My Last Hope. George Weasley y tú

03 - Súbete al tren

Mirando mi varita, leyendo los libros de clase, con mis primos, pasé mis vacaciones.

A últimos de agosto, mi madre aparece en la casa del tío Vernon.

Se sienta en la mesa del comedor, y empieza a hablar con la tía Petunia mientras yo me voy despidiendo de ambos.

-Sed buenos - recuerdo. Dudley llora, mientras Harry me abraza con cariño.

Lo estrecho entre mis brazos. Los echaré de menos, eso seguro.

-Nos veremos en verano, ¿verdad? - Harry no lo dirá, pero también está preocupado, aunque sepa muy poco de a dónde voy.

-Eso espero chiquitín. Dud, no llores más, ven - me separo de Harry para abrazar al otro. - Estaré bien. Y volveré con un regalo para tí.

-¿Lo prometes?

-Sí

-Espero que no te hagan daño.

Bajando las escaleras, me doy cuenta, iré a casa, y engañaré a mi madre sobre mi vida. Es algo justo, puesto que sé que ella me engaña con respecto a mi verdadero padre.

Lo bueno es que paso sólo dos días con mi madre.

El 1 de Septiembre, me encuentro feliz pero he de fingir.

Mi madre me llama, así que bajo con pocas ganas de seguir. Ella gruñe, odia llegar tarde, y yo, pero hay que fingir.

En cuanto llegamos a la estación de tren, me deja todo delante de mí, y se va sin despedirse.

Ya me lo ha dicho todo.

Me muerdo el labio por dentro. Me ofende, pero estoy acostumbrada.

A lo lejos, veo una familia de pelirrojos andar deprisa con carritos para cargar sus maletas.

Busco una de esas, pongo mis maletas, pero al girarme, ya no están.

Miro por todas partes.

Al ver mi billete, casi me dan ganas de llorar, no sé dónde está el andén nueve y tres cuartos.

-Hola pequeña, siento entrometerme, pero... - me giro y me asusto un poco. Un hombre alto y barbudo está delante de mí. -...soy Hagrid, lo siento, soy malo con las presentaciones, y me parecía que estabas perdida.

- Sí - admito avergonzada - Pero dudo que conozca el andén...

-¿Nueve y tres cuartos? Como la palma de mi mano, sígueme.

Le hago caso, pero, tal y como son las cosas, no debería.

Lo veo traspasar el muro. Mi corazón da un vuelco, eso no me lo esperaba. Paso también con los ojos cerrados con fuerza.

Al abrirlos, él sonríe.

-Suele pasar la primera vez. ¿Eres muggle?

-Sí.

-¿Cuál es tu nombre pequeña?

-Tn, Tn Dursley.

-Yo a tí te conozco.

Lo miro sorprendida - ¿De verdad?

-Oh, sí. Es difícil no hacerlo. Hija de una muggle, y un padre mago, lo que te convierte en mestiza, y prima del famos...

-¿¡Conoces a mi padre?! ¿Sabes dónde está?¿Quién es?¿Cómo se llama? ¿Me echa de menos?¿Sabes si me conoce?¿Es verdad que no quiere saber nada de mí?

-Cálmate pequeña Dursley, no debería haberte dicho todo eso. Bueno, nos vemos en Hogwarts. Pásalo en grande haciendo amigos.

Intento salir tras él, pero desaparece.