Capítulo 20

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Llego el día de la fiesta de Yurio, grandes globos con dibujos de tigres adornaban el lugar, juegos infantiles en un lado del jardín, los niños corrían como desquiciados, Viktor sacaba los últimos bocadillos tratando de no tropezar con los pequeños, Isabella platicaba con otros padres de familia, la fiesta estuvo muy amena, cuando era casi hora del pastel el cachorro empezó a abrir sus regalos, era muy inteligente y, aunque le habian gustado, sabía que ninguno era el regalo de su papá, el regalo de Víktor si lo había ubicado, y eso fue porque el peliplata era muy depistado, iba a ponerse triste cuando vio a su papá con lo que parecía una maleta con un moño, se acercó un poco para ver de que se trataba, -Feliz cumpleaños Yurio, aquí esta tu regalo, Yuuri dejo la maleta en el piso, el cachorro estaba expectante, Víktor se había acomodado al lado de su hijo y los demás esperaban también ver de que se trataba. El azabache abrió la maleta y sacó un lindo minino de ella, el rostro de su hijo no tuvo precio, el peliplata también estaba sorprendido, el cachorro agarro a su nuevo amigo, estaba embelesado con el gatito , -Y bien Yurio, como le vas a poner? Le pregunto su abuela, el cachorro se quedó pensando un poco, en eso sus ojos brillaron y levantó al minino, -Poma Tiger Ascopión!, sus amiguitos aplaudieron el nombre, Yuuri se le quedó viendo, era un nombre demasiado largo para el animalito, así que se le ocurrió algo, -Es un gran nombre pequeño, pero, te parece si le digo Potia? Para mi sería menos complicado, -Pa! Shi, Potiaaaa!!! Yuuri río de las ocurrencias de su cachorro.

Una semana después Yuuri había organizado el fin de semana que quería pasar con Víktor, el medico le había administrado suficiente medicamento para que estuviera bien los próximos días , el azabache había decidido ir a una cabaña al bosque, le gustaba mucho la naturaleza y quería conectar con el peliplata nuevamente, así que se fueron por carretera, parecían novios, Víktor le encantaba tener toda la atención de Yuuri para él, parecía niño en dulceria, llegaron a una cabaña muy acogedora, a lo lejos se veía un embarcadero y un lago muy bonito, se instalaron y salieron a darle una vuelta al bosque. Viktor iba atento a donde pisaba, ya que estar en la naturaleza no era lo suyo, trastabilllo un poco en una subida y cayó encima de Yuuri, este solo se rió al ver la preocupación de su pareja, el peliplata al querer levantarlo volvió a resbalar y volvió a caerle encima, después de ello Yuuri no dejó que se levantara y empezó a besarlo, el peliplata se dejó hacer, la mirada que le daba el azabache era de deseo, pero de reojo veía que no hubiera nadie más, intuyendo lo que hacía su pareja Yuuri sonrió picaramente, -Tenemos 10 hectáreas se bosque solo para nosotros, -Entonces aprovechemos, le dijo el peliplata besandolo con pasión... ese fin de semana se amaron profundamente, conectaron y Yuuri volvió a marcar a Víktor, se dedicaron a disfrutarse, nadaban en el lago cerca de la cabaña, esta tenía una terraza cubierto de cristal, les encantó quedarse ahí, durmiendo a la luz de la luna, platicando de todo y nada, como si el tiempo se hubiera detenido esos días, vivieron el aquí y el ahora como en una nueva luna de miel.

