Prometo Protegerlos

Yo lo sé todo

Bárbara

Ya habían pasado dos semanas desde que hable con Lex, dos semanas en las que estuve pensando en lo que me dijo, dos semanas en las que intentaba hablar con Kara y Lena pero ellas siempre se iban, según me enteré hace cinco días ambas se habían enterado del embarazo de Kara y yo sentí terror al imaginar cómo se pondría Lex al enterarse.

Volví a hablar con Eve la asistente de Lena pero nuevamente me dijo que Lena no se encontraba en L-Corp, desde que conoció a Kara había empezado a retirarse temprano o habían veces en las que no llegaba y según me contó Eve últimamente prefería trabajar desde su casa; maldita vida de millonarios, Lena al ser dueña de L-Corp podía decidir qué hacer y cómo hacerlo sin que nadie le dijera absolutamente nada.

Resignada volví a llamar a Kara pero ella nuevamente ignoro mis llamadas, me sentía atada de pies y manos, había intentado por todos los medios pero no lograba encontrarme con ninguna de ella y Lena por alguna extraña razón parecía odiarme e ignorar mi presencia; salí de L-Corp con la intención de ir al departamento de Kara esperando que está vez si estuviera. Estaba por subir a mi auto cuando alguien me tomo del brazo.

-¿Vas a algún lado?- pregunto la voz de aquel hombre que tanto odiaba.

-¿Qué haces aquí?-pregunte soltandome del agarre de Lex.

-Vine a verte porque quiero hablar contigo- dijo Lex poniéndose serio.

-Yo no tengo nada que hablar contigo- dije intentando abrir mi auto.

-Tú no pero yo sí, así que me vas a acompañar- dijo Lex impidiendo que yo abriera la puerta de mi auto.

Lex me llevo casi arrastrada a su auto y condujo nuevamente hasta aquel restaurante de la vez pasada.

-Si me vuelves a traer aquí pensarán que tengo algo contigo- dije viendo a los meseros que nos observaban curiosos.

-No te oreucupes por eso, este lugar es súper discreto y créeme lo que lo que menos quiero es verme ligado con alguien de tu...clase- dijo Lex con disgusto.

Nuevamente ordene un plato de pasta y Lex pidió un filete de ternera, Lex me observaba mientras esperábamos a que trajeran la comida.

-No has cumplido con lo que te ordené - dijo Lex con molestia.

-Yo eh estado ocupada- dije sin darle importancia a lo que dijo.

-¿Ocupada intentando hablar con mi hermana y tu amiguita?-pregunto Lex mirándome furioso.

-¿Cómo lo sabes?- pregunté asustada.

-Mmmju lo sé porque ¡YO LO SÉ TODO!- dijo Lex burlándose de mí.

-Yo... solo- balbuce antes de que Lex me interrumpiera.

-Supuse que harías eso, yo considere la posibilidad de que intentarás ser igual que tú padre- dijo Lex burlándose y yo tense la mandíbula al escucharlo mencionar a mi padre- sospeché que intentarás ser igual al comandante Gordón, un héroe, alguien que se basa en la verdad y la justicia pero adivina ¿Qué?- dijo Lex tomando mi mano.

-¿Qué?- pregunté aterrada.

-Las personas como tú y tu padre son las que pierden... Sí no me crees ve a tu padre, el perdió a tu madre al luchar por la justicia y hacerse enemigo de la persona equivocada y todo por ayudar al idiota de Bruce Wayne, tu perdiste a tu madre por el estúpido espíritu de heroísmo de tu padre...¿Qué estás dispuesta tu a perder?- preguntó Lex con malicia.

-Yo solo quiero hacer las cosas bien - dije intentando soltarme.

-Hahaha eres tan patética, tan igual a tu estúpido padre pero sabes... Yo no soy igual al enemigo de tu padre, yo no me voy a detener con matar a una persona... Yo eliminaré a quien tenga que eliminar y no dejaré que nadie impida mi cometido- dijo Lex colocándole un brazalete en la muñeca.