XV

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El sonido de cosas cayendo al suelo tomaron el protagonismo en la habitación al mismo tiempo que variadas voces se escuchaban borrosas y distorsionadas al otro lado de la pared.

En aquella oficina aquel día había comenzado con normalidad hasta que el dueño de aquel lugar recibió noticias que no le gustaban para nada.

USA era un hombre de temer a manos sueltas, un tipo poco contenido contra aquello que le molestaba y a menudo sus dichos escapaban de su boca a la realidad. Sus jadeos mientras apoyaba sus manos en su escritorio con la cabeza gacha eran la prueba del anterior ataque de ira que lo invadió.

__¿Como demonios fue que eso sucedió? __ dijo entre dientes.

__ Yo ... yo no lo sé... solo se que estab-__ la asistente fue interrumpida

__ No quiero escuchar más __ dio un golpe con la palma en el escritorio para callarla nuevamente ___ Dios ... esto no puede estar pasando , les dije que intervinieran en cualquier tipo de acercamiento ajeno.

__ lo sentimos señor

Usa se mantuvo caminando de un lado a otro por varios minutos tratando de pensar en que hacer . Su trabajo , ahora en aumento por la deficiencia de su gobierno, se interponía constantemente en sus intereses y el cuidado de lo que era suyo.

El de cabello rubio se sento en su cómodo asiento dejándose caer sobre este, ya había pasado casi un mes desde el que argentino estaba fuera de su territorio y la noticia no le había llegado hasta casi dos semanas depues, ahora que el mes estaba por acabar no tenían noticias ni de un lado ni del otro.

No era un misterio que el representante estadounidense sentía demasiado apego al argentino, o más bien sentía algo más que solo apego. Todos sus allegados lo sabían, y no era sorpresa que cuando el albiceleste fue atacado perdiendo la vista el fue quien corrió de un lado a otro cargandolo y buscando ayuda con desespero.

__ Traeme un café __ dictó moviéndose en su silla golpeando las puntas de sus dedos con el apoya abrazos. La chica asintió con rapidez y nerviosismo saliendo de la oficina en busca de aquello que se le pidió.

El de rojo , blanco y azul se quedó en silencio por un largo rato . No podía describir la infinidad de malos pensamientos que había estado dejando pasar. Pero no podía despejar las dudas teniendo en cuenta que no tenía el derecho a acercarse a alguno de los hijos del albiceleste y averiguar su paradero. Aún cuando mandara a varias personas a investigar parecía que se lo hubiera tragado la tierra.

__ no me hagas esto __ murmuró con suavidad y desgano pensando lo peor el estadounidense .

[...]

El mes estaba ya por acabar , por lo que la visita o las vacaciones que el argentino se había tomado lejos de su territorio estaba llegando a su fin. Y con el término de sus vacaciones también su vida anterior había acabado.

Tras la operación habia estado vendado día y noche en lo que su cuerpo se adaptaba a sus nuevos órganos. Tal y como pidió sus ojos anteriores fueron dejados en su padre evitando dejar sus cuencas vacías , siendo devuelto de la misma forma sigilosa en la que fue recibido.

El día había llegado y era el momento en el que se desharia de aquellas vendas para probar si todo estaba en orden. El ruso le ayudó a cambiarse así como a desayunar algo antes de hablar de nuevo con el médico que se las quitaría.

Fue un viaje tedioso para el argentino que se encontraba tan ansioso por saber si todo había salido de acuerdo al plan , un viaje largo y lento a su parecer por su impaciencia. Una vez llegaron al lugar todo le ponía nervioso , dudaba de absolutamente todo y de manera tramposa también había intentado levantar la venda para abrir los ojos.

Aquel médico se tardó en llegar pero al encontrarse con la pareja actuó rápidamente para que el ceño molesto del eslavo, por la llegada tarde , desapareciera.

___ Bien , comprobemos que tal quedó esto __ dijo al retirar el último tramo de venda de su cara . Procediendo a quitar los parches que tenía adheridos con algo se cinta médica sobre los ojos___ no intentes mirar a la luz apenas los quite , podría doler __ musito quitando finalmente lo que quedaba mostrando el rostro del argentino con aún esa cicatriz de un rabillo a al otro.

El argentino temblaba un poco hasta que pudo abrir sus parpados temblorosos mirando hacia el suelo para no ver a la luz directamente. No podía creer que veía el suelo , sus piernas , la camilla en donde lo sentaron y sus manos sobre sus piernas.

Nerviosamente levantó la cabeza notando al médico mover un bolígrafo frente a él captando la atención de sus nuevas pupilas y mostrando que sus reflejos estaban más que bien, eran ágiles casi no pareciera que se habían cambiado sus ojos.

Sus ojos escarlata eran filosos y de una manera elegante se movían hasta las flores que el hombre de la salud tenía sobre la mesa , sintiendo por fin alivio de ver que su padre lo había acompañado hasta en este momento.

El argentino solía relacionar que donde fuera que había flores su padre lo estaba siguiendo y cuidando de él. Por lo que al ver las flores sobre el escritorio no puedo hacer otra cosa que cristalizar sus ojos en lágrimas.

__ tranquilo tranquilo no llore ... salio todo bien __ dijo con una sonrisa dejando el bolígrafo nuevamente en su bolsillo __ por lo menos sabemos que puedes llorar con normalidad__ musito haciendo asentir al argentino. El médico se percató de la presencia del eslavo pidiendo privacidad y prefirió dejarlos vivir un buen momento a solas ademaa de swr por su bien ___ los dejaré un momento , tengo algo que hacer , Ahora vengo ___ sin más que decir salió cerrando la puerta detrás de el.

__ Rus ... ___ susurro el albiceleste extendiendo sus brazos hacia el más alto___ enserio estas enorme y muy guapo ___ dijo comenzando a sollozar nuevamente.

El tricolor se levantó para abrazarlo con fuerza dejándolo llorar en su pecho acariciando su cabello con suavidad. El eslavo se quedaba hipnotizado y aún extrañado por el color de sus ojos , pero aquellos se veían igual de bellos que los que el guardaba en su memoria todos los días, solo más filosos y elegantes. De tono carmín, brillantes y afilados . Dos rubíes que hasta tenían personalidad propia a describir, tan hipnóticos y adictivos como los de color esmeralda que tenía el argentino originalmente.

___ se ven casi tan hermosos como los tuyos __ murmuró embelesado el tricolor , provocando una risita por parte del argentino.

___¿si?

Príncipe - RusargDonde viven las historias. Descúbrelo ahora