Buscando mi destino

Quiero decirle la verdad

Edward pov

Ya llevo un mes de novio con mi hermosa Bella, y dos semanas que se que es hija de Carlisle, quiero que ella sepa la verdad llevamos dos semanas buscando a su padre...pero me siento mal por no poder decir nada, por estar dandole pistas falasas para que no descubra aun quien es su padre, Carlisle aun no quiere decirle nada...dice que aun no es el momento. Lo cual me pregunto ¿Cuando sera el momento? Aun recuerdo todas las dudas y preguntas de mi adorada Bella cuando comenzamos la busqueda...

Flash back

Estábamos en medio de la sala, sentados en el suelo Bella y yo, reuniendo pistas para encontrar a su padre...

-No puedo creer que solo tenga lo que Aro me ha dicho desde que pregunte por mi padre –dijo Bella pensativamente-. Es muy extraño que tenga tan poca información sobre él, ¿has tenido tu suerte en internet?

-No, aquí no aparece nada, solo asaltos o asesinatos a causa de pandillas en aquel tiempo además de la mención de las guerras, no hay una que hubiera podido ser provocada por un vampiro –hice una pausa-, los asesinatos fueron muy mal hechos para que uno de mi especie pudiera provocarlo, lo siento amor no hay algo o alguien que pueda estar relacionado contigo; al menos no en internet.

Suspiro.

-¿Qué hare Edward? Tengo que encontrarlo.

-Haremos todo lo que podamos Bella –mire hacia la puerta-. Te lo prometo.

Como me gustaría poder decirle que Carlisle es su padre, que lo escuchara y resistiera de esta absurda venganza que el mismo Aro provoco en mi hermosa Bella, ¿Por qué? Eso no lo sabemos; pero tengo un extraño presentimiento que esto no acabara bien.

-¿Amor? ¿Edward? –escuchaba la voz de Bella hablarme-. ¡EDWARD!

Sacudí mi cabeza y voltee a verla.

-¿Qué pasa amor? –dije aun pensativo.

-Nada es solo que de pronto tu mirada estaba perdida, como si estuvieras en otro mundo...

Sonreí.

-Estoy bien, solo pensaba en... que te amo demasiado y que quisiera que lo nuestro amor dure para siempre –mentí bueno casi en todo porque la verdad si quería vivir mi existencia con ella para siempre.

Bella se puso de pie y se acercó a mí.

Abrí los brazos para recibirla y sentarla en mi regazo.

-Gracias –dijo de pronto.

-¿Gracias? ¿Por qué? –pregunte confundido.

-Por estar aquí, por apoyarme en todo esto en la búsqueda de mi padre, por amarme, por querer pasar tu eternidad conmigo –me dio un pequeño beso en la mejilla-. Puedes estar con tus hermanos, cazando, tocando una nueva melodía en el piano pero en lugar de eso estas aquí conmigo –me abrazo-. Gracias... y por cierto también te amo.