Dividida (Eddie Munson & Steve Harrington)

Capitulo 10 "La fiesta"

El sol me molestaba, abrí mis ojos y me encontraba en mi cama, tenía puesto el mismo vestido de ayer. Vi la chaqueta y el chaleco de Eddie en la silla que estaba frente al tocador. De pronto recordé lo que había ocurrido ayer en la noche y me senté en la cama de golpe.

No había sido un sueño, Eddie me había dedicado una canción y creo que estuvimos a punto de besarnos de nuevo.
Me puse mis pantuflas y baje rápidamente, ahí estaba Eddie frente a la estufa. Vi su espalda y aclare mi garganta para que volteara.

     -Hola dormilona -volteo y me sonrió. – estoy haciendo el desayuno, no quería despertarte.

     -Te lo agradezco -me puse a su lado. Vi que hacía huevos revueltos con jamón, había pan tostado en la tostadora y la mesa ya estaba puesta. – no tenías que molestarte.

     -No es ninguna molestia -sirvió el huevo en los platos y luego dejó el sartén en la estufa. – además es lo menos que podía hacer, ayer me diste un regalo estupendo y corriste como media hora para vernos tocar.

     -Tu habrías hecho lo mismo por mí -nos sentamos y serví un poco de jugo. –

     -Cierto, pero en verdad te superaste con los anillos -alzo su mano y sonrió. – por cierto, Jeff quiere hacer una pequeña fiesta por lo bien que nos fue ayer.

     -Me encanta la idea Eddie -le daba una mordida a mi pan. –

     -Y otra cosa, Alex me dijo que invitaras a Keyla -sonrió de manera picara. – al parecer podríamos tener la primer pareja en el grupo.

     -Es una excelente idea

En el transcurso del desayuno le mande mensaje a Keyla, la cual acepto con gusto, quedé de mandarle la dirección más tarde. Eddie terminaba de lavar los platos y yo ponía las cosas en su lugar.

     -Paso por ti a las siete y media -Eddie se secaba las manos y se puso frente a mí. – te da tiempo de terminar pendientes y bañarte.

     -Te veo en un rato Eddie -le di un beso en la mejilla y lo acompañé a la puerta. –

Lo primero que hice fue terminar el retrato de Eddie, lo cual no me fue muy difícil porque teníamos cientos de fotos juntos. Avance en el paisaje que estaba pintando para el talle y termine unas investigacione. Ya que eran las seis, me apresure a bañarme y cambiarme.

Llevaba un suéter de cuello de tortuga color crema, falda negra, medias negras y mis botines, un poco de maquillaje, perfume y estaba lista.

Escuche que tocaron la puerta, tome mi bolso y abrí. Un muy sonriente Eddie Munson estaba detrás. Traía una playera de Kiss y una camisa de cuadros rojos y negros encima de esta, pantalón negro, tenis blancos, los accesorios de siempre y los recién adquiridos anillos.

     -Estas radiante -creo que se estaba haciendo costumbre que me mirara de arriba hacia abajo, no pude evitar el rubor en mis mejillas. –

     -Gracias, te ves divino como siempre -me tomo de la mano y nos subimos al auto. –

     -No traes labial rojo como siempre -me miro un poco extrañado y arranco. –

     -Quería probar algo nuevo -traía un humectante labial, claramente mentí sobre mi razón de no llevar mi labial de toda la vida, pero no era necesario entrar en detalles. –

     -Igual te ves hermosa -la calidez de su mano en mi rodilla me confortaba como siempre, no tarde en cubrirla con mi mano. –

El camino fue muy rápido, media hora y ya habíamos llegado. Le envié la ubicación a Key, me dijo que llegaba en diez minutos.

Fuimos recibidos por un muy sonriente Alex que nos abrazó a ambos. Entramos y era una casa bastante linda, se notaba que tenían dinero. Pero lo mejor es que Alex es una persona muy linda, que no se siente mejor que los demás solo por el hecho de tener más dinero.

     -Hay cervezas en la barra y un poco de pizza por si tienen hambre -señalo la enorme cocina de azulejo azul. –

     -Muchas gracias Alex -choque a Eddie con mi hombro para ir hacia la barra. –

     -Jan -volteamos en su dirección. - ¿Keyla vendrá? -pude notar un leve rubor en sus mejillas. –

     -Claro, ya no debe tardar -sonreí, estaba enternecida de ver al rubio rudo nervioso por mi amiga. -

Había pasado una hora y el ambiente era agradable. Eddie y yo habíamos comido y bebido un poco, no quería beber demás para poder estar consciente de todo.

Keyla platicaba con Alex y se veía muy contenta, al parecer Eddie tenía razón y tendríamos a la primer pareja del grupo.

La música era solamente rock y metal, lo cual no me molestaba, pero quería algo lento para poder bailar con Eddie de nuevo.

     -Vuelvo en un segundo

Eddie fue hacia Alex, le dijo algo y le dio su celular.  Unos segundos después se empezó a escuchar Snowman de Sia. Todo estaba saliendo muy bien, sentía las mariposas en mi estómago en cuanto volvió hacía mí, me tendió su mano.     

     -¿Quieres bailar?

     -Claro Munson -tomé su mano, avanzamos unos pasos. -

Sus manos se aferraron a mi cintur. Decidí poner mis manos en su pecho esta vez.
    
     -¿A qué se deben tantas invitaciones a bailar? -el río un poco, se acercó aún más a mí, mi corazón comenzó a latir muy rápido y las mariposas empeoraron. –

     -Creí que querrías bailar conmigo -pego su frente con la mía. –

     -Me conoces demasiado bien -me puse de puntitas y me acerqué a él. –

     -Amigo, es urgente -Bruno tomo a Eddie del hombro separándolo de mí. –

     -Vuelvo enseguida preciosa -me dio una última mirada y se dio la vuelta. –

Parecía que el destino se interponía una y otra vez en este tipo de momento. Pude ver a Keyla alentarme a ir tras él. No tuve que pensarlo ni en segundo, esta vez no dejaría pasar la oportunidad. Estoy convencida que si no lo hago me terminare arrepintiendo.

     -Al diablo -tome a Eddie del brazo y lo gire hacia mí, sus ojos se encontraron rápidamente con los míos. Conectamos, pero antes de que pudiera decir algo sujete su cuello y lo jale hacía mi con fuerza. -

Sus labios se estamparon con los míos. Se sorprendió, pero no tardo en corresponderme y tomarme de la cintura. Nuestros labios iban en perfecta sincronía, en un beso tierno que era más que ansiado desde hace un tiempo. Sus labios eran muy suaves, un ligero sabor a cerveza era percibido. No podía ser más feliz. Me separé un poco de él y sonreí.

     -Te espero con Keyla -lo dejé confundido pero muy sonriente, asintió y me acarició levemente la mejilla. Me di la media vuelta y fui en dirección de mi mejor amiga que me veía con una felicidad enorme. –

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Hola a todas, capitulo nuevo y al fin paso 🙈 agarrense de los calzones de ahora en adelante para lo que se viene, gracias a las poquitas que leen y votan, por ustedes es que aún sigo con esto ❤️