46 - Hogwarts reúne héroes...

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George y yo vamos tomados de la mano por los pasillos de Hogwarts. Sé que nos esperan, pero vamos a nuestro ritmo, disfrutando de los momentos cuando los niños no están.

Están, pero no con nosotros.

- Me hubiera gustado haberte podido tomar la mano así cuando íbamos a Hogwarts - comenta.

- Lo dices como si hubiera sido mi culpa.

- No, sé que fui yo. No sabía valorarte como merecías.

- No hablemos ahora del pasado Georgie, ahora somos felices, y estamos bien.

Él me besa la mejilla - Te amo. Y estoy muy orgulloso de tí, de mí, de nuestros hijos, de nuestra familia.

Sonrío - Y yo también.

De pronto, siento algo.

- ¿Qué pasa? - pregunta él alarmado.

- ¿Tú también lo sientes?

Ambos giramos la esquina y nos encontramos lo peor.

La pequeña Bloom está tirada en el suelo, busca una salida, pero no sabe hacer nada. El dementor abre la boca y el hilo de la felicidad cuelga sobre él.

- ¡Expecto Patronum!

Una osa corre para embestir al dementor. Se acercan más, pero otro oso algo más grande está al lado de mi patronus.

Me giro para encontrar a George escondiendo a nuestra hija tras él, con la mirada desafiante hacia los dementores y la varita en alto.

En cuanto los dementores se van, Bloom y George se abrazan.

- Papá, tenía miedo, mucho miedo. - la pequeña rompe a llorar y él le acaricia la espalda.

Me agacho a su lado - Ya, todo pasó, mamá y papá están aquí contigo.

- No te pasará nada si estamos aquí bebé.

George la carga, aunque ya está mayor para eso.

Ambos andamos rápidamente, tenemos que buscar a McGonagall.

- Tu patronus... es un oso. - comento volviendo a lo de antes.

- Bueno, los cuervos han pasado de moda. ¿No?

- Pero era tu esencia. Normalmente tu esencia no cambia.

- Puede, cuando estás muy enamorado. ¿No escuchaste a Remus?

- Pero, ¿por qué el tuyo y no el mío?

- Porque Fred y yo compartíamos la esencia del cuervo. El canto de dos es de alegría, y el de uno es de tristeza. Creo que en cuanto uno cambió, el otro también. Seguimos compartiendo ese detalle pequeño. Pero ahora, es nuestro patronus que más define a nuestra familia.

- Eso es...

- Muy bonito papá - termina Bloom aferrada a su cuello.

George sonríe.

Giramos la siguiente esquina.

Elizabeth está ensangrentada enfrentándose a tres niños que ya no ríen tanto. Evangeline está tomándola de la mano con algunas lágrimas.

- ¿Qué ha pasado aquí? - Neville aparece detrás de los niños.

- Elizabeth, Evangeline - llamo - ¿Qué os ha pasado?

- ¡Se están metiendo con mi hermana! Y no voy a permitir que eso pase - bufa la mayor.

Evangeline corre a tomarme de la mano, entonces los niños se ríen.

My Last Hope. George Weasley y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora