35 - Hija de una asesina y un timador

3.7K 275 44
                                    

- Señora Dursley, la declaro culpable del asesinato del señor Ludo Bagman.

Tras esa frase, mi vida cambió.

Mi madre entre rejas, mi padre muerto, yo en Inglaterra.

Ya ha pasado un año desde entonces.

Nadie sabe que he vuelto oficialmente, y es que, no estoy preparada para volver a mi antigua vida.

- ¡Clarke! ¡Date prisa!

- Ya voy.

Sé que ser diseñadora no era algo que pedí, pero creanme, lo considero prácticas para curandera.

Hay que coser, cortar, pensar, calcular...

Y el dinero que gano va para los cursos.

La comida sólo la veo necesaria una vez cada dos días. Hay que ahorrar si quiero seguir mi sueño.

Aunque, al vivir con Alberforth, me hace comer cada vez que estoy libre. Y como lo estoy poco, no sale bien.

¿Y mi cambio de apellido?

Soy hija de una asesina y un timador. Esa es la mejor explicación que Alberforth me dio.

Su apellido no podría ser, aunque me quiera como su familia, ya que tampoco ayudaría.

- Aquí tiene las nuevas telas.

Madame Malkin me mira, mira las telas, las toca, me vuelve a mirar y sonríe.

- Ya te puedes ir.

Asiento y salgo corriendo.

Llego a los vestuarios, me cambio de ropa casual a algo sucio y viejo, salgo enseguida y me pongo manos a la obra.

Nunca mejor dicho.

Porque estoy en una obra trabajando.

Allí es donde más trabajo.

- Aún no entiendo por qué no te ascienden. Trabajas más que todos nosotros. - Omer, mi compañero más cercano, se une a mí.

- Bueno, el miedo al éxito tiene algo que ver - bromeo.

- ¿Cómo van tus heridas? Ayer te caíste.

- ¿Te lo puedes creer? Caí sobre el desfiladero de metal, el que tiene agujeritos. Me rayé como queso.

Ambos nos reímos hasta que nos llaman la atención y tenemos que separarnos.

A la hora de comer, volvemos a encontrarnos.

- ¿Cómo está la familia? - le pregunto sacando mi botella de agua.

- Bien. Bastante bien. Mi hijo mayor ha empezado ya el instituto. Ya tiene doce años, ¿te lo puedes creer?

- El tiempo pasa muy rápido.

- Oh, me he echado el bocadillo de tortilla, mi hija pequeña se ha quedado con el de jamón york. - sonrío. - ¿Quieres?

- Gracias, pero no. Sólo quise parar a beber agua y preguntar. Ya sabes que no me gusta parar mucho.

- Deberías. No es bueno para la salud no comer.

- Lo tomaré en cuenta.

No salgo hasta que son las siete, ya cerca de la noche.

- Ser mujer es un sueño, enseñar ser parte del women power es avaricia.

- ¡Harry! Te abrazaría, pero estoy sudada, llena de cemento y barro.

Harry es el único que lo sabe, a parte de Ginny por cuestiones de pareja.

My Last Hope. George Weasley y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora