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Las fuertes pisadas llamaron la atención de las personas de la casa, Izana levantó un instante la vista de su revista y al ver a su hermano menor intacto siguió perdiendo el tiempo entre las letras, Emma por su lado vio curiosa el comportamiento molestó de Mikey, y Shinichiro solamente suspiro ante eso.

— Buenas tardes, disculpen la intromisión.

— Bienvenido Draken.

— Muchas gracias Shinichiro-san.

— ¡Draken! — Chilló emocionada Emma, Izana solamente levantó su mano en forma de saludo, sin despegar su atención del artículo.

— Hola Emma. — Shinichiro sonrió ante el ambiente que empezaba a crear su hermana y el amigo de su hermano menor.

— Disculpen que los molesté, pero acaba de ingresar uno de mis hijos muy molestó y ya saben, cosas de adultos, me gustaría saber la razón. — Izana asintió con la cabeza dándole la razón a su hermano.

— Bueno, tiene que ver con la razón de mi visita también. — Los tres hermanos clavaron su mirada en Draken y este sonrió nervioso. — Necesito un favor.

[...]

Su puerta fue suavemente tocada tres veces, pero él se negó a contestar, sin pedir más permiso Izana entró a la habitación y vio el bulto que estaba en la cama. — ¿Sabes que Shinichiro va a subir en cualquier momento?

— Vete, no quiero escuchar a nadie.

— No puedes ser así, Draken tiene derecho a tener más amigos.

— ¡Pero ya tiene muchos! Está Baji, Mitsuya, Pah y...

— Pero son los mismos amigos que tienen en común, también es sano que tengan amigos que no coinciden.

— Vete. — Izana inhaló y exhaló ante la actitud de su hermano. — Si no hubiera tenido varicela, entonces Kenchin no hubiera ido solo en ese viaje y no hubiera conocido a esa peste.

— Bueno, mejor escóndete o vete con alguno de tus otros amigos, porque Draken vino a solicitar un favor a nuestro hermano y estoy seguro que no te va a gustar y mucho menos la respuesta que él le dio.

— ¿Qué? — Mikey salió de entre un montón de cobijas y observó a su hermano. Izana tenía una expresión difícil de descifrar.

— Izana, fuera, te castigare a ti si él se escapa hoy. — La voz del pelinegro hizo sobresaltar al moreno, con un poco de pánico vio a su hermano menor y en un susurro habló.

— Lo siento, hice todo lo que pude, sopórtalo. — Shinichiro suspiro al ver esa interacción entre sus hermanos, pero rápidamente se recompuso, Izana con un puchero bajó a la primera planta y lo dejó a él con Mikey.

— Por dos semanas tendremos un inquilino.

— ¿Inquilino?

— Sí, es una persona que viene a conocer el lugar y también viene a convivir con alguien en particular. — Mikey sintió su estómago revolverse, pero se negó a aceptar que su hermano mayor,  al que consideraba su figura paterna le estuviera traicionando de esa forma.

— ¿Quién es?

— Es una sorpresa, llegará mañana.

— ¿Quién es?

— Un conocido de Draken.

— ¡Shinichiro!

— Oye, no grites, estoy cerca tuyo.

— ¡Más vale que no sea la persona que creo!

— Mikey, deja de gritar, estoy cerca tuyo. — Pidió una nueva vez. — Además, ya lo hablé con el abuelo y también está de acuerdo, entonces nosotros recibiremos al inquilino y visita de Draken. — Mikey se cubrió con la cobija y golpeó con insistencia la superficie de su cama.

Consanguineidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora