Raten [BNHAxOc]

Capítulo 45

Todos salieron disparados hacia los escombros después del aviso de que podían comenzar a ayudar a los heridos resonó en las bocinas. 

Evelyn se quedó al inicio, junto a Nagamasa y otros estudiantes de escuelas diferentes. 

–Primero tenemos que estabilizar el piso por si la explosión dejó el espacio frágil. 

Nagamasa asintió, quitando del camino los escombros. Ella quedó en el centro del suelo partido, y con un pisotón las partículas se reacomodaron, dejando el espacio libre de fisuras. 

Los demás empezaron a organizar las áreas que designarían para los tipos de heridos que llegaran, así que ella decidió salir de la zona para buscar personas. 

Saltó entre los edificios derribados hasta que escuchó el grito de un niño. 

–¡¡AYUDA!! ¡¡ALGUIEN AYÚDEME!!

Evelyn se detuvo en seco, bajando hasta quedar a la altura de donde provenía el grito, había un niño con una pierna bajo algunas rocas. 

–¡La ayuda ya está aquí, pequeño!– Sonrió, poniéndose de rodillas frente a él. 

Tenía sangre en la pierna derecha, y estaba cubierto de tierra. 

–¡¡Mi pierna!! ¡¡Me duele mucho!! 

Ella asintió– Lo entiendo, pero ¿Puedes ser fuerte por un momento? ¡Se ve que eres un niño muy valiente! 

El niño sollozó, y la Flores tocó con su palma la roca que tenía atrapada su pierna. Con un vistazo notó que si la movía las demás caerían, así que desvaneció a todas las que estaban a su alrededor con un chasquido. 

Sacó del cinturón que traía puesto una venda, creando con partículas circundantes un rectángulo lo suficientemente duro como para hacer un  torniquete útil. 

–Te llevaré al área segura, ¿De acuerdo? Allá podemos buscar juntos a tu familia. Vas a estar bien, te lo prometo. 

El niño asintió entre sollozos, y Evelyn sacó de otro compartimento de su cinturón una paleta de dulce. 

No tardó mucho en llegar a la zona que habían acondicionado para tratar a los heridos. 

[...]

Sabía que tenía puntos suficientes como para pasar el examen porque ninguno de los civiles a los que había ayudado se había pronunciado ante la manera en la que los ayudaba, así que decidió ser más apoyo que realmente la fuerza principal. 

Ahora mismo estaba acercándose a una de las zonas que más ruido tenía.

No sabía si estar decepcionada o divertida, pero se encontró con los chicos de Shiketsu.

Nagamasa estaba regañando a Inasa por usar métodos tan bruscos a la hora de ayudar a heridos cuando ella decidió acercarse. 

–Vamos, vamos no hay que ser tan duros con él. Todos estamos aprendiendo.

Si pudiera ver debajo de la capa de cabello que cubría a Nagamasa, estaría segura de que había una mirada fría. 

–No parece que quede algo que aprender de tu parte, Furawāzu. 

Ella se alzó de hombros para quitarle importancia– Tengo más experiencia, eso es todo. 

Nagamasa bufó– Como sea, ¿Alguien ha visto a Camie?

Todos los estudiantes de Shiketsu comenzaron a murmurar al respecto, por lo mientras, ella le daba consejos a Inasa que podían ser de ayuda a la hora de rescatar a alguien.