Capitulo 41

414 46 9
                                    

Advertencia de smut, si no les gusta no lo lean.

1 semana después.



11:00 pm







Estaba solo en el gran penthouse, esperando pacientemente a SooBin que estaba en un evento de moda, si, de nuevo, había tenido tres en una semana, ese era el último del mes, supuestamente.

Dicho evento, por razones desconocidas, no contaba con una fiesta luego, por eso, sabía que SooBin llegaría temprano.

Estaba arrojado en la cama, mirando el techo mientras pensaba.

Alzó su mano izquierda y miró el anillo en su dedo, sonrió antes de levantarse, directo al baño.

Se duchó con calma, usando el shampoo de SooBin sin problemas, se tomó su tiempo para salir y enroscar una toalla en su cintura, secó sus pies antes de salir,  sintiendo el frío del suelo.

Su teléfono sonó.

—¿Si? ¡Oh, hola, HyeJin! —YeonJun empezó a hablar con su amiga, caminando por todo el lugar, acomodando despreocupadamente las decoraciones del lugar, hasta que llegó a la cocina, abrió uno de los gabinetes, rebuscó en lo más profundo y sacó un paquete de gomitas ácidas— ¡SooBin cree que soy estúpido!

¿Qué? ¿Por qué?

—Me escondió las gomitas en lo más profundo del gabinete, cree que no las voy a encontrar, ¡Ja! No sabe de mi poder —dijo abriendo el paquete para empezar a comer, se apoyó de la encimera siguiendo con la conversación, escuchando atentamente a su amiga que había empezado con clases de tejido, emocionada por lo que estaba aprendiendo.

No supo cuánto tiempo estuvo ahí parado hablando, solo con la toalla, pero no quería moverse, estaba cómodo y las gomitas aún no se acababan.

—Ya llegué —escuchó la voz de SooBin, sonrió levemente siguiendo con su conversación.

SooBin avanzó a dónde escuchaba estaba su pareja, quedándose parado a una distancia prudente, dejó su saco en la mesa del comedor, avanzando aún más al ver al abogado distraído.

—Hola, Binnie —saludó YeonJun cuando sintió las manos frías de SooBin en su cintura, sonrió de medio lado al recordar cómo estaba.

Solo una simple toalla tenía.

Nada más.

SooBin recostó su barbilla del hombro ajeno, inhalando el aroma a arándanos del shampoo, la piel absolutamente limpia.

Sería una pena que lo hiciera sudar.

YeonJun siguió hablando, siendo consiente de los besos que iban por sus hombros, serpenteando por su espalda, era consiente de los dedos jugando con la toalla.

Sintió un escalofrío al sentir las frías manos de SooBin pasearse por su ombligo, subió lentamente hasta llegar a sus pezones, uno en cada mano.

Apretó los labios sintiendo la respiración de SooBin en su oreja.

—Dile a HyeJin que estás ocupado —le susurró, usando su lengua para deslizarla por la curvatura de su cuello— ¿Me vas a dejar hacerlo? —preguntó en el mismo tono de voz, acercando por completo su pelvis al abogado que asintió repetidas veces arrojando la cabeza hacia atrás.

—HyeJin, hablamos más tarde, tengo que... Tengo que hacer la cena —excusó a su amiga que no se creyó ni un poco de lo que dijo YeonJun pero aún así, colgó la llamada.

YeonJun dejó el teléfono en la encimera, a un lado del paquete de gomitas.

—Espero no sea uno de tus chistes —dijo el vampiro jalando bruscamente los pezones ajenos. El abogado jadeó apoyándose con ambas manos de encimera.

Vamp Laws: The Last Judgment || SooJunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora