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CAPÍTULO CINCO
años atrás, daegu

-No lo sé, Hae-in. -su amiga ladeo la cabeza- Jamás he visto algo tan costoso antes... creo que es mucho dinero.

El vidrio transparente mostraba del otro lado una pequeña caja azul en exhibición, y en su interior de terciopelo, un anillo plateado con una inicial en el centro, esta podía ser personalizada, aunque claro, llevaba un costo adicional. Sus ojos brillando eran señal de cuánto lo quería, sus labios se fruncen a la idea de tenerlo en su mano, extenderlo frente a él y recibir una deslumbrante sonrisa.

La semana pasada su novio pasó por la misma tienda de joyería, vio el anillo y dijo lo lindo que era, como amante de las joyas falsas -pues seguía las absurdas tendencias de sus raperos favoritos- no podía evitar deslumbrar ante una tan hermosa. Esta era real, por lo tanto, su costo era demasiado grande, tanto que ni trabajando extra podría conseguirlo. YoonGi se rindió, pero ella no, ella iba a conseguirlo para él. Era su sorpresa de aniversario.

-Se lo voy a obsequiar, ya verás. -su puño se cierra, se daba aliento a sí misma.

Y su amiga levantó los hombros desinteresada, para nadie era sorpresa lo persistente que podría llegar a ser. De ser la mejor alumna, a la mejor novia, no sonaba tan loco.

-Sí tu lo dices... -desvió la vista del vidrio y se giró a la calle, otros alumnos pasaban en grupos, ya era de noche-. En fin, ya es hora de la cena, vamos al puesto de ramion, ¿si?

( ... )

actualidad, daegu

El anillo estaba allí, guardado intacto en la caja. Con un cigarrillo en sus labios, y sentada a la orilla de su ventana, Hae-in expulsa el humo en sus labios, sin perder la vista de esa maldita joya. No era la más cara, ahora que es adulta y tiene un buen ingreso salarial, nota que los cien mil wons que le costaron no es una cantidad exorbitante como pensaba hace años. Podría comprar una igual si es que lo quiere, pero entonces no la obsequiará, no sería tan estúpida de pasar noches en vela por un chico, por un amor de adolescencia.

Min YoonGi era eso, su amor de adolescencia, e infancia. Después de todo, los años la ayudaron a superarlo, hubieron más hombres luego de él, más atractivos, más inteligentes, y más atentos. ¡Mierda! Han pasado nueve años, alrededor de diez chicos y ninguno le hizo sentir la misma emoción que vivió en su juventud, corriendo en los campos de cultivo o tras escapar de la escuela para fumar juntos en la parte trasera de la camioneta de su hermano. No hubo una emoción tan grande como esas, no está segura de si podrá haber algo que se compare a su primer amor.

No entiende qué es eso lo que la mantiene aún pensando en él, cuál es ese algo que la hizo quererlo de una forma tan asfixiante. Hubieron personas mejores en variedad de aspectos, en la cama, para mantener una charla, para presentarle a sus padres... ¡Ninguno era el jodido Min YoonGi! Que se joda, él y su vanidad. Él y el anillo.

-¡Jódete! -en un arrebató de ira, no pudo contenerse de aventar el anillo por la ventana, yendo a parar en su jardín.

El cigarrillo fue aplastado. Al igual que sus emociones.