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Taehyung y Jungkook estaban sentados juntos, estaban sentados juntos porque eran compañeros en una tarea que hicieron y de la cual tenían que hacer otro trabajo. El primero lo vio como una oportunidad para volver a hablar con el otro, sin embargo el segundo pareció aborrecerlo cada vez más. 

— Escucha, Jungkook. —Empezó a hablar Taehyung. — Entiendo que me odies, pero no puedes ignorarme para siempre y menos cuando tenemos que hacer trabajos juntos, así que puedes insultarme o golpearme si eso te hace sentir mejor, pero tienes que hablar conmigo. —Dijo al ver como el otro no le dirigía la palabra ni la mirada.

— Lo sé, solo que... Eso no mejoraría nada, no logro entender porque lo hiciste, había escuchado muchas cosas de ti pero no creí que eran ciertas. —Le respondió después de mucho tiempo, aunque tajante y con un tono de voz molesto. 

— Lo siento, sé que no debí hacerlo... 

— No te perdono, aun no puedo hacerlo... Pero, hablaré contigo otra vez. —Lo hacía más por compromiso, no porque quisiera realmente hacerlo. 






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Era el día de descanso de Hoseok, así que Jungkook se encontró en la casa de su Hyung muy nervioso porque aún recordaba lo que había hecho.
— ¿Te encuentras bien? —Preguntó Hoseok al verlo tan ido pero a la vez tan rígido. 

— S-sí es solo que... —Debía pensar en una excusa. — Hablé con Tae y no sé como sentirme. — En cierto punto era verdad, era otra cosa que no lo dejaba en paz y a la vez servía para sacarlo y hablar de eso con Hoseok.

— ¿Por qué? ¿Estás molesto con él?

A Jungkook le sorprendió el tono tan monótono en que lo dijo, era como si pareciera ajeno a lo que posiblemente lo hizo enojar, lo cual era algo que involucraba a su amigo y a él.
— Bueno... Ustedes dos se acostaron y no me dijeron nada. —Respondió incrédulo.

— Yo creí que te lo había dicho. —Para él ni era la gran cosa, si Yoongi se acostara con alguien más estaba con todo el derecho de hacerlo, no eran nada y no le debía nada, lo mismo con Jungkook.
— Pero no deberías molestarte con tu amigo por eso, solo fue una vez y ni siquiera recuerdo su nombre.

Eso indignó más a Jungkook, ¿cómo que no era la gran cosa? Para él lo era y mucho.
— Me siento miserable... —No sabía porque pero se sentía así, tal vez pensaba mucho las cosas.

— Es normal sentirse así, somos humanos.

— Pero tal vez es porque soy una mala persona. —Tal vez lo era, tal vez no sabía cómo lidiar con esto y se desquitaba con su amigo, o tal vez estaba muy celoso y lo hacía no pensar con criterio.

— Eres una gran persona, eres amable, divertido y tienes un gran corazón. —Sonrió mientras lo miraba fijamente a los ojos y su sonrisa se hizo más grande al ver los ojos del otro brillar.
— Tu existencia es un regalo, Jungkookie. —No le gustó verlo así, nunca le gustó ver a las personas mal así que intentó animarlo.

Jeon se sonrojó y se puso tímido, siempre se ponía tímido con los halagos y más si era de alguien que le gustaba.
— ¿Tú perdonarías a un amigo que se acostó con otro de tus amigos? —Quería saber el punto de vista del pelirrojo.

— La intimidad de mis amigos no es problema mío, si ellos quieren coger que lo hagan. —Alzó los hombros, para él no era problema. — No deberías molestarte con tu amigo por eso. —No quería que la amistad de ellos dos acabara por algo que a su parecer era tan insignificante. Jungkook suspiró, estaba por contestar algo pero su Hyung volvió a hablar.
— No es como si fuéramos pareja o algo.

Hoseok respondió sencillo, no había malicia en sus palabras; pero a Jungkook eso lo hizo sentirse mal, era cierto, para su Hyung solo era un amigo más.

— Hyung, yo... —Debía tomar valor, debía sacar sus sentimientos para que viera porque le importaba tanto esa situación. — Creo que tienes razón, debería hablar con Tae. —Se arrepintió de último momento.

Jung solo sonrió pensando que había hecho algo bueno. 

Jungkook por su parte se quedó pensando en que debería hacer, ¿qué debería decir para que su Hyung lo tomara en cuenta? Tal vez debía verse más adulto, Yoongi lo era y el tal Jin del que Hoseok estuvo enamorado en la escuela también lo era.




Jeon podía ser muy introvertido y algo tímido cuando se trataba de gente nueva o en nuevos lugares, pero también era muy impulsivo, no le tenía miedo a hacer nuevas cosas.
Y por eso mismo justo ahora estaba saliendo de un estudio de perforaciones, se hizo dos en cada oreja y estaba muy entusiasmado para presumírselo a su Hyung así que fue a su trabajo, esperó que estuviera en la barra ya que así tendría más oportunidad de hablar con él, pero desafortunadamente estaba de mesero, aún así entró y eso no le impidió hablar con él.

— Mira, hyung. —Señaló una de sus orejas y luego mostró la otra.

— ¿Te perforaste? —Vio los aretes que ahora eran parte del castaño y lo vio asentir. — Se te ven bien. —Le dijo con una sonrisa.

— ¿Te gustan las perforaciones? 

— Ah, un poco. Yo no me haría ninguna pero me gusta como se le ven a los demás. —No era tan fan de ellas, ni de los tatuajes, en realidad le temía a las agujas así que en parte era por eso.
— Debo volver al trabajo. —Fue lo último que dijo para volver a lo suyo.

Jungkook se sintió un poco triste, pensó que a su Hyung le gustarían sus perforaciones al punto de que se sonrojaría o le dijera que se le miraban increíbles, lo halagó, pero quería que fuera más.



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