriarca Romanov. Stiles se quedó absorto viendo como Liam se dormía en su pecho, él simplemente le quitó la bolsa de sangre de sus manos y lo dejó dormir un poco.

Bring back (Stiam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora