Crónicas de Ultramar Nace un Imperio

Capítulo 37: Enfrentado a lo incierto.

-Teniente Tanigushi, hemos recibido la orden de iniciar el ataque. -

Reportó el oficial de comunicaciones al teniente Tanigushi, quien estaba a la espera mientras observaba con sus binoculares a los caballeros que cubrían la entrada a la catedral. Entregándole los binoculares a otro soldado, se acercó a su grupo para preparar el ataque.

-Muy bien soldados, nosotros somos los que daremos inicio al ataque; dispararemos a los caballeros que custodian la puerta con las ametralladoras tipo 95 desde esta posición y ofreceremos cobertura al grupo del teniente Takashi quien dirigirá la avanzadilla, una vez que esté dentro, le seguiremos cubriendo la retaguardia ¿Alguna duda? -

-¡No señor! -

Respondieron los soldados casi al unísono; entonces el teniente Tanigushi dio la señal de comenzar el ataque y las ametralladoras pesadas tipo 95 comenzaron a abrir fuego sobre los caballeros que custodiaban las puertas de la catedral. Pero tras unos segundos de iniciada la descarga, el enemigo no parecía inmutarse ante las balas, lo cual dejó consternados a los soldados que observaban.

- ¡Teniente hemos confirmado varios impactos en el enemigo, pero este no parece ser afectado por las balas! -

Reportó un soldado que observaba el movimiento del lado enemigo con sus binoculares.

- ¿¡Cómo dices!?-

Preguntó el teniente Tanigushi sorprendido por la afirmación del soldado, quien no hallaba como explicarle la situación que contemplaba a su superior. Se podían apreciar claramente los impactos de las balas contra los escudos del enemigo, pero aquellas rebotaban contra estos, como si en lugar de escudos, chocaran contra una gruesa placa de metal. No había forma lógica de explicarlo, pero una cosa si era segura, y era que ni el grueso calibre de las tipo 95 podía penetrar aquellos escudos, algo que era totalmente inaudito.

- ¡Soldado! ¿¡Qué sucede!? -

Insistió el teniente Tanigushi al soldado que dejando de lado sus cavilaciones contestó rápidamente.

-Al parecer el enemigo cuenta con alguna especie de blindaje lo suficientemente fuerte como para resistir el calibre de nuestras ametralladoras. -

- ¡Eso es imposible! -

Afirmó el teniente Tanigushi mientras le arrebataba los binoculares de las manos a su subordinado.Aun contemplando la escena con sus propios ojos no podía dar crédito a lo que veía.

- ¿Están resistiendo el fuego de nuestras ametralladoras con sus escudos? -

Afirmó incrédulo el teniente Tanigushi.

-Con la potencia de un proyectil como ese, aún si hubiese un blindaje lo suficientemente fuerte como para evitarlo, el impacto generado debería bastar para quebrarles los brazos a esos hombres... esto es inconcebible ¿Acaso son tanques humanos?-

El teniente Tanigushi no podía salir de su asombro, intentó encontrar una explicación para todo aquello, pero nada le vino a la mente y justo en ese instante el oficial de comunicaciones entró en escena con una llamada entrante del teniente Takashi.

-¡Señor! El teniente Takashi quiere hablar con usted-

El teniente Tanigushi se dirigió hacia el oficial de comunicaciones y tomó el auricular.

-Tenemos un problema aquí teniente Takashi. -

-Ya lo he notado. -

Respondió Takashi con un tono de voz preocupado.

-Tendremos que cambiar de estrategia para hacerle frente a esos enemigos. -

- ¿Qué estrategia propone teniente Takashi? -