Genshin impact one shots +18

Xiao #1

(El nombre del personaje es Aurora, su cabello es pelirrojo, sus ojos color miel, su visión es pyro, el arma que lleva es un catalizador y no es muy alta)

Un día como cualquier otro Aurora se encontraba paseando por los alrededores de Liyue, su meta del día era recolectar algunos minerales y materiales para fortalecer su querido catalizador, le hacían falta solo unos cuantos más para poder dar por finalizado el día.

-Muero de hambre- Pensó en voz alta la chica- Quizá podría vender algo de lo que encontré para conseguir alimento y techo por la noche.

Aurora venía de Inazuma, no llevaba tanto tiempo en la nación geo y lo mejor que pudo pensar fue en por fin ir a conocer la famosa posada Wangshu. Lo que la motivó a comenzar su viaje fue el conocer nuevas cosas, nuevos platillos, lugares y personas, hasta ahora todo le había salido bien.

El cielo se pintaba de los colores del atardecer, los cuales hacían juego con la chica, quien subía acaloradamente los escalones frágiles del edificio, todos sabían que era mejor tomar el elevador pero Aurora no sabía nada, solo sabía que quería descansar.

Al ir tan distraída mientras jugaba con los volantes de su vestido no notó que los escalones cada vez crujían más y cuando menos lo esperó uno de estos se rompió por la mitad, Aurora jadeó al sentir su cuerpo suspendido en el aire antes de que estuviera casi como por arte de magia en el último piso del lugar. Lo único que alcanzó a ver fueron unas partículas color turquesa en el aire.

-Buenas tardes señorita, Mi nombre es Verr ¿Buscaba alojamiento?- La encargada del mostrador saludó de forma amigable a la chica que se encontraba desconcertada.

-Ho-Hola, Si, solo me acaba de pasar la cosa más rara- Dijo riendo bastante nerviosa.

Aurora le contó a Verr (la encargada) del accidente que casi sufre y de la especie de "milagro" que la salvó.

-Oh, te refieres a Xiao- Contestó la mujer de manera normal- Él es el guardián que cuida a todos los viajeros, te sugiero que vayas a hacerle una ofrenda en cuanto puedas, eso si, no esperes verlo-

-¿Un guardián? Wow ¿Es alguna especie de animal como en los cuentos?- Preguntó la pelirroja con asombro-

Verr rió antes de darle su llave a la chica, la cual subió de inmediato a dejar sus cosas y luego bajó a la cocina por la ofrenda para aquel guardián del que tanto sentía curiosidad.

-Aquí tienes- respondió el chef del lugar con una sonrisa tierna, Aurora le había atosigado de preguntas sobre qué podría dejar de ofrenda y después de eso sobre el mismo cocinero.

-Gracias Yanxiao- Aurora tomó con cuidado la caja donde venía un platillo especial, se despidió del señor con la mano después de prometerle que volvería para contarle cómo le había ido.

La verdad todos los que habían hablado con ella sabían que se estaba creando expectativas demasiado altas, el guardián Yaksha del lugar casi nunca se dejaba ver y solía ser bastante poco amigable.

La noche ya estaba sobre el cielo, Aurora subió a la terraza y dejó la caja junto con una nota, esperó un buen rato hasta que el cansancio ya la estaba haciendo cerrar los ojos ahí mismo.

-Buenas noches señor Yaksha- Dijo en voz alta una somnolienta Aurora.

A la mañana siguiente bajó a hablar con Yanxiao para contarle que aunque no apareció el guardián ella lo había pasado bien mientras miraba el cielo y disfrutaba de la brisa que corría.

-Tienes un aire de aventura muy curioso, deberías decirle a la señora Verr que te de algunos encargos, así podrías pasar un tiempo más acá y te dejarían hospedarte- Aurora le agradeció por la comida y la sugerencia antes de subir corriendo con Verr.

Ese día ella llevaba un vestido rojo con vuelo, su tic nervioso era siembre ir apretando o jugando con los volantes, así que cuando fue a hablar con Verr la muchacha no dejaba en paz los pedazos de tela.

-Claro, la ayuda extra nos vendría de maravilla, a parte le caíste bien a todos aquí-

-Muchísimas gracias, no diría que a todos pero gracias por el trabajo- Aurora de encogió de hombros mientras sonreía de lado.

-Oh ¿Lo dices por Xiao? Yo diría que también le caíste bien- Aurora enarcó las cejas confundida, ella no conocía a ningún Xiao- Ese es el nombre del adeptos que te salvó ayer.

Aurora soltó un chillido de la emoción mientras daba pequeños saltos- Hoy le llevaré de nuevo Tofu con almendras!

Ambas rieron un poco antes de que Verr mandara a Aurora por algunos materiales para la cocina, como menta, solsettias, manzanas, carne, etc. La chica salió de la posada para ir a buscar todo sin percatarse que desde algún punto alto un chico con ojos color ámbar observaba cada uno de sus movimientos con extremo cuidado y curiosidad.

-Tch, solo es otra mortal frágil que va por ahí como si pudiera iluminar el mundo- Se dijo para si mismo tratando de restarle importancia mientras se disponía a dejar de verla.

Y es que tenía toda la razón, Aurora era muy descuidada en cuanto a sus aventuras, siempre regresaba con moretones y rasguños en todo el cuerpo, pero eso si, también regresaba con una sonrisa y con lo que se había dispuesto a buscar.

Ella aún no dominaba bien el uso de su catalizador, pero siempre pensaba que todo lo que le pasaba solo le dejaba una enseñanza para el futuro. Después de estar recorriendo los alrededores por unas horas por fin consiguió todo e iba de camino a la posada de nuevo.

-Ouch, este si que dolerá un tiempo- Se dijo la chica mientras miraba un nuevo golpe que se había hecho en la pierna.

Al darle todos los ingredientes a Yanxiao, Aurora le pidió que le enseñara a hacer el dichoso platillo para Xiao.

-¿De Nuevo irás a verle?- Cuestionó el mayor mientras sacaba los implementos- No te rindes nunca ¿verdad?

-Tampoco es como que ya haya ido 100 veces- Respondió con tranquilidad la pelirroja- Por favor

Aurora aprendió rápidamente y su tofu con almendras fue puesto en una caja bonita para regalo con una nota, La chica subió a la terraza por la noche y dejó la caja en el mismo lugar que el día anterior.

-Me llamo Aurora, solo quería decirte que estoy agradecida por tu trabajo y por ayudarme- La chica dijo en voz alta esperando que Xiao la escuchara, el ambiente no tardó en sentirse tenso pues Xiao si estaba ahí observándola solo que ella no podía verlo- Uhm, y quería preguntarte si no te sentías solo? Podría venir por las noches a contarte algo, me gustaría conocerte-

Aurora apretaba sus manos y podía sentir su voz temblar- Buenas noches, Xiao-

La chica se fue de ahí tan rápido como pudo, dándose de golpes en la frente mientras pensaba "¿Qué fueron todas esas tonterías que dije?". Aurora sabía en el fondo que si quería conocerlo pero se sentía terriblemente avergonzada por la forma en que actuó.

Por su lado, Xiao estaba casi petrificado en la terraza, nadie había hecho nunca nada así, ni le habían propuesto algo parecido.

-Da igual, de todas formas no tengo tiempo para escucharla- Pensó en voz alta el chico.

Aunque muy dentro de él y casi sin que se diera cuenta, él también le deseó Buenas noches a la muchacha.