El famoso y tú

CAPÍTULO 37

(Drake)

El estadio estaba a rebosar de gente, teníamos poco tiempo hasta que empezara el partido, ya que habíamos estado mucho rato intentando explicar a la mayoría de los concursantes qué íbamos a hacer.

-Dea cuerdo... ¿Entonces el basket se puede votar la pelota con las dos manos o no?-pregunta Liam bajando del coche y sumido en sus propios pensamientos.

-Si, a mí no me ha quedado muy claro las posiciones...-lo apoya Tania en el mismo estado.

Kendall pone los ojos en blanco que está cansado del interrogatorio que ha durado todo el viaje.

-Vosotros solo mirad y disfrutad ¡Va a ser la bomba!-y su emoción es lo único que necesitamos para empezar a entrar en el gran edificio.

Pasamos las entradas y seguimos a la multitud que se dirige a las inmensas gradas que rodean la pista en la que pocos minutos después los jugadores se dispondrán a jugar. Por instinto, cojo a Kate de la mano para no perderla de vista, noto que me da un pequeño apretón y la miro para dedicarle una sonrisa tranquilizadora, no he tenido oportunidad de decirle lo preciosa que está.

A ella se le forman unos bonitos oyules al sonreírme de la misma manera, hasta que veo que una chica de más o menos nuestra edad con un rojizo pelo ondulado se le acerca por detrás.

-Una pregunta ¡¿Eres Kate del concurso?!-Kate aparta su mirada de mí para fijarla en la pelirroja, abre la boca para contestar, pero no le salen las palabras.

-Lo siento nos tenemos que ir-le digo a la chica mientras empiezo a tirar del brazo de Kate, que se ha quedado unos segundos paralizada.

-¡Madremia eres Drake!

Eso es lo último que escucho antes de avisar a los otros concursantes que me sigan, intentando ir lo más rápido posible a la zona que teníamos reservada. Voy a paso rápido mirando hacia todos lados en un intento de detectar a cada uno de ellos, voy haciendo hueco entre la multitud en un intento de pasar desapercibido, aunque no parece funcionar porque los gritos cada vez son más ensordecedores. Por suerte tardo menos de 2 minutos en girar una esquina y llegar donde está un guardia de seguridad, entregarle nuestros pases y entrar en una sala donde los gritos de la gente se convierten en un murmullo casi inescuchable.

-¿Estáis todos?-pregunto con la respiración agitada, paseo la mirada, Liam con el pelo revuelto, Kendall con media chaqueta fuera, Tania con el bolso entre sus brazos, Liv con un cartel de los Lakers y Kate  a mi lado, vale, uf, estamos todos.

-Drake ya puedes soltarme, no me voy a ir corriendo aún-bromea Kate, me doy cuenta de que sigo cogiendo su mano con bastante fuerza y la aparto de la suya, ella me dedica una sonrisa y me guiña el ojo cuando nadie la mira.

Vale, era una broma.

-Lo siento mucho chicos no sabía que podría llegar a pasar esto-me disculpo bastante frustrado, había pensado en todo menos en una estupidez como aquella.

-No te preocupes, una anécdota más-intenta tranquilizarme Liv levantando su cartel, no sé ni de dónde ha aparecido.

El ambiente se destensa al cabo de unos minutos, cuando un hombre informa sobre el comienzo del partido y todos nosotros nos sentamos en nuestras respectivas butacas.

-¿Liv te parece si te sientas a mi lado para que te vaya explicando como va el juego?-Le pregunta Kendall a la rubia cuando nos disponemos a escoger nuestros asientos, ella forma una tímida sonrisa.

-Claro

Kendall me mira de reojo y yo le guiño el ojo, buen trabajo.

-¡Espera Kendall yo también necesito tus conocimientos!-exclama Liam mientras se apresura a sentarse al otro lado de Kendall, que pone los ojos en blanco.

Kate y yo nos sentamos juntos, Tania se decide por el asiento de mi otro lado y se empieza a escuchar el murmullo de los espectadores en las kilométricas gradas.

-Wow-exclama el pelirrojo, y con razón, desde nuestro sitio podemos ver el partido muy de cerca y tenemos una gran vista del estadio, por no hablar de las 3 pantallas en las que se irán proyectando las jugadas. Kendall empieza a toquetear una pantalla al lado de su asiento.

-¿Podemos pedir comida?-pregunta asombrado.

-Pedid desde vuestra pantalla todo lo que queráis-digo señalando cada una de las tabletas que los concursantes tienen a mano izquierda, ellos no tardan en empezar a husmear entre las opciones de comida, entre otras cosas disponibles.

Kate, que se sienta a mi lado, parece haber encontrado lo que esperaba.

-NO ME LO PUEDO CREER-dice un poco más alto de lo esperado, haciendo que dé un respingo.

-¿Qué pasa?

-Está mi helado favorito-una gran sonrisa se asoma en su rostro, CASI, digo casi, me quedo embobado, solo antes de ver su helado favorito.

-¿En serio? ¿Chocolate?-me ha decepcionado y lo demuestro poniendo una mueca.

-Si tienes algun problema ya puedes irte al lado de Liam-no respondo, por lo ue se muestra satisfecha y devuelve si atención al menú que dispone el estadio.