EL JARDÍN DE LAS MARIPOSAS VP/ BBB

XVI

Si la mismísima muerte me reclama como ser amado, privado de energías y a mi suerte resigna, yo a su pecho gélido y baldío sin dudar me acogeré. Tan solo ámame para siempre y dame a probar esa granada; pues así sellaremos el pacto y por siempre seré tuyo.

Seré tuyo, en el infierno, en el tártaro o en la gloria, pues no hay más lugar para mí que no sea junto a ti. Seré tuyo en el cruel invierno, en la fértil primavera, en el candoroso verano y en el desolado otoño que se siente como tres siglos si no estás a mi lado, así que, dime.

¿Quieres que sea tuyo?

Completamente tuyo

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Pete phongsakorn saengtham

-Mi preciosa mariposa, la mariposa que por tanto tiempo he buscado finalmente esta aquí.

El rostro de aquel hombre ha quedado difuminado en mi mente como la aparición de un fantasma que te acelera el corazón y luego desaparece de los recuerdos dejando como único rastro el desagradable sabor del terror. - Es solo una mala pesadilla -. Papá thong se ha empeñado por muchos años en ayudarme a disipar el miedo, más aún, sé que esto no solo es una pesadilla, es un recuerdo que duele y reabre una grieta en mi corazón la cual no sé realmente cuándo pueda llegar a sanar. - Estoy aquí, todo esta bien -. Papá es especialista en ayudarme a dejar el doloroso recuerdo en donde pertenece, en el pasado, así que cuando abro los ojos durante la madrugada no puedo evitar preguntarme «¿qué haré ahora, cómo podre dormir el resto de la noche?», siento tanto miedo a pesar de que otra vez, como anteriormente ha sucedido, aquella presencia gentil y dulce que me acompaña y me salva ha aparecido, ha estado ahí, en mi recuerdo, en mi pesadilla, transformado en mariposa, una mariposa hecha de las alas de muchas otras mariposas y aunque me causa incertidumbre, saber que esta ahí, conmigo, de alguna forma me brinda esperanza, la esperanza de que mi corazón seguirá latiendo, la esperanza de saber qué tengo un destino a dónde ir y una misión que cumplir. -No, él no te tendrá, él no arruinará la nueva vida, pues eres un milagro, un deseo invocado por alguien cuyo corazón te anhela fervientemente; eres la prueba de que el amor está más allá del bien y del mal, eres una parte mía, eres mi alma en otro cuerpo y otra persona y aunque no serás como yo y yo jamás seré tú, ambos estaremos conectados eternamente - Recuerdo sus palabras, me las recitó desde ese fatídico día, más no encuentro el verdadero significado de todas ellas y principalmente no sé realmente si aquella persona es real o una creación de un momento traumático de una noche durante mi infancia.

- ¿Qué sucede?

Vegas me sujeta desde la cintura y acaricia mi cuerpo suavemente; - He tenido una pesadilla - digo sin tener verdadera intención por contarle lo que sucede, pues no sé cómo explicarlo dado que aunque tengo algunos recuerdos, no sé cuáles son reales y cuáles pertenecen al trauma, ese que de una u otra forma me llevo a vivir una buena vida como un miembro más de la familia theerapanyakul.

- Puedes contarme lo que sucede, estoy aquí, complementamente para ti.

Vegas es un amante apasionado que nunca parece cansarse de mí y de mi cuerpo y aunque puede parecer intimidante, fiero y demandante, con el pasar de los días he podido constatar que por debajo de la coraza que usa para mantenerse a salvo hay una persona suave y encantadora. - Vegas - lo llamó con suavidad pues su mirada brillante me ha hecho darme cuenta de cuánto le gusta cuando lo nombre. - ¿Puedes hacerlo? - pregunto. - ¿Puedes hacer que se vayan? - cuestiono sujetando su pecho y apretandome a su cuerpo.

- ¿Hablas de las mariposas?

Niego con la cabeza; las mariposas aunque no me agradan del todo ya no me producen tanto miedo como antes, pues ahora, cuando recuerdo sus alas suaves que revolotean con fragilidad solo puedo pensar en la presencia angelical de mis pesadillas y en las caricias del hombre que duerme junto a mi cada noche, el mismo que se ha declarado mi verdugo y mi amante.