𝒞𝒶𝓅𝒾𝓉𝓊𝓁𝑜 𝒟𝒾𝑒𝒸𝒾𝑜𝒸𝒽𝑜 (C18)

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Después de aquello me llevaron a otro sitio similar al primero

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Después de aquello me llevaron a otro sitio similar al primero. Axel dijo que yo era una diosa y reina del inframundo. Además, me contó un poco sobre mi mito y el de Nergal, y más aparte, sobre la relación que tuve con Hades.

Era un poco incómodo saber que, con ambos tuve un matrimonio y, además un hijo fue concebido en cada uno.

Al llegar a aquel lugar, todos se alegraron al verme e hicieron una reverencia en mi presencia. En verdad intenté recordar, pero ninguna de sus caras se me hizo conocida.

En cuanto estaba a punto de llegar a mis aposentos, los gritos de alguien nos interrumpieron.
-¡Madre, madre ¿estás bien?! -dijo otro chico al llegar a nosotros.

Antes de llegar, Axel se interpuso entre nosotros.

-¿Qué?, ¿Quien eres tú y por qué te interpones entre mi madre y yo? -dijo el recién llegado.

-¿Tu eres Namtar, Cierto? Es una desgracia poder conocerte por fin, querido hermano mayor -respondió Axel al cambiar su expresión a una aterradora.

-¿Qué?, ¿cómo dices? -dijo.
No tuvo una respuesta, pero en cambio dos golpes del bastón de Axel llegaron a su hombro y a su pierna izquierda. Pensé que lo iba a tirar, pero al intentar tocar su pierna, él se defendió.

-¿Por qué me golpeas? ¿Qué acaso no somos hermanos? -exclamo Namtar.

-¿Y todavía preguntas el por qué? Hermano, eres un idiota -dijo al regresar a mi lado-. No tiene caso discutir contigo, pero no te quiero cerca de nuestra madre

-¿Qué?, Aquí el idiota eres tú, no pienso dejarla contigo -dijo Namtar al sacar su espada.

-Por favor, paren -insistí al interponerme entre ellos.

-Escuchame bien Namtar, no te acerques a nuestra madre, te lo prohibo -dijo Axel.

-¿Te lavaron el cerebro, cierto? De seguro fue ese idiota de Nergal -le respondió.

-¡Te equivocas! Y no es por defenderlo, pero de lo que me di cuenta es que, todo lo que mi madre está viviendo es tu culpa

-¿Cómo te atreves a decirme eso?

-Por favor, detenganse -insistí.
Hubiera sucedido algo peor de no ser por bebé Urnil. Sus lamentos nos interrumpieron.

-¡Escuchen los dos! -grite muy enojada-. Si en verdad son mis hijos no quiero verlos pelear. De ahora en adelante se van a llevar bien y sobre todo no se van a ofender, y más les vale hacerlo o no me importa que sean adultos, los voy a agarrar a cachetadas para que comprendan

-Pero madre, yo no venía a pelear -dijo Namtar.

-No me importa. Y deja que recupere mis memorias Namtar, al parecer hay algo que debo de hablar contigo -le advertí. Luego di media vuelta y continúe mi camino hasta mis aposentos.

Síndrome de Estocolmo (Hades x Ereshkigal)[SNV + FGO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora