Jisoo
Me revolví incómoda en mi asiento, mientras miraba de reojo a Chaeyoung.
Hacía cinco horas que habíamos tomado aquel avión.
Y hacía seis que Chaeyoung no me hablaba.
Bueno, en realidad sólo me hablaba para ordenarme cosas. 'Súbete allí', 'Siéntate', 'Camina hacia allá'.
Era extremadamente frustrante.
Y lo peor era no saber el porqué.
Chaeyoung tenía un estado de ánimo tan voluble. Estaba de buen humor, y de la nada, se enojaba.
Bufé, ganándome una mirada de reojo por parte de la rubia.
Desde que habíamos subido al avión, había intentado dormir, lo cual me fue imposible. Luego había intentado leer, lo cual también me fue imposible.
Lo único que podía hacer era estar allí, sentada, divagando sobre el porqué de su distanciamiento.
—¿Cuánto falta?
Chaeyoung parpadeó durante unos segundos, apartando la mirada de unos documentos para clavarla en mí. Me sonrojé.
—Unas siete horas.
—Um...—. Me recosté sobre el asiento, mirando por la pequeña ventanilla. —¿Y luego?—. La oí suspirar levemente, y me giré para mirarla. No había levantado los ojos de ese papel. —Chaeyoung—. No recibí respuesta. —Chaeyoung... ¡Chaeyoung!
Enfadada, estiré mi mano y le quité el documento.
Chaeyoung alzó la vista, azorada.
—¿Qué haces?—. Me preguntó, completamente fuera de lugar.
Claramente, no está acostumbrada a que le hagan eso.
—No me respondes.
—No quiero hacerlo—. Respondió secamente, y estiró la mano para tomar los papeles.
Los aparté de su alcance.
—¿¡Qué mierda está mal contigo!? Esta mañana estaba todo perfectamente, y de un segundo al otro te pones así, ¿Qué sucede?
Chaeyoung me miró a los ojos durante unos cuantos segundos, y pude notar el inmenso debate interno que estaba llevando a cabo.
Finalmente, sacudió la cabeza con resignación.
—Nunca nada estuvo perfectamente, Jisoo. ¿Sabes por qué? Porque tú eres mi rehén, y yo te secuestré. ¿Entiendes lo que digo?—. Fruncí el ceño. —Esto estuvo siempre mal, a pesar de que ambas nos hayamos olvidado de eso durante un tiempo.
—¿Estás diciendo que te arrepientes de todo?
Chaeyoung suspiró, desviando la mirada.
—No hablaré más sobre eso.
—¡Debes hacerlo!—. Espeté y Chaeyoung se giró hacia mí, tomando mis hombros con brusquedad.
—Fui una idiota. Nunca debería haberte llevado conmigo en contra de tu voluntad, nunca.
—Me salvaste de Mina—. Susurré con un hilo de voz.
Chaeyoung soltó una carcajada sin humor.
—No lo digas como si hubiera hecho un acto de caridad. Sólo lo hice por mí en aquel momento. ¿Y para qué? Para someterte a mí. No sé quién es peor, Mina o yo—. Susurró esto último más para sí misma, y yo fruncí el ceño.

ESTÁS LEYENDO
Suya | Chaesoo
Fanfiction𝗖𝗦» Lo último que se esperó Jisoo al ser secuestrada, era terminar en las manos de una mujer como Park Chaeyoung. Terriblemente poderosa, posesiva y seductora. Rosé no sabía porqué la había aceptado como un 'regalo'. Lo único que sabía era que en...