Un mes después

Yuuri se había estado sintiendo más cansado, de acuerdo con el médico, su cuerpo estaba al límite, y el desmayó que tuvo ese día solo se lo confirmó, afortunadamente no estaba su familia en casa, entendió que ya estaba en el final de su vida, el medico le recomendó un enfermero Beta que le apoyaría en ese tiempo, Michel Crispino, ese mismo día llegaria a su casa. Estaba un equipo de mudanza adecuando la habitación de la pareja en la planta baja de la casa, Yuuri ya no podía estar subiendo escaleras, Víktor y Yurio llegaron justo cuando estaban acabando, Yuuri estaba en su estudio revisando detalles de la rutina que llevaría a partir de ese día con Michel, Víktor entró al estudio con su cachorro, -Yuuri? Que está pasando? El peliplata se veía preocupado, -Viktor, me alegra que hayan llegado, él es Michel Crispino, a partir de hoy se quedará aquí para apoyarme, es recomendado del Dr. Celestino, así que sabrá hacer su trabajo, a Víktor le dio un vuelco el corazón, estaba pasando, lo que más temia se estaba haciendo realidad, -Mucho gusto sr. Katsuki, estaré aquí para lo que necesiten, -Michel, puedes llevar a mi hijo a su habitación? Así se empiezan a conocer, te parece campeón? El cachorro estaba dudoso, -Michel es amigo, esta bien pequeño, a él también le gustan los gatos, -Serio? Ok... y así el niño salió con Michel para conocer a Potia... cuando salieron Víktor se acercó a su pareja, -Lo siento Víktor, Le dijo abrazando a su pareja, -Yuuri... -Todo va estar bien, te lo prometo...

Con el paso de las semanas el azabache se debilitó mucho, ya no podía salir de la habitación y le dolía horrores el cuerpo, pero trataba de tener siempre una sonrisa para su familia, Viktor se quedo con él de tiempo completo, y aunque Yuuri le decia que no era necesario, el peliplata objeto y al final ganó,
pronto sería su cumpleaños del azabache, su madre había llegado días atrás, JJ e Isabella lo visitaban diario, Yuuri le leía un cuento a su hijo para dormir todas las noches, el cachorro se quedaba con su abuela en su habitación, Víktor atesoraba cada segundo al lado de su Alfa. El cumpleaños de Yuuri llegó, Michel le había puesto una intravenosa para que pudiera estar lo mejor posible en el día, la familia disfruto de un día de películas y pastel, Yuuri parecía haber mejorado, así que estuvo jugando un poco con su cachorro, platico con su madre y en la noche se dedico a mimar a su pareja, lo besó y acaricio tanto como pudo, Víktor se caía de sueño, pero no quería dormir, Yuuri le dijo varias cosas al oído que hizo que se sonrojara, rieron y al final el peliplata cayó dormido; Yuuri lo abrazaba, sabia que la vida se le iba, -Te amo Víktor... con esa frase y una sonrisa en el rostro,el azabache dejo este mundo. Cuando el peliplata despertó vio a su pareja, pero su corazón se estrujo, se veía tranquilamente dormido, pero Víktor sabía que se había ido, lanzó un grito y abrazo el cuerpo de su esposo, Michel entró y vio la escena,le aviso al Dr. Celestino, y a los Leroy, Michel les ayudaria con los tramites del deceso y el funeral, Hiroko y su cachorro bajaron, Yurio se puso mal al ver a su madre llorando y a su padre que no le respondía, no entendía mucho de la muerte, pero entendió que su padre no volvería a jugar con él ni a leerle un cuento para dormir, el cachorro también abrazo a su padre y lloró. Hiroko estuvo al lado de Víktor todo el tiempo, cuando se iban a llevar el cuerpo el peliplata no quería soltarlo, tuvieron que ponerle un sedante, despertó un par de horas después, estaba en la habitación que compartió con Yuuri las últimas semanas, se hizo un ovillo y lloró, lloró hasta que solo fueron sollozos, hasta que no salió ni una lágrima de esos ojos como el océano, rato después entró Hiroko, -Víktor, como te sientes? -Como si me hubieran arrancado el corazón, -Te necesito fuerte por mi, por Yurio, y por ti... toma, debes vestirte, te espero afuera, el peliplata asintió y su suegra salio de la habitación, se cambió y salió a la sala, todos estaban ahí, su cachorro fue a su encuentro, lo cargo y salió de la casa escoltado por Michel, en el servicio funerario, Víktor parecía un zombie, tenía la mirada perdida, le entregaron las cenizas del azabache y las tomó, el trayecto a la casa fue en silencio, llegó y se metió a la habitación, puso las cenizas en el buro y se acostó, Hiroko cuidaba de Yurio mientras tanto, entendía el duelo que estaba pasando Víktor, lo dejaría tranquilo ese día.

Pasaje a tú Corazón (Yuri On Ice)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora