03 de septiembre, 2020
Querido Diario:
Hoy conocí a un chico increíble, si nombre es Riven, lo sé, es un nombre peculiar, igual que él...
Lo primero que hizo antes de conocerme fue empaparme, no con malicia, literalmente me empapó con agua de la calle, luego me llevó al McDonald's y comimos helado.
Confesión: Es tan atractivo, tiene unos increíbles ojos que se asemejan muchísimo al océano azul y un cabello oscuro tan lacio en el que desee hundir mis dedos durante toda la tarde.
También es muy gracioso, al menos a mí me resultó graciosa su manera de hablar, tiene un acento inglés mezclado con escoses hermoso, pero también le suma un fingido acento americano que lo hace sonar como un extraterrestre.
La verdad es que la pasamos en grande esta tarde y lo mejor de todo es que me invitó al cumpleaños de su hermana, Bree, el sábado. Al principio no estaba segura, pero luego dijo que podía ir con Jordyn y acabé por acceder.
Lo mejor de todo es que él no tiene ni idea de quién soy yo o de quién es el viejo decrépito que contribuyó a mi creación hace diecisiete años y la verdad, si es por mi, no lo va a saber.
Por primera vez estoy viviendo lo que es agradarle a alguien por ser tu y no por tu apellido y pienso disfrutarlo todo lo que sea posible.
Kiki E. R. Davies.
Cerré el pequeño librito y lo guardé en su lugar detrás del retrato junto a mi cama y busqué el pijama en mi armario antes de entrar al baño para ducharme.
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04 de septiembre, 2020
— Definitivamente enloqueciste, Kiki —me dijo Jordyn por enésima vez desde que había comenzado a contarle la historia de lo que había pasado ayer con Riven.
— Solo quería fastidiar un poco al viejo decrépito —aclaré— solo que al final acabó cayéndome fenomenal el chico.
— Estás loca Kaylee Elizabeth. Tuviste suerte ayer pero no puedes irte con un extraño siendo quién eres.
— Dee, ya te dije que solo quería fastidiar a Roger, no me fastidies más.
— Bueno ¿y qué? ¿Lo lograste?
— ¿Quieres ver mi registro de llamada? Tengo como setenta llamadas perdidas.
— Paso, prefiero ver post de Instagram para elegir el look que usaremos en la fiesta del sábado.
— ¿Entonces vamos a ir? —pregunté, ilusionada.
— Por primera vez a mi mejor amiga le gusta un chico, claro que vamos a ir.
— No me gusta —me reí.
— Y yo no sueño con el día en que papá me deje ser digital influencer. Por cierto, el otro día estaba en Instagram y encontré un perfil de una muy buena: AiPastor07.
Y así fue como Jordyn comenzó a hablarme de esa digital influencer española que hacía post grandiosos. Dejé de prestar atención cuando una notificación hizo sonar mi teléfono, al principio pensé que se trataba del viejo decrépito, pero luego noté que era de Instagram.
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El Diario de Kaylee (Libro #1: Los Hermanos Ryder) ©
Novela Juvenil«No se puede huir de lo que te acelera el corazón y te detiene el tiempo» - Danns Vega