SORRY, HEART. |NoRen|

8.

por suerte, el departamento de jeno estaba en el segundo piso y renjun solo tuvo que cargarlo por un par de escaleras que el sintió como cuarenta millones de escalones los cuales lo llevaron hasta la primera puerta en un pasillo larguísimo. jeno insistió en bajarse para abrir la puerta, dejando que lo ayudara a caminar hasta el interior, cayendo desplomado y sangrando sobre el sofá en mitad de la sala.

por instinto buscó el botiquín en el baño, tomando aquella caja metálica en la que el rubio guardaba los elementos para curar heridas, viendo si había todo lo necesario pues si no conseguía arreglar lo que provocó entonces cargaría con eso todos los días, sabiendo que tendría que verlo siempre y que después de todo aquel chico podía ir al hospital y culparlo por eso.

regresó hacia el con la caja abierta, ayudándole a quitarse el abrigo y la camiseta finalmente viendo la herida que había provocado en la fina piel que curiosamente había recorrido con la boca poco tiempo atrás, ahora tendría una cicatriz ahí y pues no había forma de que se recuperaba correctamente si no suturaba su piel. limpió la sangre y la herida, sintiendo una de las manos de jeno apretar su delgado brazo pues el ardor y el dolor estaban a punto de volverle loco, el coreano le decía que confiaba en el y le pedía que por favor lo ayudara, pero ni siquiera el sabía muy bien cómo empezar a terminar. siempre había curado las heridas de sus amigos e incluso las propias, pero por alguna razón le daba miedo hacerle más daño a él.

claro, como si apuñalarlo no hubiese sido la gran cosa..eres un idiota huang renjun..

jeno jadeaba de dolor cuando la aguja perforaba su piel, intentaba estar tranquilo y ahora era renjun quien le hablaba para que mantuviera la calma pero realmente le costaba. le dolía, lagrimeaba y solo pensaba en todo el peligro al que se había metido por haberse ido mientras ocurría todo, conocía la pandilla de renjun y sabía que todos esos chicos eran amigos pero su pandilla era algo completamente diferentes, no habían vínculos por ningún lado y si necesitaban matar a alguien del grupo entonces lo harían sin problemas, le costaría dar una razón que tenga sentido si es que le pedían explicaciones.

— ya está, ¿te sientes bien? — renjun preguntó limpiando sus manos luego de vendar bien la herida, mirando sus cansados ojos notando que seguía perdido en sus pensamientos. — iré a conseguirte aspirinas de algún lado, intenta beber un poco más de agua.

renjun se lavó como pudo las manos y la cara, saliendo del departamento teniendo que buscar alguna farmacia cerca para conseguir los medicamentos adecuados, vaciando por completo sus pobres bolsillos. regresó tan pronto como pudo, pero al subir las escaleras vió que habían dos hombres armados frente a la puerta de jeno, golpeando su entrada y prácticamente gritando que alguien le abriera. rápidamente se escondió, sabía quienes eran esos dos así que tendría que pensar en alguna solución pronto, pero nada sería tan eficiente como simplemente atacarlos y buscar la forma de culparlos como asaltantes luego.

pero antes de que el pudiera hacer algo, una muchacha joven pasó por el pasillo y sin preocuparse por nada más empezó a gritar como desahuciada, sus gritos eran agudos y ya los vecinos habían salido de sus departamentos como para que los hombres peligrosos le hicieran algo sin que los vean. ella siguió gritando que estaba el peligro y que los intrusos eran acosadores que querían hacerle daño y ante esa amenaza los propios vecinos llamaron a seguridad y se los llevaron a la planta baja luego de que llegara una patrullera.

renjun aprovechó el escándalo para meterse en el departamento de jeno, viéndolo cansado y adolorido en el sofá, le explicó lo que había pasado luego de ayudarlo con las pastillas. el mayor solo pensaba en cómo se había esforzado el chino para curarlo, entendiendo que no le había lastimado con mala intención y que solo se había puesto nervioso, volviendo a tener en la cabeza lo buenos amigos que eran en su pandilla.

y el nunca había tenido amigos, mucho menos ahora. no sabía cómo iba a afrontar que mató a uno de sus compañeros para ayudar a renjun, el lo había visto cuando todo empezó y le siguió al ver que se peleaba con ese chico que era bastante nuevo en su grupo, y ahora el estaba muerto porque el decidió defender a "alguien más". si alguien lo vió entonces ese sería el peor de sus problemas en ese momento.

pasaron veinte minutos hablando de que diablos iban a hacer, pero alguien volvió a llamar a la puerta.